Titulo: Konoha University Vampir

Pareja: SasuSaku.

Rating: "M" así es contiene lemon, que incluiré mas adelante, si sos una persona sensible, te recomiendo que te abstengas a continuar leyendo.

Disclamer: Los personajes de Naruto no me pertenecen le pertenecen ha Masashi Kishimoto yo solo los uso como mero entretenimiento sin fines de lucro. La trama de este fic si es mío y no soporto el plagio.

Summary: Sakura es una joven de raza impura, hija de una humana y un vampiro. Su vida cambia cuando conoce al brutal vampiro de raza pura, Sasuke Uchiha. Y junto a él la desgracia aparece.

N/A: ¡Hola gente de fanfiction. Vengo a presentarles una historia de vampiros, sangre y amor/odio. Hace meses que deseo escribir sobre vampiros pero nunca encontraba el incentivo para hacerlo. Quizá parezca fácil, pero me resultó bastante complejo. Todo, hasta que decidí dar rienda suelta a mi imaginación y dejar que todo fluya. Hay mucho de invención mía, otras ideas las tomé de todos los libros que leí sobre esta raza que, cabe destacar, AMO. Mmm… quisiera hacer algo mucho mas serio. Si bien en este capitulo encontrarán escenas graciosas, la idea no es hacer del fic una comedia, quiero probar algo nuevo. Espero que le den una oportunidad, y que cualquier cosa que vean en mi escritura, redacción, sintaxis o lo que fuere, sin vergüenza me las hagan saber. Sin más que decir, A leer.

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Prólogo

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En un mundo donde la raza de vampiros conviven junto a la raza humana, y ante la ignorancia de su naturaleza, han creado una pirámide en la escala social, ocupando la cima del poder. A raíz del crecimiento de su imperio: la cultura, educación, política y economía, juegan un papel importante e imprescindible en los recursos de los humanos. Su amplio nivel de vida les permite cosechar grandes riquezas a lo largo del tiempo y así poseer una vida de lujos, excesos y comodidad.

La familia de los vampiros son de carácter violento por naturaleza. Pero la evolución en la raza fue menguando el instinto animal, volviéndolos cada vez mas civilizados. Sus armas se convirtieron en dinero y grandes influencias en la política.

En la actualidad podría decirse que un adolescente vampiro suele fluctuar en su carácter, a diferencia de uno adulto que cuenta con los años de vida suficiente para pasar inadvertido frente a los humanos.

La transformación de un vampiro comienza a los dieciocho años. Previo a eso su alimentación se basa en carbohidratos, proteínas y vitaminas. La sed de sangre es inexistente hasta la transformación.

El proceso de transición es sumamente doloroso: los huesos se ensanchan, los órganos crean una capa protectora y los pulmones dejan de mandar oxigeno durante quince minutos, produciéndose la muerte de este. Los vampiros llaman a este procedimiento "Nacidos de nuevo"

Obligatoriamente debe haber otro de su especie junto al que comienza la transformación. Una vez transcurridos los quince minutos, el vampiro despierta con sed voraz y deseo sexual.

El macho vampiro suele ser competitivo, brutal y altamente territorial. Mientras que la hembra vampiro es tranquila, calculadora y letal.

La mezcla entre razas, tal como el humano y un vampiro es severamente castigada, únicamente la muerte de los progenitores de una criatura puede pagar tal delito. El niño o niña sin embargo, es aceptado dentro de la raza, solo si este no crea vínculos con los humanos, de lo contrario la pena de muerte también adjudica en su caso.

Son llamados impuros los hijos de un vampiro y un humano. Generalmente están expuestos a ser el centro de burlas y maltrato. No son bien recibidos aunque legalmente tengan permiso concedido de andar entre ellos.

Tanto los vampiros puros como los impuros poseen una fuerza mayor a la de un humano. Sus sentidos se encuentran agudizados, su velocidad es indetectable y poseen el poder de teletranspotarse a lugares que ya hayan estado antes. Este último es imposible antes de la transición y conlleva demasiado entrenamiento.

En el mundo hay distribuidas innumerables preparatorias y universidades para el desarrollo de cada integrante de la familia vampiras. Pero una sobresale de cualquier otra.

Konoha University Vampir es un centro de estudios preparado para albergar a ochocientos alumnos en todo su predio. Su prestigio es ampliamente reconocido a nivel mundial. Cada cinco años comienza una preselección de las familias mas adineradas del ciclo y luego de un estudio exhaustivo de sus registros donde el dinero, conducta y renombre influyen en su totalidad, la universidad envía a la familia una carta en la cual sus hijos son cordialmente invitados a formar parte del reconocido establecimiento. En resumidas cuentas, recibir un sobre sellado con el nombre de la Universidad es un suceso atípico y único.

Luego comienzan los exánimes de admisión. El alumno es estrictamente evaluado, con mas de diez fechas a rendir y una tesis. Para finalizar, los ochocientos mejores puntajes deciden el ingreso a la misma.

Konoha 1 de Enero del año 2020 -8 horas P.M-

— Y recuerda, nunca intentes entablar una charla con descendiente de Ancianos.

La joven giró sus ojos con extrema parsimonia para denotar el cansancio a los repetitivos consejos de su tía.

— ¿Algo más, tía?

Dejó molesta los trastos que estaba secando sobre la mesada y giró con enfado hacia la muchacha.

— ¿Crees que es tan simple, Sakura?—Preguntó exasperada—. ¿Sabes que pasaría si algún miembro de los Ancianos reconociera que eres impura?

La muchacha apenada inclinó al piso su cabeza. Se encontraba demasiado nerviosa. Comenzaba la Universidad al día siguiente y no solo por el hecho de conocer gente nueva. Hacia dos semanas la mejor Universidad del mundo había tomado en cuenta su expediente como posible miembro del establecimiento.

Su familia era adinerada. Sus padres antes de morir habían amasado una buena fortuna, y sus tías con responsabilidad habían cuidado de ella. Ninguna poseía problemas con la justicia y el único hombre de la casa poseía la influencia suficiente en el senado como para mantener el apellido de la familia dignamente, aunque había un detalle

-importante- que nadie jamás tocaba. Ella era hija de un vampiro y una humana. Era la creación más abominable para los vampiros que podía existir. Hasta ese momento nunca había tenido problemas con ello porque se había mantenido discretamente, pero ahora que ingresaría a Konoha University Vampire, ya nada seria un secreto. En la lista de asistencias estaría la evidencia de cuales eran sus raíces. Y aunque la Universidad era consiente de ello, sus nuevos compañeros no compartirían la misma teoría

—Te hice una pregunta, jovencita.

Sakura la observó desorientada ante el mar de pensamientos que surcaban en su mente.

— Voy a resumírtelo. Los Ancianos son los vampiros más antiguos de nuestra raza. La palabra de uno de ellos es ley. Poseen gran parte de influencia entre los nuestros, y sobre todo odian con toda su existencia a los impuros. Si te mantienes cerca de algún descendiente de ellos, cavarás tu propia tumba. Así que por tu bien y el de toda tu familia piensa bien a la hora de armar tu propio grupo de compañeros.

Sakura que estaba con poco apetito, alejó el plato con vegetales y terminó por saciarse con los comentarios de su tía.

— Lo haré tía, no te reocupes.

— ¡Claro que tengo con qué preocuparme! Eres tozuda, mal humorada y de mano suelta. Controla tu temperamento, Sakura. Las hembras tienden a ser tranquilas, estudian la situación con frialdad, si reaccionas de manera explosiva te expondrás tu misma. Las de tu raza tienden a ser impulsivas y salvajes.

— Shizune, deja en paz a Sakura Hace quince días que no paras de repetir lo mismo. Déjala respirar.

Giró al recién llegado.

— Pero Kakashi, no importa las veces que se lo diga, sigue sin controlar su temperamento. Es por su bien—Se acercó a él para susurrar—: ¿Te imaginas si llegase a toparse con algún Uchiha y se comporta así? Sería una desgracia para nuestra familia.

Una más para poner en la lista.

La paz en el rostro de Kakashi desapareció.

— ¿Qué estás hablando, tía? Todo lo que tengas que decir, quiero oírlo. No soy una niña y se cuidarme sola. Deja de subestimarme—Se levantó precipitadamente de la silla.

— Lo ves, ahí tienes a tu sobrina, desastrosamente impulsiva y atrevida. A ver si a ti si te escucha—Ofendida salió de la cocina.

El hombre rascó su nuca y sonrió debajo de la mascara que ocultaba la mitad del rostro.

— Nada que debas saber, pequeña. Ve y termina de preparar todo para mañana.

— Pero tío, no soy una niña—Él la observó con ternura.

— Lo sé. Todo lo que aun no sabes no es más que por tu bien. Confía en nosotros.

Jamás dejaremos que nada malo te ocurra.

Sakura sintió sus ojos humedecer, su tío era lo mas cercano a un padre, y cuando la observaba con ese cariño innato la hacia sentirse amada. Jamás había conocido a sus padres, ellos habían sido asesinados por los ancianos. Guardaba resentimiento a causa de aquello. Dudaba de su control si algún día le tocara toparse con uno.

— Así me gusta. Ahora ve.

Al llegar el día, le fue casi imposible pegar un ojo en las horas restantes. Los vampiros eran sensibles a la luz del día, vivían al revés del resto de la humanidad. La ropa escogida para usar ya había sido preparada. Y la maleta con todas sus pertenencias para toda la semana ya habían sido empacadas. Los fines de semana tendría salida a su hogar, el resto debería permanecer en la Universidad. Seria la primera vez que estaría tanto tiempo sin su familia.

El ruido chillón del despertador comenzó a sonar. Había tenido un día terrible.

Luego de una ducha, comenzó a vestirse. Y una hora después con el desayuno en su estomago ya se encontraba dentro del auto de su tío camino a lo que seria su nuevo hogar.

— ¿Nerviosa?

El chofer la observó por el espejo retrovisor. Volteó a ver a su tío sentado detrás junto a ella.

— Algo, me duele el estomago—Se quejó tomándose de él.

— Es normal, siempre suele ser así el primer día. Luego todo se vuelve rutinario—Sakura asintió y giró a ver el recorrido.

— Tu tía te envía esto—Prestó atención al móvil que le ofrecía Kakashi.

Una tenue sonrisa afloró en su cara.

— ¿Acaso es tal su miedo de que haga el ridículo que me va a llamarme constantemente para controlarme?

— Ella te ama, solo se preocupa por ti, no seas tan injusta con tu tía. Solo acéptala como es. Confía plenamente en ti aunque no lo parezca. De quien no confía, es de los que serán tus compañeros. Sakura, dentro de nuestra raza hay demasiada maldad. No todo es tan fácil como se ve. Harán cualquier cosa para escalar a la cima, aun cuando eso signifique aplastarte la cabeza, nunca lo olvides.

Aun le costaba acostumbrarse a la violencia dentro de su raza. Podría decirse que el lado humano de su madre corría por sus venas.

— Haré todo lo posible para no toparme con problemas.

— Esa es mi chica—Despeinó sus cabellos como cuando era una pequeña de cuatro años. Refunfuñó de mala gana, pero luego rió con él.

Se despidió de su tío y comenzó a buscar la numeración de su aula. Al dar con ella e ingresar al salón notó que había una buena cantidad de alumnos, de hecho, parecía haber los suficientes para llenar el salón. Con curiosidad buscó la hora en su reloj y se aterró al ver que faltaban tres minuto para las ocho de la noche, horario que comenzaba la clase. Al caer en cuenta que aun seguía inmóvil frente a la multitud, el calambre en su estomago se hizo mayor. Estaba demasiado nerviosa y el motivo no era más que las miradas de los presentes. Todos la observaban desinteresados, algunas mujeres habían arrugado el seño al pasar por ella. Desde lejos repasó el salón buscando un lugar disponible. ¡Era enorme! Y todo estaba ocupado. Jodida suerte la suya.

Al centro y en medio había un lugar disponible. Apresuró su paso y cuando iba a colocar su bolso una muchacha bloqueó con su mano el paso.

— Ah ah—Negó con su cabeza—. Está ocupado.

Oyó un par de risas de fondo y su instinto rugió como león enjaulado. Normalmente habría tomado de sus mechas para lanzarla a la otra punta. Pero luego recordó a sus tíos y pudo superponer el sentimiento de supervivencia.

— Claro, disculpa.

— Ves querida, anota y aprende—Oyó burlarse nuevamente con la amiga el haberle privado el asiento.

Nota mental: Descubrir su nombre, apellido, número de habitación, y fabricar un bozal con sus vísceras, ¡Shannaro!

Casi al final encontró otro lugar vacío y al llegar a él un muchacho rubio de ojos celestes colocó su pierna.

—Ah ah, está ocupado—Sakura sintió una cadena de venas inflarse en su cuello a causa de la ira. Dentro de su lucidez notó al compañero del rubio. Un joven de cabello oscuro y ojos del mismo color. Quedó impactada cuando sus miradas chocaron. La observó y sintió un golpe de adrenalina. Su mirada era pesada y atrayente, a duras penas reconoció que jamás había conocido a un muchacho tal como él.

Pero su ensoñación acabó cuando prestó atención al sentimiento detrás de su mirada: Asco, molestia… furia. Ese chico le puso la piel de gallina, no entendía porque la observaba así, jamás en su vida lo había visto. Luego cuando otros detrás rieron al ver nuevamente la broma que el rubio le había gastado, él giró y observó a sus compañeros de la misma manera. Internamente se relajó al comprender que era su personalidad y no había nada personal. Pero finalizó su estudio cuando recordó que seguía parada como una imbécil frente al salón y aun no conseguía lugar. La furia nuevamente la abrumó.

Cansada de ser el blanco de las burlas se inclinó lentamente al rubio y siseó de manera desafiante lo suficiente como para que solo él la oyera.

— Préstame atención, estúpido, ¿Acaso el asiento lleva tu nombre? Y si así fuera, ¿Por qué crees que debería importarme? Ahora, mueve tu pierna antes de que te la rebane con los dientes.

El muchacho dejó caer la mandíbula de la impresión, y por primera vez, luego de su madre, esa chica la provocó terror.

Su compañero, en cambio, levantó su aburrida mirada del suelo y prestó atención a la loca de cabello rosa. Nunca había oído hablar a una mujer de su raza con tanto sentimiento. Y aunque le resultaba demasiado chillona y molesta, la manera en la que había ubicado a su compañero le había divertido. Por supuesto, jamás iba a reconocerlo con nadie.

Segundos después el profesor de cátedra llegó y la clase comenzó. Sabia que a partir de ese momento y cuando el profesor tomara la lista de presentes, el infierno comenzaría.

Giró su rostro evitando lo más que pudo las presentaciones de cada uno. Los lujos de aquella universidad parecían una utopia. Solo el salón de clases daba la sensación de un estrado, todo lustrado y los asientos parecían los del Coliseo romano. Rodeaban el escritorio del profesor. Sobre él colgaba una figura con forma de gárgola y dentro de ella la luz resplandecía para dar luminosidad al lugar.

— Naruto Namikaze.

— El mismo que calza y viste—El barullo de las risas no tardó en aparecer. Era el mismo tarado que la había molestado.

— Ya, silencio—El profesor golpeo el pesado libro sobre el escritorio—Evítese lo gracioso y preséntese a sus compañeros.

— Soy Naruto Namikaze, ¡Dattebayo!—Exclamó apuntando con su puño ¿Al techo?—. Tengo diecisiete años, casi llegando a los dieciocho. Mi madre proviene del Clan Uzumaki y mi padre del Clan Namikaze. Mi familia es dueña de la empresa de petróleo "Namikaze" en Konoha y Suna. Me gusta mucho el ramen y siempre visto de naranja.

— Y de marica—Agregó un compañero de adelante.

— Cierra el hocico chico perro o voy a patearte el trasero—Amenazó furioso.

— ¡Silencio! Esto parece un jardín de infantes cuando no lo es, somos vampiros, una raza súper desarrollada superior al humano. Nosotros no damos risa, sino miedo. Es un privilegio estar sentados en este salón dentro de esta universidad y solo están logrando manchar su nombre. A partir de ahora solo voy a tolerar que las presentaciones contengan su nombre completo, la de sus clanes, junto a la empresa que dirigen, nada más. No me interesa si utilizan una maldita flor de broche o se pintan el cabello. Y el que no este de acuerdo con mis reglas, esta invitado a levantar el trasero del asiento y ceder el lugar a alguien que si sepa aprovecharlo.

Nadie acotó nada. El profesor irradiaba poder, La cicatriz en todo su rostro hablaba de un hombre de guerra. Sus palabras habían comprado el respeto de todos los presentes.

La clase transcurrió junto a sus presentaciones, hasta que lo inevitable llegó.

— Sakura Haruno.

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¿Y, qué les pareció? Espero que haya captado su atención. Les envío mi cariño, cuídense. Saludos.

By Ladyhisterilithia