La tierra de la plata
Diario de España a Argentina
Cáp 1: El reconocimiento
Diario de expedición hacia las Indias
Día 6… 1536
Hola diario, estoy algo preocupado de que deje a Romano en mi casa solo, creo que no podrá cuidarse –suspira y sigue escribiendo-bueno, Solís y Magallanes no han regresado para indicar a mi rey o a mí de cómo son las nuevas tierras. Portugal me ha dicho que hay un niño pequeño rondando (querido hermano, espero que sean verdad tus suposiciones), en fin, ahora iré con Mendoza para ver si esa teoría de Portugal (Pablo) está bien, espero que ese niño no os eché…
Día 7… 1536
-Joder, eh llegado, esta nueva tierra será Argentina, ahora ¿por dónde deberé comenzar?…
-Sr España, disculpaos, pero un grupo de Indios, los mismos que estaban en Perú vienen al campamento-el Gral. López se acerco a mí, estos indios estaba por todo el territorio, eran del antiguo Perú y estaban por todos lados, se deben estar vengando de nosotros por matar a quien era mi esposa y llevarme a su hijo, aquí debe de ser igual…
Pues sí, me obligaron a tomar mis generales en México, desde entonces estuve con todas las prisioneras que resultaron ser las representantes del nuevo territorio, me case con cada una y les prometí que las buscaría para estar con ellas…
Yací, a ella es la que busco, una mujer algo morena clara, cabello castaño claro pero largo, ojos azules como el agua. Ella es la madre del niño que está aquí, mi hijo, Martin. Pero lamento decirle que deberé cuidarlo solo, puesto que ella ya no debe de existir para que no recuerde sus antiguas raíces y se una a mí a compartir mis costumbres…
-¡Aquí vienen joder! –todos se posicionaron con sus armas y pude verla con Martín en el caballo, joder, se ve demasiado bella en forma de pelea.
-Antonio, ya veo que esto siempre fue obra tuya ¡¿Otra vez invadiendo mi espacio?! ¿Cómo se te ocurre? ¿No te basto con matar a las demás y arrebatarles a los críos, ahora venis por mí?, después de tanto tiempo –escucho cada palabra con tristeza, me acerque a ella y la abrase llorando, ella me abrazo, pero tuve que hacer esto, porque si no él me iba a odiar luego…
-Perdonadme Yací, esto es por el bien de nuestro pequeño-le clave mi espada en el abdomen sintiendo como ella se volvía fría perdiendo la movilidad, cerrando los ojos y su sangre caliente empapaba mi mano, todo esto mientras la recostaba en el suelo escuchando sus últimas pero alentadoras palabras, las mismas que todas me dijeron…
-S-Se u-un buen padre p-para Martín, c-cuídalo t-toño –sonrió con la sangre en la boca y al final murió, me sentí muy culpable, pero mis hijos son muy importantes para mí, aunque sus madres no estén con ellos. Mire a mi hijo con un amor inmenso como a todos mis otros hijos y lo abrase alzándolo…
-¡Escuchadme, caven una tumba para Yací, en este momento ocuparemos este lugar, por orden de mi rey eliminen a estos indios! –dije serio llevándome a mi hijo a la tienda de campaña para que no viera lo terrible que estaba pasando, definitivamente este día es el día en que mi hijo Martín será la nueva Argentina- Pronto hijo veras a tus otros hermanos, a Lovi y Feli, a Fran, a Gil y Lud, ellos te ayudaran al igual que yo, voy a cuidarte, a darte todo lo que necesitas, a protegerte de Arthur, lo veo por aquí y le doy un disparo en la frente, pero te prometo que estarás muy bien, a pesar de que menudas veces estaré ausente para ti, serás fuerte a tú manera-abrace a mi pequeño que estaba dormido tan tierno que no quería soltarlo y no lo hare nunca…
Ciao~ bellos, van a llorar con este diario de nuestro padre sexi *^*, yo llore al escribir la primera parte TcT…
Espero que les guste, comenten, puntúen, regaladme tomates :3…Arrivederci
PD:seguire con las otras dos de a poco
