Fanfic

Don't let me go!

Capitulo 1

Aceptación

Una luz brillante se colaba de entre las cortinas, el cantar de los pajarillos se hacia mas fuerte, ya podía escuchar movimiento en su casa, todos estaban arriba excepto ella. Abrió los ojos con pesadez, parpadeando un par de veces acostumbrándose a la luz de su habitación, giro desganada a su reloj, eran un poco mas de las 11 de la mañana, se cubrió hasta la cabeza intentando olvidar todo pero le era imposible. Otra vez aquellos recuerdos le atormentaban ¿Por qué? Ya no quería pensar en nada, en nadie, en el… En el. No, ya era suficiente, no quería seguir en ese cuento de nunca acabar, pasara lo que pasara, actuara como actuara jamás cambiara el resultado, era un maldito circulo vicioso, tenia que terminarse de alguna forma.

Se sentó en la orilla de su cama con sus ojos fijos en el suelo, su mirada era vacía, triste, inconscientemente se mordió el labio pensando en todo lo que estaba sucediendo en la época antigua y ella ahí huyéndole a todo y todos pero… ¿Qué podía hacer? No podía resistir tenerla tan cerca, tenerlos a ambos cerca, ahora que lo pensaba no era necesaria su presencia. Una lagrima rodo por su mejilla…. Ya no volvería a verlos, a verle…. Si hubiera sabido que ese seria el último día que miraría a sus amigos se abría despedido de ellos como corresponde y no corriendo como una niña malcriada sin decir nada.

Limpio aquella lagrima con su mano y decidió levantarse, hoy no asistiría a clases, era fin de semana por lo que no se pondría su uniforme, abrió su armario buscando algo nuevo, algo diferente. Tomo una blusa color morado de tirantes que marcaba muy bien su esbelta figura y una falda color negro. Generalmente no usaba colores "deprimentes" pero teniendo en cuenta su sentir no podía escoger mejores prendas.

Tomo una ducha rápida, si algo le gustaba de su hogar era la privacidad sin creer que alguien la espiara, bañarse a la intemperie no era algo que le agradara mucho de la época antigua… Ahí estaba de nuevo, retrocediendo 500 años, pensando en ese estilo de vida que no le correspondía, era cierto… Ella no pertenecía ahí, debía enfocarse ahora en su presente y aceptar que todo volvería a hacer como fue antes. Tenia que enfocarse en sus estudios y nada más, como toda chica normal de 15 años.

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Bajo lentamente las escaleras, su madre se detuvo en seco y la vio con preocupación no habían hablado desde anoche, no le dirigió la palabra a nadie solo se encerró en su habitación sin mas.

-Buenos días hija- le dijo cálidamente y con una sonrisa, con eso esperaba que ella entendiera que todo estaba bien y no había ningún problema.

-Buenos días…- le miro unos instantes y se dirigió a la cocina ignorando a su madre.

Ahora no sabia que le ocurría a su propia hija pero de algo si estaba segura, tenia que ser obra de ese hanyou que intervino en sus vidas hace meses. Volvió a su labor de ama de casa, mas tarde le hablaría o esperaría que ella misma le buscara para decirle que ocurría, que le estaba haciendo mal.

Se preparo algo rápido de desayuno, todos ya estaban en lo suyo por lo que no había nadie en la cocina, tomo un vaso de jugo con un bol de arroz y subió nuevamente a su habitación, no le apetecía ver a nadie ni siquiera a su familia, la atormentarían con miles de preguntas que no estaba dispuesta a contestar, no estaba lista… Quizás más tarde, al fin y al cabo debía verles para decirles lo que ocurriría con ella y sobre Inu… No ya no lo nombraría eso le hacia mas daño que una herida física, sonrió a desganas debía darse valor y saber que de ahora en adelante en ese pozo ya no había nada para ella.

-Esto…- bajo la mirada –Esto ya se acabo…- dejo su improvisado desayuno en el escritorio y se dispuso a probar bocado, pero esas lagrimas saladas no dejaban de salir por sus ojos, le producía un profundo hueco en el estomago saber que todo estaba terminando y no era por ellos sino por ella, era mas de lo que podía soportar, verlos juntos, reír juntos y mientras ¿ella que? Los vería desde la primera fila… No ya no, no era una sádica masoquista que sufriría porque si, tenía limites y los suyos acababan de decir hasta aquí.

*-*-*-*-*CONTINUARA*-*-*-*-*