Vocaloid no me pertenece sino a sus respectivos dueños...

enjoy it~


Era una tarde bastante bella, el paisaje sin duda era muy tranquilo con un toque romántico por así decirlo, ambas estaban sentadas en el césped sobre ellas se encontraba un bello árbol de cerezo, el cual las acogía, la mayor de ellas había guardado silencio sin saber que decirle a su pequeña amiga, quien estaba pasando una situación similar a ella, no encontraba las palabras en su cabeza.

Por otro la chica en cuestión observaba el paisaje, sonreía tenuemente, mientras disfrutaba aquel silencio cómodo en cierto modo, le encantaba estar con la chica más alta, disfrutaba su compañía, y claro estaba muy agradecida de que ella sea su mejor amiga desde que eran niñas.

-¿Luka?…-llamo la chica de coletas a su acompañante, quien la miraba de reojo, muy atentamente.- el olvido es difícil, ¿verdad?

Sonrió amargamente, la chica por fin había acabado con el cómodo silencio entre ambas.- no se trata de olvidar, Miku….-hizo una pausa mientras miraba sería a su mejor amiga.- sino de superar.

-¿A qué te refieres?.- pregunto un tanto dudosa.

-A que es mejor superarlo a olvidarlo.- dijo mirando hacia el pequeño lago que estaba en frente.- el olvido puede ser momentáneo pero con superarlo puede ser para siempre.

La menor no sabía que decirle a su amiga de cabellera rosada, no había comprendido bien lo que la otra estaba tratando de decirle, pero sabía que sus palabras eran sabías en cierto modo, ¿cuál?… es algo que debía averiguarlo.

-A lo que me refiero, Miku, es a que si al superarlo…no importa lo que pase, tú ya habrás cerrado ese capítulo en tu vida, estarás tranquila y segura que no te volverá a dañar.- decía una tranquila Megurine.

-¿Es lo que tú tienes pensado hacer luka?.- decía una ya inquieta peliaqua a la actitud tan relajada de su amiga, que a pesar de haber terminado hace no más de 3 semanas su relación estaba como si nada, por lo menos eso aparentaba y muy bien.

-Si…es lo mejor Miku, y tu deberías hacer lo mismo.-suspiró, luego de esa pequeña pausa, volvió a mirar a la nombrada.- después de todo, todas somos amigas.- volvió a sonreír de manera melancólica.

-Tienes razón Luka-chan.- se acomodó en el regazo de su amiga.- me alegra contar contigo después de todo.

-Estaré contigo siempre, mi pequeña mii-chan.- decía divertida Luka amaba las actitudes infantiles de Miku, amaba su forma enérgica de ser y a pesar de todo ello, siempre que estaba con ella, se sentía muy tranquila y relajada, era muy mágico.

-mmm… ahora que Luka no está con Gumi, ni yo con Lily, eres solo mía.- decía una divertida Hatsune mientras estiraba sus brazos para apretar las mejillas de la nombrada.

-eh?...

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3 semanas atrás… "Flashback"

Se encontraban 6 chicas en una mesa de una modesta cafetería, degustando pasteles y helados mientras charlaban amenamente sobre sus vivencias, todas estudiantes, todas amigas.

-Ne Gumi, quieres helado de fresa?.- preguntaba la pelirosa mientras le ofrecía un poco de su helado a su novia

-Mouu! Yo quería de zanahoria.- se cruzaba de brazos.- bien, si no queda de otra.- decía tomando el poco de helado ofrecido por la ojiazul.

-Ahh no sean tan melosas, dios!.- decía una cansada Meiko ante la escena

-jaja no seas aguafiestas Mei-chan apuesto que si Kai-kun estaría acá, tu serías igual.- refutaba una divertida rubia quien era una de las menores del grupo.

-Ca-callate Rin, tu no hables mucho, si estuviera la chica gato acá estarías llenando el piso de baba.- contraatacaba una sonrojada y burlesca Meiko, haciendo a la pequeña sonrojarse de sobremanera.

-jaja son todo un caso ustedes.- decía una divertida Lily quien seguía comiendo del pastel de su novia.

-Lily-chan ese es mi pastel.- le reclamaba una molesta una pequeña aguamarina.- no te lo comas!.

Así siempre se llevaban este grupo de amigas, compañeras de instituto pero de distinto grados. La relación que tenía 4 de ellas no molestaba a su círculo cercano de amigas, de hecho servía para molestarlas de vez en cuando.

Pero para Luka las cosas con la amante de las zanahorias no iban muy bien que digamos, las cosas estaban un tanto frías, o así lo percibía ella, la nombrada hace casi una semana que estaba actuando distinto con ella, distante, algo que no comprendía.

En cambio para la joven de coletas las cosas con la enérgica rubia eran muy parecidas al caso de su mejor amiga, Lily ya no era la misma, siempre tenía algo que hacer antes que salir con ella. Algo que la hacía sentir poco querida y desplazada, su rubia ya ni la miraba como antes, no iba a mentir le dolía pero era un dolor tolerable, ella estaba consciente que quería mucho a la ojiazul pero no estaba enamorada de ella.

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Las cosas siguieron un par de días más así pero como todo lo bueno tiene un final, para ambos casos, eso era ya predecible aunque no lo era para los ojos de sus amigos, ellos ni enterados estaban del distanciamiento de ambas parejas, ni mucho menos los acontecimientos que iban a suceder.

-Luka-chan necesito hablar contigo…- interrumpía la joven peliverde en los salones de 2do, sorprendiendo a la susodicha en cuestión, quien almorzaba con Meiko y Lily, esta última se quedó mirando a la menor de manera muy extraña, algo que no pasó desapercibido para los ojos de la castaña sin duda.

-Claro.- se paró de inmediato, saliendo con la joven del salón, con rumbo a la azotea.

-Hasta luego Lily-senpai, Meiko-senpai.- se despedía una extraña Gumi para los ojos de la castaña, que ya estaba intuyendo por donde iban las cosas.

Mientras la amante del sake seguía pendiente de la manera no tan disimulada de la rubia, quien no dejó de mirar al par marcharse con evidente ceño fruncido, le molestaba, pero que podía hacer ella estaba saliendo con la pequeña Hatsune.

-Deberías dejar de mirarlas así, Lily.- decía sería la castaña.- después de todo, tú tienes a Miku.- decía haciendo énfasis en el "tu".

-je….- fue lo único que salió de sus labios, mientras se paraba para ir al baño.

Meiko la vio alejarse, hizo un bufido y siguió comiendo, estaba preocupada, sabía que algo había en ese par o más dicho trío.

-Solo espero que Miku ni Luka, salgan lastimadas.- decía mirando su comida.-por favor…

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Era un día bastante bello, no muy cálido, o eso le pareció a la joven de cabellos rosas, quien estaba parada en la azotea esperando que su acompañante comience con lo que quería decirle, y así sucedió.

-Sabes Luka...-Decía mirando al cielo, respirando el aire, tratando de controlar sus nervios.- lo que voy a decirte, es algo que lleva varios días rondando mi mente.

-Gumi…- la chica en cuestión se giró mirándola a la cara.

-Me gustó todo este tiempo que estuvimos juntas, eres una gran chica, muy linda y buena persona, eres genial en mucho sentidos.- seguía con su monologo.- pero creo que ya no siento lo mismo, lo siento mucho, pero no quiero dañarte.

Para Luka fue como un balde de agua fría, aunque no tanto, ya estaba esperando algo así, pero eso no significa que no le dolía, estaba ahí en cuestión la chica que quería, poniéndole fin a su linda relación.

-De verdad lo siento mucho Luka-senpai.- dijo cerrando los ojos esperando algo, no sabía que pero esperaba la reacción de la chica, que solo llego en palabras.

Respiro hondo, cerró los ojos para calmarse, tenía que decir algo….el problema era qué? Que diría en estos momentos, tenía muchos pensamientos confusos en la cabeza, no quería ser grosera, después de todo Gumi era su amiga y ahora ex novia, no quería dañar la amistad que tenía con su grupo tampoco, qué debía hacer…era una gran pregunta. Por lo que al abrir sus ojos puso su mejor cara de póker, su mirada volvió a ser fría.

-Gumi…yo….-suspiró.- comprendo, no te preocupes, agradezco que hayas sido sincera conmigo.

Abrió sus ojos sorprendida, no era la reacción que esperaba, no era lo que quería, estaba más confusa ahora que la chica de ojos azules le había respondido.-podemos continuar siendo amigas, verdad?.- dijo un tanto esperanzada, el problema es que no sabía de qué tenía esa esperanza pero ahí estaba.

-Seguro… .- dijo mirándola directo a los ojos.- no te preocupes por eso, Gumi-chan

-Bien, debo volver a mi salón.- dijo la chica retirándose de la azotea, dejando ahí sola a la pelirosa.

-ja…. Vaya mentira.- dijo después de acostarse en el suelo, con el antebrazo cubriéndole el rostro mientras las lágrimas comenzaban a avanzar por sus mejillas. "todo estará bien luka-chan", fueron las palabras que resonaron en su cabeza, unas de aliento provenientes de la persona que más necesitaba en ese minuto.-Miku…

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….

Lily llegaba al salón junto con el maestro de matemáticas, quien la dejo pasar sin problemas.

-Hey Lily, viste a Luka? No vino a la clase.- decía en todo bajito la castaña

-No, no la vi, es extraño, conociéndola ella sería la primera en estar acá con lo responsable que es.- contestaba la rubia de igual forma que la primera.

Las clases de la tarde continuaron y Luka seguía sin dar luces de su paradero, hasta que Lily decidió conversar con su novia para saber si estaba enterada de algo, por parte de su querida amiga Gumi.

-hey miku~, haz visto a Luka?.- dijo la rubia mientras, abrazaba a la pequeña

Coloco su mano en el mentón, haciendo una pose pensativa.-Luka-chan? No, no la he visto.-decía mirando a la mayor. Busco con la mirada a la peliverde pero no estaba allí.- Gumi-chan tampoco está

-Es raro, bueno, te acompaño a tu club?.- preguntaba la rubia a la más bajita.

-claro…- decidió dejar que la chica la acompañara, aunque no podía sacar aquello de su mente, su mejor amiga no aparecía desde el almuerzo, le preocupaba, llegando a sentir algo extraño en su pecho.

Camino junto a la rubia que le iba comentando diversas cosas; cosas que ella no presto ni la más mínima atención, su mente divagaba por otro lugar…. Por otra persona, en sí.

-Bien "my lady" hemos llegado a su club de música.- decía Lily imitando a un caballero.- ahora si me disculpa debo retirarme tengo mucha tarea atrasada.- dijo poniendo una expresión total de cansancio y fastidio

-jaja eres todo un caso, sabes.- le dio un beso en su mejilla y se despidió de la rubia.- ten cuidado de regreso a casa.

-claro!.- decía Lily despidiéndose con la mano mientras se alejaba.

Miku suspiro y justo antes de abrir la puerta de la sala del club una idea se le cruzo por la mente.

-Quizás ella esté ahí.- se dirigió a toda prisa hacia la azotea, si algo le paso a luka seguro se refugió en ese lugar, y Miku lo intuía.- solo espera… voy por ti Luka-chan

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….

Lily caminó por los pasillos del instituto los cuales conducían al patio trasero, sabía que si iba allá encontraría lo que estaba buscando.

Se adentró al jardín trasero del instituto cerca de los árboles de cerezo pudo distinguir un bulto, uno el cual sabía muy bien de quien se trataba. Se acercó hasta quedarse frente de dicha persona, suspiró.

-Sabía que ibas a estar aquí.- la miraba de una manera muy cálida, después de todo era quien en realidad quería.- quieres que te lleve a casa?.

La persona levanto su cabeza para mirar a la rubia, quien estaba rondando en su mente y corazón hace un par de semanas, le sonrió con tristeza y asintió.

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….

Miku corría por los pasillos del 3er piso acercándose a las escaleras que la llevarían al lugar donde creía que estaba su mejor amiga. Subió las escaleras corriendo, deteniéndose justo en la puerta de acceso, necesitaba tomar un respiro. Abrió la puerta y la vio, la pelirosa estaba dormida, se veía tan bella ante los ojos de Miku, algo que no pudo evitar sonrojarse, aunque su hermoso y angelical rostro, tenía rastro de haber llorado pero no perdía su belleza, si no que la hacía aún más atractiva.

-Luka-chan….- escaba de sus labios sutilmente, se arrodillo al lado de la chica mientras acaricia su mejilla.- eeh? Porque estoy haciendo esto.- pensaba una sonrojada Hatsune.

-mmmm.- Luka se movía de su lugar abriendo lentamente sus ojos.-Miku?...Miku!.- la chica abrazó con fuerza a la más bajita, mientras lloraba otra vez

-Tranquila ya estoy aquí…- decía mientras le acariciaba la cabeza, con unas traicioneras quienes viajaban silenciosamente por sus mejillas, le dolía ver a su amiga así.

Luego de aquel acontecimiento la Megurine estuvo un par de días notoriamente decaída, pero poco a poco fue siendo apoyada por la chica de coletas. No paso mucho cuando las cosas cambiaron para la aguamarina.

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Se encontraba en su casa sola en su casa cuando el timbre de esta sonó, dejo el libro que estaba leyendo de lado y camino para abrir la puerta de la entrada, donde se encontró con su novia quien la visito de sorpresa.

-Ohh Lily-chan, pasa.- decía feliz miku dejando pasar a la chica.

-Con permiso.- cambio sus zapatos y fue directo al sofá. Mientras miku la miraba con una ceja alzada, a veces le molestaba la actitud despreocupada de su novia.

-Quieres que te traiga algo para beber, té tal vez?.- su semblante era distinto, algo que no pasó desapercibido para la rubia, quien la miró

-Miku, ven.- dijo haciendo una ademán para que se sentará con ella.- en realidad vine para conversar algo serio contigo.

La joven se sentó al lado de su senpai mientras esta se sobaba las cienes para tranquilizarse, debía ser muy cuidadosa de cómo decirle a la Hatsune lo que realmente pasaba, aunque no lo haría con toda la verdad.

-Miku, sabes, últimamente las cosas no han salido bien entre ambas.- suspiró, no sabía cómo referirse al tema.- siento que nos hemos alejado porque pasas mucho con Luka.

-Qué quieres decir, Lily? cómo que paso mucho con ella, es mi mejor amiga.- decía un tanto exaltada la pequeña.

-No lo sé, me molesta ya?.- decía ya fastidiada la rubia, no mentía estaba molesta con luka pero por diversas razones y una de ellas era su cercanía con Miku o eso creía ella.

-Lily no dejaré de estar con mi mejor amiga porque a ti te moleste, no seas celosa.- decía ya cansada la aguamarina, a sabiendas que tal vez era una excusa para sacar su frustración.

-Bien, haz lo que quieras, siempre estará ella primero que yo.- se paraba estrepitosamente dirigiéndose a la entrada.- sabes miku mejor dejemos esto hasta acá, siempre será ella…ja… se acabó miku, hemos terminado.- termino de decir mientras salía azotando la puerta.

-pero qué…..- no terminaba de entender lo que acababa de pasar, hace poco segundos las cosas estaban bien, pero de un minuto a otro habían terminado.

Fue a su cuarto mientras sus ojos se volvían cristalinos, le estaba faltando el aire, se lanzó a su cama y comenzó a llorar con fuerza, estaba aún atónita, sin embargo tenía muchas emociones guardadas en su interior así que termino llorando por todo, a parte de su término.

Se quedó un buen rato llorando, cuando escucho que alguien tocaba la ventana de habitación, eso le sorprendió, siendo que estaba en un segundo piso, se dirigió a ver de qué se trataba, y fue que la vio allí, apenas en cuclillas en una rama se encontraba la Megurine tocando su ventana, esta al verla le sonrió aunque su expresión cambio rápidamente al ver las lágrimas de miku rodas por sus mejillas, la chica abrió la ventana dejando entrar a la mayor, justo cuando iba a decir algo, la pelirosa arrojo la bolsa que traía en la cama y la abrazo con fuerza, dejando aún más sorprendida a Miku, aun así comprendió lo que la chica hacía, sin percatarse comenzó a llorar más fuerte, Luka le acariciaba la espalda para calmarla, ese día las unió aún más, ambas habían terminado sus relaciones.

Fin flashback…..

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-Eh? Que dices miku, jaja claro que soy tuya…- sonreía siguiéndole el juego la chica de ojos azules, no sabe por qué pero se sintió tan bien decir eso.

-Ne ne Luka-chan.-decía una enérgica Miku.- creo que tengo una idea

-Qué idea miku?.-decía la joven, mirándola de forma cariñosa.

-Mmmm no mejor olvídalo.- decía un poco ruborizada.- es un tanto vergonzoso.

-Mmmm, vamos miku, no me dejes con la duda, dime.- una divertida Megurine contestaba.

-Bien... qué tal si hacemos un acuerdo.- se acomodaba para ver a su amiga a los ojos.

-qué tipo de acuerdo? .- preguntaba curiosa la ojiazul.

-un…un acuerdo de compañía mutua.- decía un tanto apenada.- quiero que hagamos un acuerdo de pareja.

-¿Qué?.-

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Notas del autor:

Gracias a quienes se tomaron la molestia de leer la historia :D

saludos y si quieren opinar algo háganlo libremente~

Cambio & zura~!