Hola amigos el día de hoy les vengo a presentar una historia creada por mi rara imaginación, así que espero que lo disfruten. Si les gusta tan solo un poco y les nace del corazón dejen un comentario se los agradecería mucho. Acepto críticas y sugerencias
Prologo
Corría lo más rápido que sus pequeñas, débiles y agotadas piernas se lo permitían, llevaba horas corriendo y su fuerza comenzaba a menguar, estaba a punto de desmallarse y él lo sabía. Mientras su cuerpo se fatigaba y empezaba a correr cada vez más lento su mente se encontraba echa un verdadero desastre. Tenía demasiadas dudas respecto a su vida pero no conseguía encontrar recuerdo alguno como para poder responder todas sus dudas. Lo único que lograba recordar era su nombre y que tenía que alejarse lo más que pudiera de la aldea escondida entre las hojas, aunque no sabía la razón por lo cual lo tenía que hacer, solo sabía que lo tenía que hacer y había otra cosa que le importara más que no fuera hacerlo. Se podría decir que lo estaba haciendo por instinto, pero no cualquier instinto, era un instinto muy especial, como aquel que te dice que si dejas de respirar te mueres. Era mero simple y puro instinto animal que le decía que no tenía una razón por la cual quedarse ahí y que si se quedaba su futuro seria todo menos uno feliz y tranquilo.
Después de correr un rato más cayó desmallado a mitad de un bosque cerca de la frontera del país del fuego con el país del rayo. Cuando despertó se pudo dar cuenta de que ya no se encontraba en aquel bosque donde cayó desmallado, sino que ahora se encontraba en un lugar demasiado oscuro donde no podía ver nada ni escuchar nada. Era como si estuviera en la nada, parecía como si hubiera perdido sus instintos. Se veía como si hubieran borrado a todo el mundo y solo lo hubieran dejado solo a él, se sentía solo, pero al mismo tiempo sentía que algo lo estaba llamando fervientemente por algún lado de esa oscuridad profunda. Esa sensación era tan fuerte que comenzó a caminar inconscientemente. Después de un rato en el que el sintió que no avanzo nada pudo divisar una jaula enorme con inmensos y gruesos barrotes que parecían hechos para detener a una bestia gigante.
Siguió avanzando hasta que casi podía tocar los barrotes, pero cuando estaba a punto de tocarlos unos grandes e imponentes ojos rojos se hicieron presentes causando una gran sorpresa en él. Tanta fue la sorpresa al ver esos ojos que se hizo para atrás ocasionando que se tropezara con su propio pie y que callera pesadamente al suelo. Cuando se logró reincorporar y alzo la vista nuevamente pudo observar que la anteriormente oscura celda ahora se encontraba iluminada por varias antorchas colocadas estratégicamente dentro de la celda. Y en ese momento fue cuando se pudo dar cuenta que había un extraño zorro gigante con nueve colas ondeándose a su espalda haciendo verlo más imponente de lo que ya era.
¿Quién eres tú?-apenas pudo preguntar debido al miedo que le ocasionaba ver a ese inmenso zorro.
-oh Naruto me duele que no me sepas quien soy, después de todo eh vivido contigo desde el primer día de tu vida. Pero no te culpo es la primera vez que me ves, tendrías que ser muy listo para que pudieras siquiera imaginarte quien soy, así que te responderé, yo soy el gran kyuubi no youko el más poderoso de todos los bijuus- ante cada palabra que la bestia decía él se confundía más y más. Tenía tantas preguntas por hacer pero solo le interesaba la respuesta de dos, ¿Dónde estaba? y ¿Qué quería el zorro con él? No pudiendo contener su curiosidad decidió preguntar de una buena vez.
¿Dónde estamos? ¿Qué quieres de mí? - el zorro no pudo evitar esbozar algo parecido a una sonrisa y luego se decidió por responder.
¿Dónde estamos? Esa es fácil, estamos en lo más recóndito de tu mente, nos encontramos en tu paisaje mental, y por qué te conozco y sé que lo preguntaras te evitare que gastes saliva y te responderé de una vez. Yo estoy aquí debido a que hace siete años yo fui sellado dentro de ti. No me preguntes porque o por quien ya que no lo sé, mi memoria esta tan atrofiada como la tuya, así que no puedo recordar nada más. Pasando a la siguiente pregunta ¿Qué quiero de ti? Mmm, sinceramente nada. No me interesa nada de lo que hagas o lo que digas, lo único que me importa es que mueras pronto para que yo pueda escapar. Fuera de eso no hay nada más que desee de ti- si antes estaba en conflicto con sus pensamientos y recuerdos ahora lo estaba con sus emociones. De un momento a otro pasó de miedo a intriga a enojo a intriga y a enojo nuevamente.
-con que así son las cosas eh zorro, está bien pero vas a tener que esperar sentado. Porque yo no moriré pronto y sabes por qué no lo hare, no lo hare solo para molestarte- su voz fue perdiendo fuerza mientras él se comenzaba a desvanecer lentamente hasta que desapareció completamente del lugar.
-Eso lo veremos mocoso, no te lo pondré tan fácil. Más temprano que tarde tu morirás y de eso me voy a asegurar yo- decía el zorro antes de volver a dormir
