Canción de Hielo y Fuego es propiedad de George R. R. Martín, y los derechos audiovisuales son de HBO, yo solo me encargo de escribir historias.


Él lo comprendió en el último momento, cuando sus ojos se cerraron ante el mundo y cayeron por completo en la oscuridad.

—Fantasma —Esa había sido su última palabra, pero el último pensamiento iba dedicado a otra cosa, a una persona diferente.

Arya.

Su cerebro solo podía concebir esa palabra y pensamiento, mientras todo a su alrededor se desmoronaba las cosas iban a dar directo al pasado de su existencia. Ella, su hermanita, su pequeña loba, era todo en lo que podía pensar.

Sucumbiendo, viendo el mundo alejarse irremediable, pensó en ella, en Arya, en la niñita de rodillas raspadas y cabello enmarañado. Recordó a quien lo perseguía a todos lados exigiendo un combate con la espada aun sin que ella pudiera sostenerla, vio de nuevo a la pequeña figura que se escurría entre sus pieles de dormir cuando tenía frio o miedo. Arya, su hermanita.

Ahí, como último vestigio de su mundo estaba ella, sonriendo y llorando al mismo tiempo, colgada de su cuello para despedirse de él y no verlo nunca más. Era tan pequeña y menuda, pero tan guerrera e implausible, tan poco refinada.

La amaba, comprendió. No era el sentimiento vacuo que se tiene por una amante, no era lo mismo que por Ygritte, pero tampoco era el instinto protector y fiel de hermano mayor, no, no la amaba de esa forma, la amaba porque era parte de él, de su existencia, todo lo que veía era una sombra de ella, en las niñas, en las mujeres, en las espadas y en los lobos. Su amor por Arya era distinto a todo lo demás, era un sentimiento nuevo, incorrupto, sin celos e intereses, solo amor, simplemente amor, en el que se da todo sin mirar por qué.

Ahora sabía la verdad de porque él lo había podido tener todo y había renunciado a ello; venganza con Robb por la muerte de su padre, libertad y amor con Ygritte, a Val y a Invernalia si se unía a Stannis, pero él quería a Arya y había renunciado a todo eso en su momento, en cambio por ella había dado todo y no exigía nada. Por ella, por su hermanita, estaba en ese momento dejando ir la vida, solo porque deseaba recuperarla, tenerla cerca; salvar como buen caballero a la damisela de las garras del ogro, al estilo de los cuentos de Sansa.

Las heridas son profundas, las que uno de sus hombres causo. ¿Qué pensarían ellos si les dijera que todo lo hacía por amor? Quizá le volvieran a atravesar las costillas con las dagas, pero esta vez con más dulzura. Aun así, no se arrepentiría por abandonarlos.

Jon Nieve, bastardo de Invernalia y Lord Comandante de la Guardia de la Noche, solo tenía una cosa por la cual arrepentirse, no haber tenido oportunidad de ver a su amada una vez más, a Arya de la Casa Stark, que inspiraba cuanto era y podía ser, a quien daba lo que fuera por ver feliz y la persona a quien en ese momento le entregaba la vida. Moría por ella, por salvarla y verla de nuevo.


Tenía esto en la cabeza hace tiempo y tenía que compartirlo porque es parte de mi teoría de porque Jon Nieve debe estar con su hermana por encima de cualquier otra mujer. Se que es extremista, pero amo a esta pareja y desde que leí el primer libro (JdT) quede prendada de esta pareja y he prometido dedicarles más tiempo, pues son mis favoritos (No, mi favorito es Varys, y Jaime, pero saben de que hablo).

Dejen reviews, les estaré eternamente agradecida :D