Renuncia de derechos: Harry Potter y todo su universo son propiedad de J. K. Rowling, empleo parte de ello sin fines de lucro. Por otra parte, la trama es mía, por lo que me reservo su uso.

El presente texto participa en el Duelo #1 del Club de Duelo (cuarta edición), del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".

Oponente: Desconocido.

Personaje seleccionado: Natalie McDonald.


Tierno pensamiento.

Desde hacía tiempo, Natalie se preguntaba si hacía bien yendo a Hogwarts.

La niña se sabía frágil, sintiendo que cualquier cosa acabaría rompiéndola. En clase mostraba mucho entusiasmo, pero en gran medida, era por amigos como Dennis y Orla.

Debido a su precaria salud, Natalie quiso vivir al máximo y tener muchos amigos, pero no parecía obtener buenos resultados. Por eso se sorprendió de que alguien la abordara una tarde en la sala común, poco antes de las vacaciones de Navidad de su primer año.

—Hola.

—Ah… Hola, Colin. ¿Buscas a Dennis? Porque…

—No, yo… Mira, te tengo un regalo de Navidad.

La chiquilla, asombradísima, fijó sus verdes ojos en el mencionado obsequio: un marco dorado con una fotografía de ella y sus amigos, sentados a orillas del lago (que ignoraba cuándo fue tomada).

Al cabo de unos segundos, Natalie solo atinó a sonreír, sintiendo más que nunca que valían la pena todos sus esfuerzos.

–&–

¡Bienvenidos sean a mi primera participación de la nueva edición del Club de Duelo! Considerando cómo me fue en la edición anterior, ¿por qué no arriesgarse (otra vez)?

En esta primera ronda, se pedía escribir de un personaje prácticamente desconocido, así que elegí a una chica seleccionada en HP4: Natalie McDonald, cuyo nombre es homenaje a una niña muy enferma que le escribió a JK y falleció antes de recibir la respuesta a su misiva. Quise hacerla objeto de atención (¿o quizá de algo más?) de Colin Creevey. No sé qué tan bien habrá quedado el texto (el borrador fue elaborado en papel y lo estoy transcribiendo invirtiendo la perspectiva: originalmente era desde el punto de vista de Colin), pero ojalá les guste la idea.

Cuídense mucho y nos leemos en la siguiente ronda (si es que paso a ella).

P. D. Aunque a nadie le importe, ¡este es mi fic publicado número 100! (Lanza por todas partes confeti, serpentinas, chispas de colores y ranas de chocolate).