Damonisch

Capítulo 1: La Novia Demoníaca

Era avanzada la madrugada en la casona Takamachi y una de sus habitantes, Nanoha, estaba semidormida mientras tenía un agradable sueño húmedo. Pero lo raro era que no se estaba imaginando ni a Scrya Yuuno ni a Bunnings Arisa, que serían sus dos "amigovios" muy cercanos y de los que alguna vez había tenido un ligero enamoramiento… sino que lo tenía con una chica de gran cabellera rubia que le caía como cascada por la espalda a la que de momento no recordaba bien pero que sabía que la había visto o mejor dicho conocido hace mucho tiempo. Aquella rubia de ojos rojizos la hacía tocar el cielo con sus besos, caricias, lamidas, chupadas y metidas de dedos. Nanoha empezó a gemir primero despacio y luego hasta sonoramente mientras estaba recostada en su cama.

Ah, Nanoha, mine liebe…

Le susurró al oído aquella rubia de cuerpo escultural y luego la pelirroja entreabrió los párpados pues se había despertado. Luego se levantó, fue al baño y después se vistió para asistir a sus clases de la universidad. Pero aquellas últimas dos palabras le resonaron en la memoria: mine liebe (amor mío).

Se llamaba Takamachi Nanoha, tiene 20 años hace muy poco cumplidos y cursa el tercer año de traducturado de inglés y alemán. Era una de las carreras más difíciles pero justamente por eso quería cursarlas además de que le fascinaban los idiomas. Antes, debía admitir, era quizás un poco dejada para casi todo pero ahora que era un poco más madura deseaba superar un reto y ahora lo estaba cumpliendo con su sueño de ser traductora oficial de los dos idiomas anglosajones más extendidos. Y ya estaba próxima a finalizar su estudio y aprendizaje de estos idiomas así que no debía aflojar.

Pero hoy por primera vez no pudo concentrarse en la clase de alemán por estar recordando el sueño húmedo que tuvo… Ah, recordaba esas dulces caricias oníricas como si de verdad las hubiera sentido. Y esa simple y breve pero concisa oración de amor dichas con tanto cariño: mine liebe.

Cuando terminaron las clases del día Nanoha se apuró a volver a su hogar pero oh, grande fue su sorpresa cuando vio a toda su familia reunida, sus padres y sus hermanos mayores que ya habían alcanzado la mayoría de edad, que ya eran independientes, y que ya vivían en sus propias casas. Shirou y Momoko le explicaron que debían conversar sobre un asunto de suma importancia y que por ello debía estar presente toda la familia nuclear. Cuando todos se sentaron en sus respectivas sillas alrededor de la mesa Momoko empezó a hablar del siguiente modo:

– Nanoha, ya tienes hatachi (veinte años) y nos alegra mucho que ya estés cerca de finalizar con la cerrera universitaria que elegiste así que ya no dudamos en lo absoluto de que pronto serás dueña de tu propia vida. Pero esta conversación es sobre todo para informarte de algo importante: Nanoha, soy una súcubo que se enamoró de tu padre, un humano. Por lo que vos sos una híbrida. Si te sigues cuidando bien podrías vivir hasta unos 150 años o quizás un poco más sin que tu envejecimiento se manifieste tanto en tu físico. Oh, sé cómo suena todo esto pero es la pura verdad… Pero por favor escucha con atención algo más que tenemos para contarte: hace diez años conociste a una chica de tu edad llamada Testarossa Fate que es una de las hijas de un clan de vampiros… Nanoha, tienes un compromiso con esa joven vampiresa. Pero oh, no te alteres, que si así lo deseas cuando vayas a verla sólo con un rechazo podrás romper el compromiso. Aunque no creas que lo hicimos por algo más que no sea tu posible felicidad porque esa joven tiene el poder de volverte una súcubo al completo con lo que podrás vivir varios cientos de años. Lo sé, lo sé, sé que suena demasiado fantasioso pero existimos aunque somos ya muy pocos. Kyouya y Miyuki aceptaron el compromiso con sus respectivas parejas, que al igual que Fate, eran vampiros, y ellos serán capaces de vivir muchísimo más tiempo que un humano. No esperamos que nos des tu repuesta ahora pero dentro de una semana iremos a la mansión de los Testarossa para que vuelvas a ver a la hija menor de Precia, la llamada Fate como ya te dije. Créeme que si te comprometimos con aquella muchacha es porque sólo deseamos tu felicidad y una vida extensa y próspera para vos.

Dicho lo dicho por la matriarca de los Takamachi se levantó la sesión. Nanoha estaba muy sorprendida. Aquella semana casi no se logró concentrar en su aprendizaje de idiomas aunque lo intentara con esmero. Y luego llegó el día en que la familia Takamachi debía ir a la mansión Testarossa. Aquel mediodía llegaron y Nanoha se quedó boquiabierta ante la gigantesca mansión que más parecía un complejo de palacios que era la residencia Testarossa que se ubicaba en las afueras de la ciudad de Uminari.

La misma Precia junto con su hija mayor Alicia salieron a recibirlas. Una vez adentro y tras quedarse los otros cuatro integrantes de los Takamachi cerca del hall principal al pie de una gran escalera que llevaban del segundo hasta el cuarto piso Nanoha por petición de su madre salió al gran jardín trasero. Allí, sentada al borde la fuente en el centro del lugar estaba Fate y Nanoha se sorprendió de que aquella joven de su edad fuera igual a la de su sueño pero ahora que la veía cara a cara recordó bien que ya la había conocido hace una década y que jugaron juntas como cerca de medio año hasta que Fate simplemente no volvió a aparecer. Y Nanoha no la buscó porque le habían dicho que Fate se fue a vivir al extranjero para seguir con unos estudios avanzados. Cuando se saludaron Nanoha le mencionó esto a Fate y ella le dijo que todo eso era cierto y agregó:

– Pero además cuando noté que empezaba a enamorarme fuertemente de vos y que no era cosa del momento o simplemente algo pasajero tras conocerte bien me fue ordenado que me separara de tu lado. Eso fue porque cuando se lo conté a mi madre y luego de que se entrevistara con la tuya se acordó que ya estábamos comprometidas. Pero el pacto de sangre no debería consumarse antes de la completa maduración sexual que se lleva a cabo en los humanos entre los 18 y 21 años…

– Fate, no termino de entender la situación…

– Yo tampoco conozco todos los detalles pero en definitiva déjame preguntarte si deseas vivir casi 900 años… Con el pacto tu sangre pasará de ser roja a verde (este es el color de sangre de las súcubos "puras"). Nanoha, todo este tiempo estuve esperándote… Estuve esperando a que llegara el día en el que decidas si volverte una súcuba completa y ser mi esposa… Ya sé, primero deberíamos volver a conocernos un poco mejor para empezar, ¿no te parece? Lo digo porque no es obligatorio que realicemos el pacto hoy mismo… De hecho tenemos casi un año entero para ello pues tu cumpleaños es el 15 de Marzo, ¿verdad?

Fate posó una mano sobre el hombro de Nanoha y otra en uno de sus cachetes…

– Nanoha, nunca dejé de quererte… Ah, mine liebe…

Esas palabras tan tiernas para Nanoha ahora resonaban tan dulces como el más rico néctar. Sabía que debía preguntarle a Fate si ella misma le había producido aquel sueño húmedo porque era demasiada casualidad que dijera aquellas palabras en alemán en ese momento. Aunque en vez de preguntarle la pelirroja se sonrojó pero no dejó de mirar a los ojos a su contraparte. Fate entonces acercaba peligrosamente sus labios a los de Nanoha.

– Por favor concédeme un beso de tu parte.

Y sin más ambas féminas se besaron, era unos besuqueos torpes e inexpertos y apenas rozaron las lenguas.

– Fate… Fate-Chan… ¿Me dejas llamarte Fate-Chan…?

– Claro, no hay problema.

– ¿Sabes en qué consiste el pacto de sangre?

– Claro que sí, sólo se trata de beber una pequeña cantidad de sangre de la otra casi al mismo tiempo siendo ambas demónicos. Y eso es todo.

Tras esta charla las dos jóvenes fueron a reunirse con los demás en el hall central de la mansión Testarossa. Una vez allí las dos escucharon toda la siniestra historia de por qué a ellas no se les permitió verse durante una década de parte las matriarcas Precia y Momoko…

Continuará el capítulo 2…

Notas del autor: ey, desde ya yo no soy un gran autor como otros/as tantos que hay aquí en Fanfiction Punto Net pero esta vez quiero redactar una historia mínimamente desarrollada… Y bueno, espero no aburrir ni con este primer capítulo ni con los que vendrán… ¡Saludos, gente!