Hola a todos! Este fanfic es un reto del foro "Sientate" Que consiste en escribir un capitulo a la vez basándome en las canciones de la banda Paramore. Elegi el reto de 10 días y oneshote asi aqui les va el primer capítulo con 929 palabras. Espero les guste y siempre ando abierta a sus comentarios :)


#1 Pressure

Una cálida briza del amanecer jugaba con mis cabellos. Esa mañana era diferente a todas las demás por lo que decidí despertar con la llegada del sol. Era un bello amanecer.

La pequeña aldea donde habían pasado tantas catástrofes ahora era un lugar tranquilo y sereno donde reinaba la paz y la seguridad. Kagome había relevado a la anciana kaede con ayuda de Inuyasha mientras que Sango y Miroku vivían una vida muy tranquila con sus 6 hijos.

Tome mi cabello y empecé a trenzarlo. No me gusta mucho llevarlo suelto desde que me lo deje crecer hasta las rodillas.

_Creo que al le gusta así_ Es lo que siempre había pensado cuando me visitaba ya acariciaba mi cabeza pero ya no era más así.

Hoy cumplo 16 años y Kagome decidió hacer una fiesta en mi honor. Aunque se lo agradezco sinceramente no me emociona mucho ya que solo hay una cosa que quiero hoy. A Él.

A esa persona que le devolvió la luz a mi vida, que me acompaña y me protege, con quien yo siempre puedo contar… pero ya no es lo mismo. Su mirada sigue siendo igual de serena con un toque de calidez asía mi pero me pregunto ¿Seguirá viéndome con esa niñita que recogió en los bosques?

_Rin ya va a ser hora_ me llamo Sango

Me puse el kimono rojo que me había regalado el Señor Sesshomaru el año pasado y adorne mi cabello con un prendedor de orquídeas blancas. Mire mi rostro en el espejo una vez más, coloque un poco de color en mis labios y me fui.

_¡Felicidades Rin!_ Gritaron todos cuando entre a la casa de Miroku y Sango. La habían adornado con lámparas de papel y unas flores de origami. Todos los de la aldea que conocía estaban ahí.

La comida andaba exquisita y toda la noche bailamos y cantamos sin parar. Muchos jóvenes de la aldea me invitaban a bailar pero no andabas muy de ganas. Y se estaba haciendo tarde y esa persona especial no aparecía.

Me salí de ese bullicio por un momento para descansar y apreciar la noche. Era luna llena y todo el cielo estaba adornado por estrellas, era hermoso. Aun así tanta belleza solo me hacía sentirme más sola aun ¿Dónde estaba mi estrella? ¿Por qué no aparecía? Me hice una bola y me recosté en mis piernas a escuchar el viento soplar.

_Rin

_Señor Sesshomaru_ exclame sorprendida y voltee a ver ese rostro que tanto había anhelado desde la última vez que nos vimos. Él se agacho un poco para mirarme a los ojos y nuestras miradas quedaron fijas.

_Pensé que no vendría Señor, cada año temo más.

Si expresión no cambio. Simplemente aparto su vista de mi mirada y volteo a ver a la luna. No decía nada solo miraba matándome cada segundo que pasaba con su silencio. Al fin hablo.

_Caminemos Rin

Fue lo único que dijo y lo seguí hacia el bosque. Apenas pasaron unos meses desde que lo vi la última vez pero había sentido como si hubieran pasado años. Quería matar el silencio y decirle de una vez por todas lo que mi corazón sentía pero ¿Cómo?

Trague saliva y me pare firme.

_T Tu… ¡Eres muy especial para mí!

El paro en seco y volteo a ver. Vino y de nuevo se agacho para mirarme a los ojos.

_Rin tu sabes que igual lo eres para mí_ Su expresión no cambio solamente coloco su mano en mi cabeza con un gesto de ternura.

Saque todo el orgullo que había en mí y sacudí mi cabeza para apartar su mano en mi cabeza.

_Sesshomaru ¡Mírame! Ya no soy una niña

No escuche nada. Mantenía su mirada fija en el suelo y yo esperaba una respuesta de su parte. Al fin me volteo a ver con una mirada penetrante pero difícil de descifrar.

_Rin ¿Qué sucede?

_Ya le dije que sucede, es muy especial para mí pero dígame ¿Qué soy yo para usted?

Otra vez esos ojos frio y vacíos que no me decían nada. El me mataba, me mataba con ese silencio y el cariño que tanto desea mi corazón de él. No tenía caso perder más el tiempo.

_¡Olvídalo!_ le dije y me eche a correr para el bosque.

Corrí a esconder a un pequeño templo que Kagome había purificado y estaba protegido. Con el incienso encendió sabía bien que el no me encontraría. Entre al salón y me acurruque en una esquina para llorar.

Desde que lo conocí el ilumino mi vida pero ya no lo podía ocultar más lo que sentía por él y sé que el siente algo por mí pero dudo que le preste atención a ese sentimiento. Mi corazón quería estallar pero no me quedaba más que llorar hasta que el cansancio se apoderara de mí.

_¿Rin?

Desperté viendo su rostro. Había cambiado tanto desde que lo conocí convirtiéndose en un fuerte y varonil cazador.

_¿Por qué Kohaku?

Lo abrace fuertemente para aliviar mi lamento. Mientras sentí sus brazos correspondiendo a mi abrazo.

_¿Por qué lloras?

_Sesshomaru jamás aceptara los sentimientos que tengo por él. Solo sigo siendo la chiquilla que recogió en el bosque. A veces me pregunto porque lo hizo.

_No te lamentes por eso Rin

Kohaku levanto mi rostro y limpio mis lágrimas. No podía haberme sentido mejor reconfortando con nadie más, Kohaku siempre ha sido mi mejor amigo. Recostó su frente contra la mí y se quedó acompañándome toda la noche en el silencio.

_Él es un idiota_ fue lo único que oí decir.