***** LO QUE DURE LA ETERNIDAD *****
Prologo
En el castillo de Masen se avecina una horrible tragedia. Edward Masen padre, el señor del castillo, debe proteger su gran secreto frente al enemigo, como sus antepasados han hecho a lo largo de la historia. Una importante reliquia sagrada está en poder de su familia desde los tiempos de Jesucristo, y su deber es ocultarla para que no caiga en malas manos.
La fatalidad hace que Masen sea atacado cuando su hijo, junto con sus mejores hombres, se encuentran ausentes. Él no puede hacer más que esconder la reliquia en un lugar seguro y tratar de sobrevivir a la batalla luchando con todas sus fuerzas.
Cuando Edward, el hijo mayor de Edward Masen padre, llega a sus tierras, encuentra a su padre moribundo y le culpa de lo ocurrido por no haber estado allí para defenderlos. Con el alma rota, Edward maldice a su hijo a vagar eternamente por los muros del castillo hasta que consiga encontrar la reliquia en el lugar donde él la ha escondido, y su alma consiga descansar en paz.
Han pasado 400 años, Bella es una tasadora de arte que es llamada por el dueño del castillo de Masen para tasar algunas de sus más preciadas posesiones. No se lo piensa dos veces y emprende el viaje hacia tierras lejanas, y así escapa de la rutina de su aburrida vida.
Bella queda fascinada desde el primer momento por el castillo de Masen y por su gente. Ella es una mujer práctica e independiente que no cree en tonterías sobre fantasmas… y se ríe ante las "leyendas" absurdas que cuentan que en el castillo hay un fantasma. Pero a medida que su estancia en el castillo se alarga, va descubriendo que la leyenda es… real. Y más cuando se encuentra de cara con el fantasma de Edward...
