No puedes pensar ni sentir emociones, cuando eres una esclava

El mundo es injusto muchas veces. No puedes pensar ni sentir emociones, cuando eres una esclava

-Sakura!!

Sakura era una bellísima chica con los 15 años recién cumplidos. Ella vivía con su madre una mujer joven de unos 36 años, a la que violaron y de ahí salio Sakura. La madre no se pudo casar porque tener una hija fuera del matrimonio por muy violada que seas se ve mal y te consideran una puta en todas sus letras, por eso la madre de Sakura, Valeria, odiaba a su hija por joderle la vida como decía ella.

-¿que quieres mama?

-te he dicho que volvieras pronto de comprar ¿Dónde has estado?

-en ningún sitio solo que había mucha gente en la tienda

-bueno da igual, total, estaba mejor sin ti. Anda ve a preparar la cena

-si

Vivian en una pequeña casa en los barrios bajos de la ciudad, donde solo había prostitutas y alcohólicos.

Después de la cena Valeria siempre iba a un bar a tomar algo, los momentos en que su madre se iba eran los momentos que mas apreciaba, cuando su madre no estaba para amargarla, cuando estaba sola y tranquila.

Valeria llego al bar y pidió su bebida de cada noche, a eso llega el dueño del local, un amigo que izo al llegar a los barrios bajos

-que como as estado?

-tu que crees, mal como siempre

-bueno, bebe y alégrate la noche Valeria

-tengo demasiadas penas para solo un vaso, Malcof

-tranquila mujer, un día se Irán esos problemas que tienes

-no los tendría si Sakura no hubiera nacido

-pobre niña no tiene la culpa de que te violaran

-y que, toda mi familia y amigos me dejo tirada solo por estar preñada, solo me dieron 500 francos y un "arréglatelas como puedas"

-hombre la niña es como tu esclava, no te puedes quejar

-hombre ya que la he parido la tenia que utilizar, no se iba a quedar ahí

Se quedaron en silencio. Valeria observo las nuevas rameras del local y los hombres que se les caía la baba por ellas. El local era un bar con una plataforma en el centro y la barra al lado derecho de la plataforma, donde las chicas bailaban y cantaban para los que entraban allí dentro. Y si algún cliente las quería solo tenia que pagar un poco más y llevársela arriba para hacer con ella lo que quisiese.

Valeria era la única mujer del bar que no trabajaba aunque muchos hombres le pidieron sus servicios en más de una ocasión y para conseguir dinero los aceptaba

La primera vez que lo hizo en ese bar con un cliente, ya que Malcof le ofreció una habitación para que la utilizara cuando quisiera siempre y cuando le diera la una cuarta parte del dinero. Se quedo parada del anonimato del bar. Si querías contratar a una chica pagabas y te daban la llave de la habitación y una mascara para que no seas reconocido.

Cuando acabas entregas las llaves y la mascara y te largas como si no hubiera pasado nada. Normal que este bar sea e predilecto de los ricachones que quieren hacer creer que son unos santos y que matarían por sus esposas cuando por la noche se iban a revolcarse con rameras para olvidarlo todo y disfrutar del deseo carnal

-hay mucha mas gente que antes

-si se ve que los clientes han dicho maravillas de mi bar y ahora viene todos los hombres ya sean ricos o pobres

A Valeria le daban asco los hombres que dicen que si su mujer lo engaña la mata enfrente de todos, pero cuando eran ellos las mujeres tenían que callarse para no enfurecer a sus maridos.

"pobrecitas" pensaba Valeria "aunque pensándolo bien por muy cornudas que fueran no Vivian en la miseria trabajando de puta para poder comer.

Meditando eso Valeria se acabo el vaso y se dispuso a pagar cuando Malcof la detuvo.

-sabes he estado pensando en algo que te gustara

-si me vuelves a proponer que trabaje de puta permanentemente pierdes el tiempo

-no me refería a ti, mas bien a tu querida hija

-Sakura?

-claro que otra hija tienes

- ja, ja, ja

-por que no Valeria, ganaríamos dinero y encima te la quitarías del medio

-…

Valeria lo medito unos segundos y por fin dio la respuesta a Malcof. No sentía pena por su hija y menos si encima ganaría dinero, la verdad se la habría entregado gratis si se lo hubiera dicho, pero ya que lo mencionaba lo aceptaría encantada.

-trato echo no?

-evidentemente, mañana te la traeré sobre las nueve, va bien?

-perfecto, te esperare a esa hora, y para cerrar el trato que te parece si te invito a un trago

-sabes Malcof, este negocio me encanta

-te dije que te gustaría

Valeria llego a casa a las 4 de la madrugada y vio que su hija no había perdido el tiempo y la casa estaba limpia.

"seguramente eso extrañare de la cría" pensaba Valeria mientras se quitaba la ropa i se metía en la cama.

Sakura como siempre se levanto mucho antes que su madre, hacia el desayuno y cuando había acabado se ponía a estudiar, a diferencia de su madre Sakura era una chica responsable y educada, con muchas ganas de aprender, estudiaba de todo lo básico: matemáticas, lengua e ingles, lo principal.

-Sakura!! Tráeme el desayuno

-voy!!-

-no chilles estupida

Sakura escondió los libros detrás del lavabo porque si su madre los encontraba los quemaba enfrente suyo.

-toma

-Sakura, tengo que contarte algo que te afecta directamente-hablo seria

-¿que cosa?

-a partir de hoy trabajaras en el bar de Malcof

Se le congelo la sangre, solamente había ido una vez a ese bar y no le gusto para nada ese sitio. Prostitutas por todos los lados y hombres persiguiéndolas. Fue asqueroso y se juro que nunca volvería a ese sitio pero no podría cumplir el juramento.

-a ese bar de mala muerte

-sea o no sea de mala muerte allí trabajaras y punto

-pero porque?!

-porque quiero librarme de ti y encima ganare dinero, así que prepara las cosas que a las nueve tenemos que estar allí

-pero…

-que te calles, ve a preparar tus cosas

-si

No podía creerlo su madre la había vendido, no pensaba que la odiase tanto para hacer eso, pero así era, Sakura preparo las maletas para irse de su casa al bar.

Cuando ya eran las nueve su madre la llevo al local, solo entrar ya vio los hombres ricos esperando para ver a quien se follaban esa noche

-Valeria, te esperaba – saludo Malcof

-aquí tienes a sakura

-perfecto

Se dirigió a Sakura con una sonrisa maliciosa

-sabes Sakura ya tienes un cliente para esta noche

A Sakura se le helo la sangre, esa misma noche perderia todo, su dignidad y virginidad y pasaría a ser una puta cualquiera, como su madre, mejor dicho peor que su madre. Su madre trabajaba cuando lo quería ella, pero ella trabajaría todas las noches.

Era terrible

-entonces te la doy, pero ya sabes no quiero que se quede preñada

Se le ilumino un poco el rostro al saber que aunque fuera poco su madre se preocupara de que ella no le pasara nada.

-tranquila no pasara nada

-mas vale no quiero que pare de trabajar

El rostro se le apago de golpe, solo le interesaba que ganara dinero todas las noches

-descuida

-bueno dicho todo me voy

-adiós Valeria

-adiós, y tu trabaja bien y nada de nos, entendido

-si

Valeria se fue. Sakura fue conducida a la habitación en la que viviría a partir de ahora.

Era una habitación de cuatro literas y un gran armario en la esquina.

Las paredes estaban pintadas de un azul celeste. Las sabanas eran blancas con flores rosas, si no supiera de que iba a trabajar habría aceptado gustosa vivir allí.

-Reena ven, tienes una nueva compañera

Por la puerta apareció una chica de pelo corto y rubio con unos hermosos ojos azules, si no supiera que era puta pensaría que estaba enfrente de una modelo.

-hola soy Reena si necesitas algo no dudes en preguntar

-y-yo soy Sakura

-por tus nervios debes de ser virgen ¿no?

-s-si

-¿bueno, cuando empiezas?

-el señor Malcof dijo que esta noche

-bueno tranquilízate, de momento coloca tus cosas e intenta relajarte OK?

-si

Reena se marcho a trabajar. Estaba inquieta esa misma noche perdería su dignidad y libertad al mismo tiempo

Malcof apareció por la puerta

-vamos Sakura te llevare a la habitación donde te espera el cliente

-si señor

-escucha como eres virgen te daré un consejo, déjate llevar, seguramente jugara con tu cuerpo y luego te follara, así que solo déjate llevar, entendiste?

-si señor

-bien ya llegamos

Entraron en una habitación normal, con una simple cama matrimonial, una mesita de noche con una lámpara y un pequeño cuarto de baño en el fondo

-vaya Malcof, espero que hayas traído lo que te pedí

-claro amigo, aquí la tienes- Malcof empujo a Sakura para adelante para que la viera- ha llegado hoy y te aseguro que es virgen

-bien, me encantan las vírgenes, son mas higiénicas

-si pero tardaremos bastante en tener otra así que disfrútala

-tenlo por seguro amigo

-bueno me voy- Malcof se alejaba de ellos y se disponía a salir- pasarlo bien- salio

Sakura se puso más nerviosa de lo que estaba. Estaba encerrada en la habitación con un hombre que no escucharía sus suplicas de que parase.

Estaba sola.