Necesito su ayuda para este fic... hace tiempo que me da vueltas en la cabeza y no me animaba a escribirlo, naturalmente dependerá de ustedes si lo sigo o no...
Antes de que empiecen a leer tengo una aclaración: este fic se situa promediando la primera temporada de Castle... lo digo porque como leerán, Kate y Rick son todavía Castle y Beckett, no tienen ni la más remota confianza entre ellos y Rick está desesperado por romper la barrera que Kate tiene a su alrededor, simplemente porque quiere conocerla... además de otras cosas, claro... espero que les guste!
To be or not to be
Richard Castle sonrió al ver a lo lejos a quien se estaba convirtiendo en su musa favorita. No es que hubiera tenido muchas a lo largo de su historia como escritor, pero definitivamente Kate Beckett había llegado a su vida en el momento justo, el más oportuno… y gracias a eso, había recuperado su inspiración.
Pero había algo que aún lo inquietaba, necesitaba acercarse a ella, conocerla y la realidad era que a pesar de que la detective se hiciera la dura con él, Castle sabía reconocer perfectamente la atracción que sentían ambos en algunos momentos.
Con frecuencia se decía a si mismo que solo se trataba de buena química. De que su rechazo originaba en él más interés… pero la realidad era que ella lo rechazaba de la boca para afuera, y frecuentemente, él se encontraba perdido en sus ojos, deseando cumplir todas sus fantasías… e incluso las de ella.
-Buenos días, detective- le dijo al llegar hasta su escritorio con una sonrisa y se dejó caer en su silla.
-Castle…- le dijo ella a manera de saludo, casi sin mirarlo.
-Has dormido bien? Sola? – le dijo él por decir.
Beckett levantó la vista del papel que leía y lo miró alzando la ceja.
-Y esa pregunta a qué viene, Castle?- preguntó sin comprender.
-Solo pregunto…- dijo él con inocencia.
-Acaso quieres más información para tu personaje de "Nikki Heat"?- y al ver que él solo la miraba, sin contestar- o de pronto estás interesado en mi vida personal?- le dijo acercando su cara a la de él, desafiante.
-Yo?- se hizo el desentendido él y una idea cruzó por su cabeza. No había aparentemente ningún caso en el que trabajar, así que pensó en distenderse un poco.
-No te hagas el desentendido, últimamente te la pasas haciendo preguntas personales…
-Beckett… hay algo que quiero decirte- dijo con seriedad él y ella lo miró confundida por un instante.
-Te escucho…- dijo con interés.
-Yo… hace un largo tiempo que yo… yo… quizás te suene raro pero… no me interesan más las mujeres…- le dijo y observó su expresión.
-Si… claro…- dijo ella y rió.
-Beckett, no te rías… me estoy sincerando contigo…- dijo y colocó un dedo sobre sus propios labios, en señal de que era un secreto.
-Pues no te creo… tú no…- dijo ella un poco más seria y sacudiendo la cabeza.
-Creo que estoy empezando a arrepentirme de haber confiado en ti…- dijo e hizo un ademán por levantarse.
-Espera…- le dijo ella que súbitamente, estaba interesada en escuchar su historia- porque no vamos a desayunar por ahí… aquí no hay demasiado trabajo y le pediré a los chicos que me llamen sin nos necesitan…- dijo levantándose.
Castle sonrió, era una de las contadas veces en que ella mostraba algo de interés por lo que a él le sucedía. No es que no le interesara, sino que no lo demostraba con frecuencia.
Caminaron en silencio hasta Remy's y pidieron dos desayunos completos. Al sentarse, ella lo miró con seriedad.
-Cuéntame como fue…- dijo ella y él la miró unos segundos antes de hablar.
-Todo es bastante reciente… luego de separarme de Gina, mi segunda esposa, intenté salir con otras mujeres… al principio, prácticamente me obligué a hacerlo, nunca me gustó estar solo…
-Si…- dijo ella y él la miró y de alguna manera sintió que ella lo comprendía.
-El caso es que comencé a tener algunos problemas… tú sabes…en la cama, y me di cuenta de que las mujeres no me atraían… al principio pensé que era una cuestión de stress… pero luego…
-Espera… me dices que te enamoraste de otro hombre?- dijo Beckett con la boca abierta.
-Digamos que todo se reduce a un par de fantasías… pero… en este momento siento que podría enamorarme más de un hombre que de una mujer…- dijo él con expresión sombría.
Kate alzó las cejas tratando de ocultar su asombro y también su decepción, siempre se había sentido atraída por él, aunque quizás nunca planeara reconocerlo y menos a él.
-Y te juro que no se que hacer, me siento solo… tengo miedo de contar lo que me pasa porque siento que se reirán de mi… y honestamente no se que hago contándotelo a ti… se que nunca te agradé demasiado…
-Bueno…- dijo ella y antes de seguir, tosió con incomodidad- no es eso, Castle… es solo que yo tiendo a ser territorial en mi trabajo… y el hecho de que tú no te hayas formado en la academia de policía, y tenga que pensar en salvarte la vida en lugar de cuidar solo la mía, y en algunas ocasiones la de mis compañeros de equipo, es un poco frustrante a veces, sobre todo cuando estoy cansada…
-Kate…- dijo él y ella lo miró con una mezcla de asombro y satisfacción, le agradaba escucharlo decir su nombre- prométeme que no dirás nada…
-Prometido…- dijo ella y trató de sonreír, pero se tensó un momento cuando sintió la mano de él sobre la suya.
Castle apretó un poco la mano de Beckett y luego la soltó.
-Gracias… y… Kate… te gustaría cenar juntos hoy?… digo… estaré solo y…
-Estaba pensando que… - dijo Kate y lo meditó unos segundos antes de decirle "noche de chicas" para que no le cayera mal el comentario- hoy estoy cansada… quizás podríamos ver una película y pedir comida…
-En… tu casa?- dijo él confundido.
-Por qué no? Me has contado tu historia… creo que te debo una invitación y como no estás interesado en mi… estamos a salvo…- dijo y sonrió, aunque por dentro sintió algo de desilusión.
-Llevaré la comida entonces…- dijo él y ella sonrió…
Esa misma noche, Kate terminaba de ducharse cuando él tocó el timbre. Miró la hora y maldijo no haberse apurado a ordenar su departamento antes de bañarse. No solía recibir visitas y no le gustaba que alguien supiera que casi no paraba en su casa porque pasaba la mayor parte de su vida en el precinto…
Se colocó una toalla alrededor del cuerpo y con el cabello goteando se miró al espejo. Se sintió rara, en otras circunstancias no habría siquiera pensado en dejar que Castle entrara en su casa, pero se recordó que ella misma lo había invitado y encima, que era inofensivo…
Kate suspiró y cruzó el living para abrir la puerta. Aspiró hondo y trató de sonar casual.
Cuando Kate abrió la puerta, Rick tuvo que contener un suspiro y aunque pareció sorprendido, trató de ocultar la forma en que acarició su cuerpo con su mirada.
-Hey, Castle… disculpa mi apariencia, pero se me hizo tarde… puedes pasar si quieres… cierra la puerta…- dijo y él la siguió, con la boca abierta.
-No… no te incomodo?… quiero decir… no tenemos suficiente confianza…
-Si… por eso lo siento…- dijo ella y se dirigió a su habitación.
-No voy a poder hacer esto…- dijo él por lo bajo, tratando de respirar normalmente y obligándose a calmarse.
Unos minutos más tarde, Kate apareció vestida con un vestido sencillo, más que nada cómodo, estaba descalza y se había secado el cabello.
Rick sonrió y ella se sentó a su lado, él se había preocupado por buscar lo necesario para poder comer…
-Traje comida china… oí por ahí que te gusta…- dijo él y ella sonrió.
-Eres una caja de sorpresas, Castle- dijo ella sonriendo.
-Tienes alguna película en mente que quieras ver?
-No lo se… elige alguna…
Se sentaron a comer y miraron una película que encontraron pasando canales… Cada tanto, Kate lo miraba con curiosidad y él fingía no darse cuenta.
Luego de la película se quedaron charlando y tomando vino distendidos. En un momento en que ella sonrió, él se quedó mirándola con la boca abierta y ella alzó la ceja sin comprender.
-Qué?- dijo ella con curiosidad.
-Nada… solo… no estoy acostumbrado a verte sonreír y tienes una sonrisa muy… particular…- dijo él con algo de nerviosismo, no era el momento de sincerarse.
-Es cierto… yo no sonrío mucho…- dijo ella pensativa.
-Y por qué será? Acaso no te gusta tu trabajo?
-Si y no…- dijo ella y dio un sorbo a su copa- en general me gusta… pero hay algunos casos que me desestabilizan… no puedo evitarlo…
-No serías humana si así no fuera…- dijo él y sonrió.
-Qué hay de ti? Disfrutas tu trabajo?
-Totalmente…- dijo él y le guiñó el ojo- aunque hay momentos en los que preferiría dedicarme a otra cosa… no es nada agradable padecer de bloqueo…- dijo sacudiendo la cabeza.
-Es cierto… así estabas cuando nos conocimos, verdad?
-Si… pero luego todo cambió…- dijo y le sonrió, olvidándose por un momento de su personaje.
Kate se sintió algo incómoda, pero no porque le molestara su mirada intensa, sino porque no podía entender lo atraída que se sentía a él…
-Y dime… qué viste en mi, digo, para sentirte inspirado?- preguntó ella que siempre había querido saberlo.
-Eso es fácil…- dijo y tragó saliva- todo…
-Todo?- preguntó ella extrañamente halagada.
-Es decir… tú reúnes todas las características que necesito en una musa… y eso no es simple…
-Qué características?- dijo ella inclinándose un poco hacia él, la curiosidad evidente en su expresión.
-Eres buena profesional… tienes un trabajo interesante… y eres extremadamente hermosa… además de sexy…- dijo él y ella sonrió.
-Dios! Castle…- jadeó ella cerrando los ojos un momento y él la observó con interés- si no supiera tu historia, pensaría que estás intentando seducirme…
-La seducción no tiene nada que ver con la sexualidad… - dijo él con rapidez- tú puedes seducir a quien quieras… de hecho lo haces… conmigo por ejemplo…
-Yo no te seduzco…- dijo ella sacudiendo la cabeza y se sonrojó.
-Lo haces todo el tiempo… y está bien… quiero decir… a mi me gusta… es otro aspecto de tu personalidad…
-Y así como me ves… aún estoy sola… no alcanza con ser hermosa, sexy y seductora, como tú dices… a veces creo que todo sería más fácil si yo tuviera otro trabajo… - dijo con algo de tristeza.
-Bueno… yo también estoy solo… pero no pierdo las esperanzas, tú deberías pensar lo mismo…
-No lo se, Castle…- dijo ella mordiéndose el labio con impotencia.
-Créeme… podemos acompañarnos mientras estamos solos… y en algún momento, llegará la persona indicada para ambos…
-Existirá el hombre indicado para mi?- dijo ella y suspiró, hundiéndose en el sofá, con las piernas sobre su mesa ratona y tomó otro sorbo de vino.
-Estoy seguro…- dijo él y la miró. Era claro que se había metido en un problema. Por un lado estaba feliz de poder conocer a Kate en profundidad, aunque recién estaba comenzando a hacerlo. Pero por otro lado se sentía culpable por engañarla…
Media hora más tarde, Castle no pudo evitar irse, ella comenzaría a sospechar si él no intentaba escaparse, y por ahora, había decidido mantener su mentira, de esa forma, tendría mayor acceso a ella.
A pesar de la culpa que sentía, Castle estaba seguro de que esa era la única forma de llegar hacia ella…
Cuando él se iba, ella lo acompañó hasta la puerta y sonrió cuando él se volvió y besó su mejilla suavemente, como lo había hecho tiempo después de conocerse, cuando estaban trabajando en el primer caso juntos…
-Hey, Castle…- le dijo ella cuando él se alejaba de la puerta- me gustó compartir esto contigo…- agregó y sonrió.
-Quien te dice? Quizás nos convirtamos en almas gemelas… amigos… por supuesto…- dijo y le guiñó el ojo.
Kate entrecerró los ojos y lo miró irse, estaba mal sentirse atraída por un hombre que seguramente no correspondería sus sentimientos? Lo tendría que descubrir en la práctica… sin duda tendría que explorar esa posibilidad y estaba segura que con el correr del tiempo, esa atracción se terminaría convirtiendo en amistad… o eso era lo que ella esperaba…
Bueno, no es lo que normalmente se me hubiera ocurrido, pero me gusta pensar en algunas situaciones que podrían darse a partir de aquí. Espero opiniones, realmente son importantes. Obviamente, esto sigue! Cuánto? Depende de ustedes!