Mi primer fanfic de Sherlock! Es un intento de Mystrade, a ver que os parece~
Ya resulta cansino, pero los personajes pertenecen a Arthur Conan Doyle y la serie a la BBC, etc, etc... xD
Eran apenas las nueve de la mañana y el inspector Gregory Lestrade ya podía asegurar que tenía un día de perros, y no le faltaban razones.
Su mujer, con la que estaba en plenos trámites de divorcio, le había llamado a las seis de la mañana para hablar del papeleo, y al final, habían terminado discutiendo. Después del acalorado altercado, se había quedado dormido, y para cuando se dio cuenta, ya se le hacía tarde para llegar al trabajo. Ignorando el hecho de que necesitaba desayunar algo, corrió a coger el coche, pero una de las ruedas se pinchó y tuvo que terminar parando un taxi. Con un gran suspiro de irritación, entró en las grandes oficinas de Scotland Yard, que parecían cernirse sobre toda la ciudad, resguardandola. Iba a entrar en su despacho cuando vio como Donovan se le acercaba con una mirada pícara.
-Parece que te has repuesto pronto de el divorcio. ¿Ya sabes quién es tu admiradora secreta?-el inspector la miró extrañado, sin comprender a lo que se refería. -¿Aun no lo sabías? Ya se ha enterado todo el departamento. Deberías entrar en tu despacho.
Siguiendo el consejo de la sargento, Lestrade abrió la puerta, para encontrarse con algo que era normal que no hubiera pasado desapercibido para nadie. Una enorme cesta de flores elegidas con buen gusto y colocadas con finura, adornaba su escritorio.
-¿Esto es para mí? -preguntó aun impresionado.
-Eso fue lo que dijo el repartidor. -contestó la morena. -Creo que había una nota.
El inspector se acercó a las flores y rebuscó entre ellas, teniendo cuidado de no dañarlas, con lo que al final consiguió encontrar la nota que le había dejado aquel misterioso individuo.
"Te espero esta noche a las 8:00 en el restaurante de la otra vez. MH"
Las mejillas del hombre se colorearon y su cara esbozó una sonrisa.
-Mi admirador... -dijo casi en un susurro. -Ni siquiera se que debería hacer con tantas flores. -habló entre las primeras carcajadas del día.
Y algo en la mente del inspector se iluminó. Quizás no iba a tener un día de perros... y es que viniendo de Mycroft Holmes podía esperar cualquier cosa.
Espero que os haya gustado, y si no, lo siento mucho...
Eh... me alimento de reviews, dadme de comer ;w;
