Tokyo, señoras y señores. Sean bienvenidos a la ciudad que un montón de psicópatas nipones se empeña en consolidar como la capital mundial de las locuras argumentales y las desviaciones de la realidad. Y es que, el anime es eterno, como eternas son las historias que cautivan nuestros corazones haciéndonos cómplices de la conciencia colectiva internacional del fandom que suspira por entretejer nuevos horizontes para sus personajes favoritos.

No siempre las cosas salen bien, aunque sea el más caro sueño de todo escritor de fanfiction que eso suceda. En mi particular caso, lo cierto es que deseo que este entuerto salga lo peor posible; porque amo el caos, y es por eso que amo esta historia, la historia más imposible de contar (no se diga de escribir) con la que me he topado en los rincones perdidos de mi imaginación, donde las neuronas caducadas se empeñan en oxigenarse otra vez, lamentablemente.

El lugar: Nerima, Tokyo

La época: El tiempo posterior al mítico volúmen 38 del manga de Ranma ½.

Los protagonistas: Cualquiera que tenga el deseo de encontrar a su media naranja. Lo cual excluye a Akane, porque ella ya tiene a una... y media. Lo cierto es que este es un fic de chicos: el género masculino intentando comprender lo incomprensible, resistir lo irresistible y fallando miserablemente. Es una historia de hombres derrotados, vapuleados, enganchados y subyugados sin remedio por las simples argucias del género femenino.

Esta, es la historia de un grupo de guerreros enfrascados en una lucha distinta, que no requiere de armas comúnes ni de estrategias estudiadas y que, simplemente, espera escribirse de corazón a corazón.

Alisten los cascos, los refugios anti-bombardeos, los misiles antiaéreos, además de los antídotos más poderosos contra el envenenamiento por comida made-in Akane y, por supuesto, sus tarjetas de crédito de más alto límite y sus modales más corteses y sean bienvenidos a: "Conquistando a Tendo".