Cuenta la leyenda que el fandom de Death Note en FanFiction era tranquilo… hasta que llegó KandraK :v bueno no.

IMPORTANTE LEER ANTES DE EMPEZAR!:

Esta será una recopilación de historias sin relación entre sí. Mi objetivo es ofrecerles una serie de escenas a forma de abecedario, referentes a la relación de L y Watari más allá de la vida detectivesca. Quiero imaginar cómo sería su trato persona-persona, hijo-padre/tutor.

Por lo tanto, será completamente normal observar saltos temporales grandes, capítulos largos o por el contrario, drabbles, versiones diferentes del mismo tema o suceso, ubicaciones variadas, experimentos con mi forma de escribir y OoC de Ryuuzaki, basado en que tendrá diversas edades y por lo tanto, personalidades.

Por supuesto, cabe aclarar el punto más importante, las historias narradas serán sobre VIDA COTIDIANA, desde algo que vaya desde un miedo de niño, hasta una enfermedad o una muerte. Cosas que sin duda alguna ellos tuvieron que pasar alguna vez en su vida y que por supuesto no nos muestran, por lo que sí, será completamente OOC.

.-.-.-.

Advertencias de este capítulo

-Incluye OoC del Ryuuzaki de 25 años

-Narrado en primera persona

-Drabble de 420 palabras

-Death Note no me pertenece


A

Adiós


Sabía las posibilidades. El mundo estaba en peligro y poner en riesgo mi vida para salvar muchas otras era un arma de doble filo con la cual estuve dispuesto a jugar.

Al adentrarme, ignoré mi egoísmo y lo disfracé de justicia. Día a día mientras mis razonamientos fueron cuestionados, la victoria irónicamente parecía más cercana.

No lo pensé. Tampoco lo preví. Pero pasó.

Y lo imaginé.

Lo imaginé tal cual como recordaba la lejana escena donde los cuerpos sin vida de mis padres eran revelados con saña a todos aquellos hipócritas que asistían por compromiso a burlarse de su fragilidad.

Y…

Aún con pensamientos de infante inocente, imaginaba lo posible como la más terrible pesadilla. Por eso trataba de no verlo, de evitar su rostro. Trataba de no observar la decadencia de su cuerpo envejecido. Trataba de verlo fuerte porque así se suponía que se presentaba ante mí. Porque así se suponía que era y sería siempre… porque deseaba fue fuera inmortal.

En mis casi nulas pesadillas lo podía observar claramente. Rostro apacible y sonrisa siempre en boca, nunca revelando sus ojos tan grises como los míos.

Pero no cuidaba de mí, no me servía cual fiel mayordomo francotirador. Sólo reposaba en aquella caja de madera pintada de negro que sería su hogar eterno.

Y me sentía indefenso, impotente. Me sentía de nuevo un niño, pero las pocas ilusiones permanecían.

Él nunca moriría. La parte menos realista de mi mente lo aseguraba. Y no moriría porque él había jurado estar conmigo para protegerme y velar por mí pasara lo que pasara.

Era una promesa.

Pero la adrenalina llenó mi cuerpo al fijarse como objetivo el atrapar a un asesino de proporciones bíblicas. Llevé mi interés a ofrecer mi vida y peor, arriesgar la suya.

¿Kira fue el culpable de arrebatarme lo único que realmente amaba? ¿Kira lo planeó?

Asesinarlo… No. Mandar a que lo mataran… ¡BASTARDO!

¡Matarlo bajo mi propio techo sin darme la oportunidad de despedirme, de defenderlo, de IMPEDIRLO!… Matándolo a él primero para lograr que la explosión de aquello que llaman sentimientos recorriera todo mi cuerpo y se clavara en mi corazón en una sensación aún más cruel que el infarto que me destinaba.

Yo sabía que aquello me sucedería pero no a él.

Él no lo merecía. Él no debió ser parte de su estúpido juego de Dioses y esclavos. Él no tenía por qué pagar por el miedo a perder que albergaba el cuerpo de Light Yagami.

Watari merecía vivir aún más en este mundo.*


*Contradicción, ya que si quería defenderlo, dejarlo vivir en un mundo dominado por Kira y sin L, posiblemente sería más egoísta.

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NOTA DE LA AUTORA: Este drabble salió en menos de una hora, no pude dormir durante la noche así que lamento si está algo raro. A mi me gustó, si no me gustara, no lo hubiera publicado. Espero Le den una oportunidad a esta serie de pequeñas historias. Los que me han seguido saben que acepto sugerencias, quejas y de más, ya que sin ustedes, mis lectores, yo soy nada.

Como adelanto del siguiente capítulo... ¿Se imaginan cómo sería el L puberto/adolescente a la hora de tener que bañarse?