Asesinos

Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Kishimoto-sensei

Asesinato I

Imperfectos

Se levantó cuando el sol estaba cayendo, se preparó un café y escuchó el ruido de la ducha, su compañero de apartamento y de trabajo, se debería estar dando un baño, preparándose para un nuevo encargo.

Dentro de unos minutos seguramente llegarían Temari y Kankuro, con los nuevos detalles para el siguiente asesinato.

A eso se dedicaba la empresa Sabaku, eran asesinos a sueldo y contaban con los mejores de todo Japón.

La empresa estaba dirigida por los jóvenes hermanos Sabaku, Temari y Kankuro, y uno de sus mejores asesinos era Gaara, el hermano menor, el más letal, el que nunca había fallado en una misión.

Su compañero en las misiones era el segundo mejor asesino de la empresa Sabaku, Uchiha Sasuke.

Ambos tenían 22 años, pero contaban con la experiencia y la prolijidad de los más veteranos, ellos eran la elite de los asesinos, y solo se ocupaban de las misiones más peligrosas, importantes y las mejores pagas, las de rango A.

A ellos dos no les detenía nada, ellos vivían para matar.

"Y los demás viven para ser asesinados"

Gaara iba por su segundo café, cuando Sasuke ya estaba cambiado, sentado en el sofá, en la espera de los hermanos de Gaara. Se estaban tardando demasiado, y ellos odiaban la impuntualidad.

Y cuando estaban por empezar a maldecir, golpearon la puerta.

Los hermanos Sabaku habían llegado.

Sasuke se dirigió a abrir la puerta, sabía que Gaara no iba a hacerlo, por él que se quedaran golpeando todo el día, se lo tenían merecido por haberlo hecho esperar.

- Buenas tardes - dijo Sasuke y se hizo a un lado para que entren.

- Buenas tardes, Sasuke, Gaara. - Temari se sentó en el sofá y Kankuro la siguió, estrechando la mano de Sasuke y dejando unas carpetas sobre la mesa.

- Se tardaron.

Y ahí estaba Gaara, siempre tan dulce, tan directo.

- Había tráfico - le restó importancia Temari.

- ¿Y bien¿Hay una misión para esta noche, o no?

- ¿Con prisas, Gaara? - sintió que su hermano menor la miraba con aires asesinos, pero no la intimidaba en lo más mínimo. Ella también era una asesina de elite, pero tuvo que dejar de serlo cuando tomó el mando de la empresa. - Kankuro, abre las carpetas. ¿Preguntas?

- ¿Cuántos son? - preguntó Sasuke.

- Es una misión larga, que llevará varias noches. Pero lo de hoy solo es la primera parte. Nos han contratado para eliminar a todos los pertenecientes a la empresa Ma.Ki, todos los que tengan acciones, poder, influencia. Quiero un trabajo limpio, sin errores. Por lo investigado, son dos clanes distintos, son una sociedad.

- No me haz contestado, Temari. ¿Cuántos son hoy?

- Tres. Kankuro... muéstrales.

- Enseguida. Está es Maito Kurenai, 33 años. Socia secundaria. - sacó la foto de la carpeta y se la pasó a Sasuke, que luego se la dio a Gaara, que estaba mirando por la ventana. - Esta es su hermana menor, Maito Tenten, 19 años, socia secundaria. - sacó la segunda foto y se la pasó a Sasuke. - Y por último el único hijo de Kurenai, Eiji, de tres años. - sacando la última foto.

- ¿Cuántos somos?

- Ustedes eligen a quién más incluir, les dejo a su disposición el equipo. Pero yo les recomendaría a dos asesinos muy buenos que han surgido.

- No.

- ¿Qué, Gaara?

- Con dos asesinos es suficiente. Sasuke y yo nos podemos hacer cargo perfectamente de las dos mujeres y el niño. No necesitamos otro asesino más. Sólo necesitamos personal técnico.

- Como quieras. Kankuro.

- Esta es la casa, tiene cuatro habitaciones, que se encuentran en el segundo piso. La de la izquierda es donde duerme Tenten, la del fondo es de Kurenai, y la de la derecha es del niño. En la primera planta está el living, el comedor, una biblioteca, y un salón de juegos. No tienen perro, pero si vigilancia. Son tres. No es necesario matarlos, pero si interfieren...

- ¿Algo más que debamos saber?

- No, Sasuke, nada más. Aquí tienes los planos, pero cuando confirmen el equipo se los envío por e-mail.

- El mismo equipo de siempre. No haremos cambios.

- enseguida se los envío. Se me olvidaba decir, no subestimen a las mujeres, ambas saben artes marciales, podrían oponer resistencia.

- Mejor así. Sino, no sería divertido.

- terminado el asesinato, se les pagará, cuando el cliente nos pague a nosotros. Ya hemos dicho todo, nos vamos Kankuro, ya es tarde. Hasta luego, Gaara, Sasuke.

Los hermanos Sabaku salieron del departamento y se encaminaron hacia el coche.

- ¿Pasa algo?

- Nada, tan solo me da nostalgia, saber que años atrás éramos nosotros los que nos preparábamos para asesinar, no es tan divertido estar de este lado.

- Si se extraña. Pero hay que dejárselo al hermano menor, el es el asesino ahora, nosotros tenemos que encargarnos del negocio familiar.

-

Era una noche sin luna, todo estaba sumamente estrellado, e iban a ser las únicas testigos de los asesinatos que se estaban por cometer.

Sasuke ingresó por una de las ventanas, el se encargaría de Tenten, y Gaara de los otros dos. Las luces habían sido cortadas de ante-mano, todo estaba en penumbras y se guiaba por el recuerdo de las fotografías. Colocó bien su auricular, cualquier cosa se comunicaba con Shikamaru, que estaba en la camioneta.

Abrió lentamente la puerta, y sacó una linterna del bolsillo, se puso sus guantes y se acercó a la cama, Tenten estaba durmiendo, sería presa fácil. Se acercó más aún, no tenía tiempo para perder.

Escuchó un ruido sordo, y antes de que la joven abriera los ojos, acabo con su vida lo más rápido que pudo, para causarle el menos dolor posible.

Era un asesino, no un torturador.

Salió de la habitación y cerró la puerta con sumo cuidado, y Gaara salió de la puerta de enfrente.

- Vamonos.

Ambos habían acabado con una parte de la familia Maito, que junto a la familia Uzumaki, eran los dueños de la empresa Ma.Ki.

Y debían matar a todos ellos.

A todos.

Esa parte de la misión estaba cumplida.

Porque eran dos de los asesinos más peligrosos y letales, fríos, y prolijos. Eran perfectos en su perfección.

Lo tenían todo. Dinero no les faltaba, eran apuestos, inteligentes.

Pero en toda perfección siempre falta algo.

Algo que llenara esos corazones vacíos, algo que saciara esa sed de sangre.

Y la respuesta a esa imperfección, eran dos jovencitos que estaban destinados a conquistar a los dos asesinos más buscados de todo Japón.

Esos dos asesinos que tenían como misión matar a toda su familia.

Inclusive a ellos dos.


¡¡Hola!!

Que gusto saludarlos. Espero les haya gustado este primer capítulo y pueda contar con sus comentarios.

Shampalwe.