Hermano humano

-Pero… Denai…

-Descuida Kenai, no importa lo que elijas… tu siempre serás mi hermanito.

Ahí, en los brazos de mi madre, que en esos momentos era un espíritu, veía a mi hermano mayor, que había recuperado su apariencia humana.

Pero… ¿acaso quería renunciar Kenai a su vida humana?, ¿por mí?

Recordé lo que había dicho hacia apenas unas horas:

"Daría lo que fuese si…"

No… ¡no podía dejarle!

-¡Kenai para! - Salté del los brazos del espíritu de mi madre y miré al otro espíritu, que supuse que era -Sitka… por favor, no lo hagas, yo…

Noté una mano que se ponía suavemente sobre mi cabeza; Kenai…

-Koda… tranquilo, ahora volveré contigo… ah… - suspiró - no se si ni me entiendes… yo ahora no se que dices… espérame un momento…

No podía ser, no era capaz de pararles, no era justo… tal vez Kenai había cometido una equivocación, pero si el era humano, no debía pagarlo así, ni por mi... estaba tan impotente… ¡necesitaba que alguien me escuchase antes que no hubiese marcha atrás!

Miré suplicante a mi madre, ella entendió lo que quería y miró a Sitka, aunque sus labios no se movían, supe que le estaba hablando.

El asintió con la cabeza, me miró... sentí una especie de molestia en la garganta...

-Uh... mamá, ¿que... - me callé de repente y me tapé la boca con las patas; había hablado, no como hacen los osos, si no como un humano... claro, Sitka quería que hablase a todos.

-Ah... Kenai... yo...

No sabía ni por donde empezar, tenia tantísimas cosas que decir… era como si todas me gritasen a la vez en la cabeza…

-Koda... hermanito, no sufras, estaré contigo… ¿vale?

-Sí... sí, me alegro, pero... tu te mereces estar con tu hermano...

¿Como podía alegrarme y sentirme triste por una misma cosa?

-Creme, ahora mismo no me merezco nada... por eso cuidaré de ti, para compensar lo que he echo... y porque es lo que un hermano tiene que hacer.

Me dolía lo mucho que lo sentía, le perdonaría en ese mismo instante, todo…

-Kenai, yo quiero quedarme a tu lado, pero... te no soy tu único hermano… tu y Denai… no podría separaros... así que si alguien tiene que renunciar, lo haré yo.

-¿Hacer el que? - preguntó esta vez el humano que nos havia estado persiguiendo todo el tiempo.

-Sitka... cámbiame.

En sus ojos pude leer "¿estás seguro?"

Miré a mi madre, no se porqué, pero parecía orgullosa, miré a Kenai... a pesar de que estuviese tan cambiado, seguía reconociéndolo, miré el Salto del Salmón, desde ahí se veía completamente; los osos, los peces, Toug, Boky... no podría ni decirles adiós...

Cerré los ojos con fuerza, temblaba, creo que estaba llorando, pero puede que nunca hubiera estado tan seguro de algo como en ese momento.

-Adelante, hazlo.

Noté como todo mi cuerpo cambiaba, mis garras se volvieron manos, el pelo decreció por todo mi cuerpo, menos en la cabeza, donde creció mucho mas de lo normal, me enderecé, mi morro se hundió en la cara, mi nariz se transformó, a la vez que mis orejas… cuando pude darme cuenta era un niño humano.

De repente sentí un fuerte mareo, llegué a pensar que algo iba mal, me senté en una roca que había ahí mismo.

Miré a Kenai, a pesar que tenia la vista borrosa, en su mirada vi muy difuminadas la alegría y la tristeza, le sonreí, y el me devolvió la sonrisa.

Respiré profundamente, empecé a notar todas las cosas que no había tenido tiempo de fijarme, el corazón me iba a 100 por hora, me pesaba el cuerpo de mala manera, como si toda mi fuerza se hubiese ido junto a las luces que me habían cambiado.

Mi madre se acercó a mi, y me abrazó, no estoy seguro si fue una despedida o un hasta luego; pero cuando me soltó noté un peso en el cuello, llevaba un tótem con la misma forma que el de mi hermano.

-Mamá… lo siento…

Me sonrió y me acarició la mejilla, supe que quería decirme algo similar a lo que hacía nada había dicho el hermano de Kenai.

"No importa lo que elijas, tu siempre serás mi hijo."

-Por supuesto mamá…

-Esto… felicidades por la escenita, - interrumpió Denai- pero… Sitka, creo yo que estos tienen que llegar hasta la tribu… y ahora empieza el invierno… y yo no he traído más ropas que las que llevo puestas.

Me di cuenta que tanto yo como Kenai íbamos desnudos, cuando era un oso no me molestaba, pero ahí arriba corría un aire frío que… ¡brrr!

Así que Sitka suspiró silenciosamente e hizo un gesto; el cuerpo de Kenai quedó cubierto de unas pieles, ropas como las llamaban ellos; mas tarde sabría que eran idénticas a las que se rompieron cuando se volvió un oso.

Me miré a mi mismo, yo también tenia ropas, de mi talla, claro está, me fijé en la capucha, por los cuernos que caían, supuse que había sido de un ciervo… eran del mismo color y forma que las del espíritu.

-Eh… gracias - dije, me sorprendí a mi mismo, tenia la misma voz que cuando era un oso, y no me había costado nada usar mi nueva boca.

Sonrió, hizo un gesto de despedida y se volvió un águila, alzándose al cielo, seguido de mi madre, que se giró para sonreírme otra vez...

La iba a echar realmente de menos.

Nos quedamos un rato en silencio, el cielo volvía a ser el mismo de antes, y reinaba de nuevo la calma típica, como si todo hubiese sido corregido.

-Esto es de esas cosas que le tienes que contar a tus nietos…

Denai estaba realmente asombrado, parecía que hubiese visto un fantasma…

-¡Eh, mírate! -Kenai le pasó el brazo por el hombro a s hermano mayor - ¡Parece que no hayas comido nada en días!

-Unos dos días…

-Uf… pues eso hay que arreglarlo, conozco un lugar precioso con peces a patadas… seguro que habrá algún huequecíto sin osos…

-¡Alto alto alto alto! ¡¿Estás hablando del Salto del Salmón?! No puedes llevarle ahí, eso es un terreno de los osos, ¡es casi sagrado! ¡Y el es un humano!

Kenai me miró con mala cara y carraspeó.

-Bueno, vale, tú también lo eres… pero al menos tú has sido oso…

-Ejem…

-Y yo también soy humano ahora… jo, ¡no hace ni 2 minutos!

Denai intentó ahora una risa, pero no lo consiguió y se echó a reír a carcajadas, no se que chiste le habían contado, pero se estaba doblando y casi le caían lágrimas.

Mi hermano y yo estábamos atónitos.

-¿Te encuentras bien?

-Sí, es solo que me hace mucha gracia, hoy será un día para recordar; me entero de que no estás muerto, y vienes con un hermano bajo el brazo…

Parecía dispuesto a besar lo primero que se le cruzase.

-Hey Denai, no te reconozco, se sentimentalodie estás…

Empezaron a pelearse a lo tonto, ¿quién diría que hacia nada se estaban matando de verdad?

-Va a ser cosa de largarnos ya de aquí…

-Yo la última vez me caí por aquí y me pegue un porrazo en la cabeza, así que mejor me digas tú por donde se baja… ahora recuerdo que me desperté con Tanana cuidando de mí…

Ya podían hablar ellos, pero no me estaba enterando de nada…

-¿Tanana? ¿Pero no era ya un oso por aquel entonces?

-Sí… pero ella lo sabía todo…

-Esa Tanana… siempre dice y hace menos de lo que sabe.

-¿Podemos seguir hablando de esto de camino? - les pedí - empiezo a tener vértigo…

Kenai me sonrió, el y Denai asistieron; por lo que me dirigí hacia ellos… que difícil es andar a la humana, se me clavaban piedras en las manos, iba arrastrando los pies y me dolían las rodillas…

Entonces me di cuenta que mi hermano me miraba como si sintiera vergüenza.

-Koda… levántate, los humanos caminamos a 2 pies…

Denai se partía.

-Uh… ahora que me fijo… es verdad. - me levanté, uf, que mareo me dio la primera vez.

-Kenai, ¿no le has explicado nada a tu "hermanito" acerca de ser humano?

-Bueno… hace apenas unas horas que se lo he contado… y no nos habíamos visto desde entonces.

Denai recogió su lanza y se dirigió a una ladera que hacia una suave pendiente, pasando por delante mío; la vi de tan cerca, esa arma… me tambaleé, de repente me entraron todos los males, solo pensar lo que eso podía hacer… lo que ya había echo, a mi madre, y a tantos otros… hacia apenas nada, había estado a punto de matar a Kenai, yo me la había llevado… pero hasta entonces no había comprendido realmente de que era capaz eso.

Di unos pasos atrás, y llegué a los pies de Kenai, que me sujetó suavemente por los hombros y se agachó a susurrarme:

-Eh, tranquilo, se ha acabado, no nos perseguirán más cazadores…

Denai, que se había dado cuenta de la impresión que me había causado la lanza, también vino a hablar conmigo.

-Oye, eh… ¿Koda?, no soy muy bueno en esto de hablar… bueno, aún no se que ha pasado entre tu y mi hermano desde que nos separamos… pero seguro que ha sido algo realmente digno de ser contado, ya que el no llama hermano al primero que encuentra, así que… si tu eres el hermano de Kenai… eso te convierte en mi hermano… no se si aún me he ganado el derecho de llamarte hermano, tu puedes hacerlo, si quieres, alguien capaz de hacerse hermano de Kenai se lo merece… y se que no te debo haber causado una primera impresión muy buena… por eso de intentar cazaros… ¿que tal si empezamos de nuevo?

-¿Eh? - bien, se que no fue la respuesta mas inteligente, pero me estaban pasando demasiadas cosas en demasiado poco tiempo.

Me tendió la mano.

-Hola, soy Denai, el hermano de Kenai, ¿qué tal?

-Eh… yo Koda, el hermano adoptivo de Kenai… bien, ¿y tu?

Cogí su mano, las encajamos… ahora que lo pienso, fue la primera cosa de humano que hice.

Mas tarde bajamos por la pared de la montaña, tengo que alabar las manos humanas, mucho mejor para algunas cosas que las de oso.

Finalmente llegamos abajo, hice un último a los brazos de Kenai, y ese me dejó en el suelo, cuando estuvimos los 3, nos pusimos en marcha.

Rematadamente difícil andar con dos pies, todo el rato tropezaba, tenia la cara marrón de tanto barro…

Y no sabia donde meter los brazos de mientras.

-Vaya Koda, yo estaba como tú cuando me volví oso, aunque mi problema era intentar ir todo el rato derecho… jeje.

-Ay… no me distraigas… ya me cuesta suficiente esto…

-Bueno, solo te contaba mi experiencia de cambiar de cuerpo…

-Claro, así cualquiera se cae en una trampa, con la cara tan lejos del suelo… como cierto oso al que tuve que rescatar… - que cruel que soy a veces.

-¿Desmontaste la trampa que hice?

-Claro - le respondí - solo tuve que darle una patada al cable ese que daba al suelo.

-¡Me tiré una hora montando esta trampa!

-Y yo un día entero colgado de ella escuchando la vida y obra de un ex-osito…

-Je, ahí nos conocimos, ¿eh hermanito?

-Que raro me resulta esto de tener un hermano ahora, así, de golpe…

-Ya te acostumbrarás a mi… - bromee.

-Oye Kenai... perdona por lo de… eh… lo de intentar… ¿cómo decirlo?

-¿"Matarme"? No pasa nada… me confundiste con otro, y… ¿para que están los hermanos si no es para pelearse entre ellos?

-Entonces…

-Que sí, que te perdono, -puso una falsa cara seria - pero que no se repita, ¿vale?

-Tú mandas.

Denai… era curioso, hasta hacia bien poco solo lo veía como un asesino, algo peligroso, pero ahora estaba realmente pensando en como era…

Tenia algunas cosas de carácter similares a Kenai, era igual de cabezota, tozudo, mandón, y algo infantil, sobretodo en lo de no saber aceptar las culpas, aprendí bastante de ellos escuchando lo que decían, de los humanos me refiero, y sabia que tendría que aprender mucho si me iba a quedar con esa forma…

-Estoy cansaaaaadooooo.

-Koda, es la nosecuantena vez que lo dices, ¿que quieres que haga?

-Es que tengo sueño, y es muy cansado esto de ir derecho… ¿no podrías llevarme un poco?

-¡¿Como?! Te estás pasando un poco Koda…

-Vamos… - decidí sacar la artillería pesada del chantaje emocional - venga hermanito… cuando éramos osos me llevaste muchas veces…

-Venga Koda, no seas tan infantil, aún nos falta mucho viaje para llegar a la tribu…

-Mh… - "no quería recurrir a esto, hermanito" pensé yo "pero no me dejas otra opción" - sabes, de repente me ha entrado como una nostalgia…

-¿A que te refieres?

-Echo de menos a mi mamá…

Que malo que soy…

Kenai no pudo ante eso, y accedió a llevarme a cuestas, no era mentida que estaba cansado, de echo, no tardé a sucumbir ante el cansancio de las emociones que había ido acumulando a lo largo del día, y me dormí sobre la espalda de mi hermano.

Hooolllaaaa, vale, lo admito, es un crimen contra la humanidad hacer un fic de Disney, pero… ¿Qué querías? La película me ha dado en la fibra sensible y he echo este fic… ejem, sin comentarios, bueno, si os ha gustado, no os ha gustado, os ha causado nauseas o queréis amenazarme de muerte, o cualquier cosa… ¡¡¡reviews reviews y mas reviews!!! ¬¬ eso va también para los que hablan conmigo en el msn, ya saben quien son…

Anda, ¡hasta que vuelva a escribir una paranoia!