Disclamer: Naruto no me pertenece, es propiedad de Masashi Kishimoto.
-¡Entonces! ¿Quién se apunta para ir esta noche al viejo bosque de Konoha?-Naruto, el payaso de la clase, subió un pie al escritorio del profesor Iruka-Los que no vayan, son unos cobardes.
Meneó la hoja en el aire, con su ya famoso dramatismo.
En la hoja sólo habían tres nombres escritos -por el momento, se recordó- el suyo, el de Rock Lee, y el de Hinata Hyuga, quien se había mostrado dudosa, pero había aceptado ir, luego de darle una mirada al organizador, con un escandaloso sonrojo en su piel de porcelana.
-Yo no pienso ir, que flojera-se quejó Shikamaru, limpiándose la oreja.
Choji levantó la mano, mientras con la otra se llenaba la boca de frituras.
-¿Y si ganamos?-masticó meticulosamente un bocado, y tras meditarlo, tragó-¿Qué hay de premio?
Una gotita de sudor descendió por su frente.
-¡Claro que hay un premio!- se le había escapado pensar en un premio. ¿No era suficiente el orgullo de ganarle al resto?-Habrá... ¡Habrá una dotación de papitas por dos semanas para quien gane!
Meditabundo, Choji metió una fritura a su boca, triturándola con cuidado.
-¿Dos semanas? Es muy poco.
Se le estaban acabando las ideas. El resto del grupo aún se veía dudoso, y eso no le hacía la más mínima gracia.
De no hacer todo más obvio, habría destrozado su labio inferior a mordidas.
-Jeje, ¿dije dos semanas?-no podría gastar lo que le daba su padre por tanto tiempo-¡Quise decir... Tres semanas!
-Hmm... Tres semanas me parece justo, es casi un mes, ¿no Shikamaru?
-Depende...-por más que quisiera, no pudo pasar por alto la mirada suplicante de Naruto, y con un suspiro derrotado, decidió rendirse-Si, es mucho.
Choji asintió, satisfecho.
-Entonces yo entro. ¿Vienes, Shikamaru?
La esperanzada mirada azul profundo de Naruto fija en él, de repente le pareció similar a la de un cachorrito triste. No, eso ya era demasiado.
Falló en disimular el ligero tic de fastidio en su ojo derecho.
-Supongo, no es como que tenga algo más que hacer-excepto dormir un rato al llegar a casa, que sinceramente, sonaba mucho más atractivo que ir a hacerse los tontos al bosque de noche. Si se hundía, no se hundiría sólo, declaró-¿Y tú, Ino?
La rubia miró un par de veces a su compañero de equipo.
-No-giró la cabeza, digna-No pienso ir.
-Yo tampoco.
Una voz habló del rincón más recóndito del salón (o al menos para Naruto así era).
La voz le pertenecía a Sasuke Uchiha, el mejor de la clase junto con Sakura Haruno, y su némesis jurada.
No le soportaba. Su hermano mayor siempre iba a recogerlo, y además de la cara de chupador de limón que siempre se traía, tenía aire de niño mimado.
Nada más verlo le desagradaba.
-¿Y a ti quien te preguntó, cola de gallina?-exclamó violento, y sin discreción, señaló el cabello del chico-¡Seguro te da miedo!
Sasuke hizo los ojos rendijas, deseando poder lanzar rayos de los ojos y fulminar al idiota ese.
-Los Uchiha no le temen a nada-dijo cruzando sus brazos, en un gesto de indignación-No pienso perder el tiempo hablando contigo.
Naruto dejó la hoja en el escritorio con fuerza, sacando el labio inferior en un berrinche furibundo, y frente a los ojos de su compañeros... Se puso a cacarear y hacer ruidos de ave.
Que le salían desastrosos, por cierto.
-Eres un gallina-puso las manos como si fueran alas de pájaro, e incluso caminó como una gallina de verdad-Te da miedo porque eres una gallina.
-¡Claro que no!-la cara se le puso roja del coraje. Sus padres siempre le habían dicho que no debía caer en provocaciones, y como todo un digno Uchiha, no pensaba hacerlo. Pero esos gestos y movimientos de Naruto eran tan tontos que eran molestos. No podía evitarlo, ¿como se atrevía a llamarlo cobarde?-Yo no le tengo miedo a nada.
Azotando los pies al caminar, se acercó al escritorio, y dándole una mirada retadora a Naruto, bajo la mirada atenta y curiosa de todos, escribió su nombre en la hoja, marcando el "Uchiha" con fuerza.
Hinata miró a Shino y Kiba.
-Kiba, Shino...-su voz apenas se elevaba de un susurro, y aunque para cualquiera sería difícil escucharla, sus compañeros de mesa ya estaban acostumbrados a su volumen de voz-¿Pueden acompañarme?
-Claro-aseguró Kiba, palmeando el bultito en su chamarra que era Akamaru. Recibió un ladrido agudo como respuesta-¡Naruto! Apúntanos a Akamaru y a mi en la lista. ¿Vienes, Shino?
El otro chico acomodó sus lentes, feliz de ser recordado, y asintió una vez como respuesta.
-¡Entonces yo también voy!-la mano que se elevó entre el resto era de Sakura, con una cinta roja recogiendo su cabello. Sus ojos verdes se fijaron en Sasuke por segundos, antes de que apartara la mirada. Ino la miró, incrédula-Anotame.
-Si Sasuke va, yo también voy-pidió la rubia.
Al Uchiha no podía importarle menos, él sólo quería acabar con toda aquella ridiculez y demostrar que los Uchiha, y en particular él, no le temían a nada.
-Creo que será divertido-comentó TenTen-Yo también voy, Naruto-en voz más baja, con sus ojos chocolate fijos en su compañero de mesa, preguntó-¿Y tu, Neji?
Sin hacer alguna demostración de haber escuchado, se cruzó de brazos.
-Ya veremos.
El organizador de todo el bullicio no se contuvo, dando un brinco de felicidad.
-¡Bien, con eso estamos todos!-las cosas le salieron mejor de lo que esperaba-Ahora sólo acordamos una hora para vernos, organizar los equipos y...
-Naruto.
-Ahora no-agitó su mano, restando importancia a lo que su interlocutor dijera-Estoy ocupado. Tengo que acabar con esto antes que el viejo Iruka llegue.
-Pues deberías hacerlo más rápido-alto. La voz, esa voz era demasiado conocida-Porque al viejo Iruka no le gusta que ocupen su asiento.
No quería voltear.
La voz de Iruka era tétrica, de ultratumba. Tenía esa dulzura y calma que ocultaba un grito rabioso lleno de ira. Iruka le daba casi tanto miedo como su mamá cuando se enojaba.
-¿P-Profesor Iruka?
-Naruto... ¡¿Qué te dije de subirte a mi escritorio, idiota?!
Si sobrevivía, lo que se encontrara en el bosque sería poca cosa.
Ya sé, estoy mal por publicar dos historias seguidas cuando ya tengo una activa.
Llevaba desde el catorce planeando esta y quería tener algo para Halloween/Día de muertos.
Esta historia va a tener dos capítulos, mañana público el que sigue, y listo. Aunque estoy pensando en hacerla de tres para no centrarme sólo en el equipo siete.
A ver que sale.
¡Espero que lo disfruten!
