• Fandom: Axis Powers Hetalia.
• Titulo: Cuenta gotas.
• Claim:
Centric!Noruega.
• Resumen: Noruega siempre ha sostenido que su relación con Dinamarca es suya y nadie tendría que meterse, después de todo, si Dinamarca sigue ahí es por algo.
• Advertencias: Rarezas.
• Disclamer: Hetalia pertenece a Himaruya, el resto a mí 3.
• Notas: Es sólo un nuevo punto de vista que me llegó sobre la relación de esos dos.


Noruega siempre lo había sabido, no era tonto, y no le gustaban las mentiras, menos a sí mismo. Sin embargo, eso no hacía que fuera necesario expresar todo lo que decía en palabras, contaban más las acciones.

Y así como se conocía, conocía bien a Dinamarca, no por nada habían sido mejores amigos (unos muy poco vistos, contando todas sus diferencias) y aún ahora, con Dinamarca empujándolo emocionalmente para lograr avanzar en esa relación, él seguía viéndolo como un amigo. No pensaba perder aquella amistad (importante y personal) aún si lograban subir de nivel. A veces su hermano menor, Islandia, cuestionaba sus acciones con interés, y él no sabía si era por genuina curiosidad o por la creciente necesidad de Islandia de mostrar que era un adulto y Noruega podía confiarle ese tipo de cosas.

Finlandia, Suecia, Islandia… Groenlandia y algunos otros entrometidos se apiadan de Dinamarca, Noruega lo sabe, se lo han dicho de frente a él: "¿Por qué lo tratas tan mal?" Sí, incluso Suecia, y a pesar del malestar que le causó aquello, Noruega no le inquirió el por qué de su repentino aprecio por el danés. No que Suecia hubiese respondido, de cualquier manera, con o sin Finlandia presente.

"Pobre, pobre, pobre Dinamarca… ¿por qué eres tan duro y frío con él, Noruega?", Finlandia no sabe nada, porque no es ni fue ni será tan cercano al danés como lo es él, y sólo por ello no puede hacer especulaciones.

"Pobre Din, ¿sabes lo que le haces? Lo trastornas" Groenlandia, cercano, pero no lo suficiente, nunca lo suficiente, y ambos lo saben; Dinamarca habló con Noruega poco después de que Groenlandia lo hiciera, y se lo dijo: "Lo quiero mucho, sin embargo, ¿no eres tú el más especial de todos, Noruega?" y sí, lo era.

Pero a veces, no se sentía lo suficientemente especial. Y con todos los países del rededor, murmurando por lo bajo, a sus espalda o en su cara, lo hacían sentir como el malo de la historia. Y no era así. ¿Pero qué sabían ellos?

Noruega no era frío porque odiase a Dinamarca, ni porque le gustase verlo sufrir o cualquier otra cosa disparatada que pudieran pensar; Noruega lo hacía porque conocía bien a Dinamarca, y sabía lo fácil que éste perdía el interés en las cosas o personas que resultasen fáciles, y Noruega lo quería. Sí, a veces le era difícil rechazar lo que él mismo deseaba, pero se convencía diciéndose que era lo mejor. Y lo era.

Noruega a veces tenía problemas para expresarse y Dinamarca se aburría tan fácilmente… ¿qué otra cosa podía resultar? Y, sin embargo, Noruega cedía muchas veces, porque Dinamarca también se habría cansado si sólo rechazos recibiese de su parte.