Titulo: ¿Por qué?

Autor: unknownsherlocked

Famdom: Sherlock BBC

Descargo de responsabilidad: Sherlock y el resto de los personajes pertenecen a la BBC y a Sir Arthur Conan Doyle.

CAPÍTULO 1:

Sherlock asomó la cabeza en el callejón, con cuidado, nadie debía verlo, el estaba "muerto". "Es para proteger a John" se decía a sí mismo para darse ánimos. Volvió a adentrarse en el callejón, Molly llevaba 12 minutos y 32 segundos de retraso. El detective hiperactivo se revolvió el pelo.

-¿Dónde estás? ¡Dónde! -decía sin poder contenerse, llevaba un año y medio sin un solo caso y, para empeorarlo, Molly no le dejaba fumar -¡TE JURO! -decía sin poder contener la ira -¡QUÉ SI NO APARECES EN LOS PRÓXIMOS 3 MINUTOS, MOLLY HOOPER, HARÉ LA MAYOR LOCURA QUE SE ME OCURRA, Y CRÉEME QUE AHORA MISMO SE ME PUEDE OCURRIR CUALQUIER COSA! -Sherlock fue contando con los dedos todas las bobadas que se le ocurrían- !... O TAL VEZ ME TIRE A LAS VÍAS DEL TREN...! -una tos fingida interrumpió el monólogo del detective, que ahora parecía más un niño de cinco años al que no le quieren comprar un cochecito.

Sherlock miró hacia atrás esperanzado, pero ese "sentimiento" le duró poco.

-¿Qué te trae por los barrios bajos de Londres, hermano? ¿Acaso la Reina no os solicita? -dijo haciendo una fingida reverencia. Mycroft lo miró sin inmutarse por los despectivos comentarios de su hermano pequeño.

-Molly no ha podido venir, así que he aprovechado la oportunidad para hacerle una visita a mi querido hermano -dijo poniendo la voz que tanto molestaba a Sherlock.

-¿Por qué no ha podido venir Molly? -esa era la pregunta que Mycroft no quería responder.

-A diferencia de ti, ella trabaja y tiene compromisos, porque está viva.

-¿Qué compromisos?

-Nada que te interese, Sherlock -Mycroft sabía perfectamente que su hermano no iba a dejar de preguntar. Emitió un suspiro -prometes no hacer ninguna tontería -Sherlock alzó una ceja, su hermano sabía perfectamente que Sherlock cumplía siempre sus promesas, pero muy pocas veces prometía algo. Volvió a suspirar, era inútil intentar luchar contra el cabezota de su hermano -John tuvo un accidente, y como la señora Hudson no puede encargarse de él Molly le ayuda, pero tranquilo, solo se cayó de una bici, Molly estará aquí en 10 minutos más o menos -Mycroft se dio la vuelta y empezó a andar, dejando a Sherlock con la boca abierta.

Los minutos pasaban lentos, muy lentos, intentaba no pensar en John, pero siempre acababa haciéndolo.

-Una grieta, dos, tres, cuatro, cinco- decía contando a una velocidad de vértigo todas las grietas que había en la pared que tenía enfrente- cincuenta mil trescientas veintiuna, ah esa se parece a John -soltó un bufido de resignación -¿por qué no puedo sacármelo de la cabeza?

Contó varias veces la grieta de la pared, cada ventana rota y cada gotera, pero John siempre aparecía de algún modo, desconcertándolo. No pudo más, recorrió el callejón y se paró al final, mirando hacia ambos lados, sin encontrar ni rastro de Molly, "tal vez venga en taxi" pensó, empezó a mirar los taxis, sin darse cuenta de que se iba acercando cada vez más a la carretera, quedando al descubierto. Uno de los taxis le llamó la atención.

Miró el taxi con mucha atención y lo vio, era John, tenía una expresión sería y parecía haber envejecido varios años. En ese momento sus miradas se cruzaron, el rostro de John pasó por varias expresiones, asombro, alegría, incredulidad y por último ira. Hizo un gesto a taxista para que se parase, mientras Sherlock huía hacía el callejón ocultándose entre las sombras. Vio a John aparecer al otro lado del oscuro pasadizo abandonado.

-Ya estoy alucinando otra vez -dijo Watson sobándose las sienes -no sabes cuanto te extraño Sherlock... -dijo en susurrando. El detective tuvo el impulso suicida de ir a por él abrazarle, explicarle por qué se había ido y decirle que él también le había extrañado, acordándose de él en cada momento, pero se contuvo, esperó a John se hubiese alejado lo suficiente y se quedó allí plantado en medio de la calle, mirando la dirección que su único amigo se había ido.

Notó una mano en su hombro y se dio la vuelta, allí estaba Molly, sonriendo pacientemente como siempre, aunque Sherlock sabía bien que a veces le apetecía borrar esa sonrisa de la cara y darle un buen golpe en la cara, pero se controlaba, siempre lo hacía.

-¿Nos vamos, Sherlock?

-Después de ti -dijo sonriendo, aunque en lo más profundo de su alma, sentía como la desesperación y la agonía por no poder estar con John, lo consumían, más que pasar cualquier tiempo sin resolver un caso o fumar, porque sin John, ya no era lo mismo, nunca sería lo mismo.

Este es mi primer fanfic sobre Sherlock, en principio es un OneShot, pero si dejáis Reviews subiré más caps. Gracias por leer ^^