Prefacio

Mi forma de amar, la de todos siempre fue muy "normal" quise pensar en cómo sería enamorarme de una forma que nadie esperaba bueno… al menos algo distinto lucubre, doloroso y prohibido. Y mi historia empieza aquí, en mi mente soñando y hablando con "mi otra yo".

Pero primero necesitas despertar de este sueño –me dije a mi misma –vamos hazlo deja de pensar en el, se que te duele pero piensa… está contigo eternamente. –Mi mente siempre intento hacerme sentir mejor, con estas palabras que aunque sabía que eran insuficientes, caían bien al corazón ya pisado, destrozado y demacrado por él. ¡DESPIERTA! –mi mente se desespero y clamo por ese "despertar" e hizo algo que no resistí. Hizo, metió su imagen a mi mente dolió como espada encajándome en el corazón resonando en mis tímpanos el dolor esto era demasiado y desperté. Al mismo tiempo llore esto dolía aunque no quería, era mi mejor amigo y quizás... algo mas para mi aunque para el soy solo eso y duele tanto, pero si mi mente tenía razón era mejor dejar esto antes de que termine más lastimada, de lo que ya estoy. Después mire por una ventana (aunque estaba en un bosque era algo extraño), mire y no sé porque mire a Isaac, en una cama del hospital, y las lagrimas brotaron por mis ojos, y me aleje no quería ver eso, sentí que alguien caminaba encima de mí y mire y era un techo de cristal y caminaban sobre ella Owen, Angel y no pude distinguir más personas, estaba confundida y aturdida. Intente alcanzar ese techo pero no lo logre y el suelo se abrió dejándome caer, y aterrice en una habitación completamente oscura y negra, mire, quizás lograría identificar una luz, así fue, era una ventana enorme cubría toda la pared, mire pobre ella y vi un tipo de boda, no sabía de quien hasta que lo vi a él a Angel y vi a una persona, mujer, que se dirigía hacia él era Aurora. Al ver esa imagen y como lucían ellos… me desmorone, empecé a llorar y a gritar, era demasiado para mi, dolía tanto…

Y desperté. Las lágrimas brotaban aun por mis ojos de estas imágenes. Dolían.