Espero q les guste mi historia!! Esta va a tener algunos capitulos, no creo q mas q cinco...

Bueno espero q les guste y no se olviden de dejar revieew!!

Deseos de un amor

El cometa y un deseo cumpliendose

Dicen que cuando una estrella fugaz pasa se puede pedir un deseo, no importa si la estrella fugaz tenga nombre o de poderes a ciertas personas. Lo que importa es que el deseo sea pedido con suficiente fuerza, es suficiente para que se cumpla. Y aquél día mientras, Toph colgaba de los dedos de Sokka, una única cosa pasaba por su mente. No era el poder salvarse, era el poder decirle lo que sentía, un grito quedó ahogado en sus labios, un grito que decía "¡Sokka, te amo!". Y cuando las lágrimas comenzaron a caer por el grito ahogado, fue en el momento en que lo deseo. Salvarse ambos para que le pudiera decir lo que sentía por él, y saber si era un sentimiento correspondido, deseaba que aunque sea una vez poder sentir el exquisito goce de estar junto con sus labios.

Y por encima de ella, Sokka también deseaba algo. Concentrando toda su energía en el brazo del cual Toph colgaba, Sokka deseaba que esta pudiera ser feliz, recordó cuando la comenzó a conocer, recordó cuanto cariño sentía por ella, y en ese momento lo único que deseo fue que Toph pudiera ser feliz con un hombre que valiera la pena, un hombre lo suficientemente digno para ella. A Sokka no se le ocurrió pensar en aquel momento que quizá el hombre indicado para ella era él. Sokka sólo quería que su pequeña niña fuera feliz.

El cometa pasó, escuchando los deseos de ambos, y se perdió en el horizonte. Los astros comenzaron a actuar en función de los deseos de ambos.


En Ba Sing Se estaba el equipo avatar. Estaban todos reunidos observando el dibujo que Sokka había realizado.

-¡Para mí están todos iguales!-gritó Toph y enseguida todos comenzaron a reír.

Luego de un momento Sokka, miró alrededor y preguntó.

-Oigan, ¿dónde están Aang y Katara?

Iroh, se asomó por la ventana y luego se volvió a meter rápido.

-Ni idea-mintió el viejo hombre.

Toph sabía lo que estaba ocurriendo, sabía del momento que estaba teniendo ellos dos. Se lamento de jamás haberle podido decir lo que sentía, y era quizá por eso que él aún seguía con Suki. Por que jamás había tenido el valor. Y fue allí cuando el deseo que pidió en el momento del cometa de Sozin comenzó a actuar. El valor que le había faltado para ese tema comenzó a surgir. Debía hacerlo, debía decirle de una vez cuáles eran sus sentimientos.

-Sokka, ¿puedo hablar un momento con vos?

-Sí-comentó el chico extrañado.

El chico se paró y se acercó a Toph.

-A solas-dijo Toph mientras que sentía como un rubor cubría sus mejillas.

Fueron a un cuarto cercano, y una vez que Sokka cerró la puerta y mirándola le dijo:

-¿Qué pasa, Toph?- y al notar que la chica había comenzado a llorar-¿Toph? ¿Toph estás bien?-preguntó el joven asustado.

-Es que…-dijo la chica, las palabras no venían a su ayuda, mientras las lágrimas seguían cayendo de sus ojos.

-¿Toph, qué sucede?-dijo el chico tomándola de los brazos.

-Es que yo te amo-dijo la niña.

Sokka no sabía como reaccionar, estaba conmocionando ante semejante confesión de su pequeña. ¿Su pequeña niña enamorado de él? Siempre había notado que había algo especial en la manera de Toph de relacionarse con él, pero jamás se atrevió a relacionarlo con eso, ¿o sí?. Las dudas comenzaron a carcomer a Sokka, jamás había notado que su pequeña estaba enamorada de él, comenzó a cuestionarse Sokka. Y si que él nunca se había dado cuenta, significaba que él también estaba enamorado de él. Sokka estaba confundido.

-Toph…-sólo atinó a decir.

Otra parte del deseo de Toph comenzó a entrar en acción, Toph con las lágrimas aún saliendo de su rostro lo tomó entre sus brazos y lo besó. Y fue esa parte de Sokka, la parte que le hablaba con su misma voz, la voz que era la misma que le salí de su boca, que en estos momentos se encontraba junto con la de Toph, la que lo obligó a posarle una mano sobre la nuca de ella. Fue esa parte la cual lo hizo disfrutar del beso y la cual lo hizo participar de él. Sin que lo supieran ambos se encontraban en las estrellas, en esas estrellas que sólo se llegan cuando se comparte con un ser amado, aquellas estrellas a las que Sokka sólo llegaba con Suki. Y por eso, aquella otra parte de la cabeza de Sokka, la que hablaba con la voz de Suki, lo hizo separarse de Toph, el no podía estaba con Suki.

-No, Toph…-solo pudo decir cuando se separaron.

Sokka no podía aceptar ese beso, y fue cuando se vio reflejado en los ojos implorantes de Toph, cuando las lágrimas también comenzaron a salir de él. La puerta del cuarto se abrió, y se pudo ver a un Zuko inmóvil. Las manos de Toph se hallaban en el cuello de Sokka, y este se las sujetaba para que no avanzaran más. Fue así como los encontró Zuko, Zuko pudo ver como Sokka sacó las manos de Toph de alrededor suyo. Y con un nuevo "No, Toph" se marchó, necesitaba estar solo. Zuko se quedó allí inmóvil, viendo como Toph comenzaba a llorar en silencio.

Zuko sentía un especial cariño por Toph, fue la primera en aceptarlo y él la veía como otra renegada como él. No quería verla así de destrozada. Zuko pudo comprender rápido lo que pasaba, no era muy difícil darse cuenta, hace rato que este se había dado cuenta los sentimientos de la bandida ciega hacia el guerrero del sur.

-Tranquila, Toph-dijo Zuko y abrazando a la pequeña, le dijo-. Aquí estoy- y dejo de que Toph llorara abrazada a él.