Capitulo 1

Esta historia comienza con un sueño, de una elfa, sobre la última alianza, solo que ella no sabía en ese momento de que se trataba.

En medio de una batalla, se encontró la Elleth, pero ella no sabía dónde estaba, ni porque estaba allí, solo podía ver a su hermano y luego empezaron a pelear con las espadas elficas a mano. Pero ella no podía hacer nada, era como si no estuviera allí.

Ella Glawareth, como en otros tantos sueños proféticos, sintió desconcierto y pavor, pues aunque los demás no la veían, ella podía ver la dureza de la guerra.

Los elfos silvanos fueron rápidamente amedrentados, sacudidos. De otro lado estaban los ejércitos Noldor, a la cabeza, iba su hermano Gil-Galad y Elrond. Ella estaba ahí, en el medio de la batalla.

Ella era muy hermosa, dirían los ellon, toda su aura tenía un resplandor plateado, pero cuando se enojaba y tenía mucha ira en su interior, su aura se tornaba como una tormenta roja, el color del amanecer. Ella era como un rayo puro de sol. Su cabello era negro, muy oscuro, pero a la luz de los rayos de sol tenía reflejos plateados, sus ojos eran grises, tormentosos.

Era una elfa de la raza Noldor, hija de Orodreth, nieta de Finarfin, hermana de Gil-Galad, sobrina de Galadriel, prima de Celebrian y muy amiga de ella.

Respetaba a Galadriel y a su vez está la quería como una hija.

Un día Glawareth, fue con Celebrian al valle de Imladris en un viaje de visita a los parientes entre las montañas.

Allí conocieron a Elrond, un ellon muy sabio, valiente y bueno.

Tenía un aura de autoridad, pero también un humor muy parecido al de Glawareth. Era sarcástico e ironico, cuando no era demasiado serio, lo cual era la mayoría de las veces, y rápidamente se hicieron amigos.

Glawareth se dio cuenta que Elrond, al menos estaba un poco enamorado, por no encontrar otra palabra más apropiada, de Celebrian, así que gracias a ella, sus queridos amigos (con mucha o poca ayuda) se enamoraron perdidamente.

Lo que origino, que Celebrian y Glawareth se mudaran a Imladis o Rivendell como lo llaman en la lengua común.

Era el lugar más hermoso y pacífico de la tierra media, el lugar preferido de Glawareth en la tierra media. Así que cuando Celebrian le pidió si iba con ella de dama de compañía, ella acepto gustosa y dejo a su hermano a mando de los Noldor, él podía sin ella.

Todo fue pacifico, hasta que sauron dedico todos sus esfuerzos en destruir la tierra media, todo comenzó con la forja de los anillos de poder, tres de ellos para los elfos, y luego estaba el anillo único, esos cuatro anillos eran los más poderosos. Pero el anillo único era el más poderoso, pues contenía toda su maldad, la maldad de sauron y junto con él tenía que ser destruido.

Se decidió que por medio de una alianza, la última alianza entre hombres y elfos, sería una buena forma de parar el mal de Mordor.

Hubo un encuentro, un concilio con todas las razas elficas que había en la tierra media.

De Lorien estaban Galadriel y Celeborn,

Del Greenwood estaban Orophin y su único hijo Thranduil.

Tambien estaban Glorfindel

Y había llegado un número de Duneidan.

En esos momentos, Glawareth era la 2* al mando de los guardias de Imladris, junto con Glorfindel. Ella era buena con la espada, con el arco y también con las dagas dobles.

Esa misma noche antes de la cena, luego de días enteros sin descanso de la guardia, Glawareth estaba acostada, en su recamara, en su cama con dosel.

Vestida con un camisón color crema, que acentuaba su piel pálida a la luz de la luna. Sus ojos grises y su larga cortina de pelo negro también brillaban extrañamente.

Un simple mortal podría haber dicho que estaba pensativa, pero sus ojos estaban mirando un punto en el techo, sin pestañear y tenían un brillo vidrioso.

En el sueño que ella estaba teniendo, esa misma noche, había una batalla, no sabía en donde estaba, no era el pasado, todo alrededor era gris, había niebla y hollín.

Estaba allí, pero no podía hacer nada, era como una visión. Ella corría, trataba de hablar con los demás ellon y el elleth que estaban allí, pero era en vano.

De repente vio una cabellera larga y platinada, era el único color que sobresalía en ese sueño tan oscuro.

Corrió hacia el lugar donde ese elfo estaba, pero cuando llego, una criatura de un tamaño enorme estaba adelante de él y luego para sorpresa y angustia de ella, echo fuego por la boca, llena de dientes afilados y deformes.

Ella no podía hacer nada, pero quedo totalmente espantada ante tal imagen, pero la peor experiencia fue ver como ese ellon que había visto desde lejos estaba ya muerto. Chamuscado era decir poco, estaba de espaldas, tirado en el suelo.

Antes de poder hacer algo, el MONSTRUO con alas la miro y le dijo:

-Tu no tendrías que estar aquí mujer elfa!

Luego de eso la criatura respiro hondo y escupió fuego hacia la elleth allí de pie.