¡Hola, hola caracolas!
Estamos que nos superamos hoy, madre mía. Decir que esto es un reto de la página Retos Fanfiction que podréis encontrar en mi comunidad, respectivamente el de Drabble Social. Agradecer a LadyBlackA7X por haberme dado el personaje con el que hacer el drabble y decirle feliz cumpleaños otra vez porque hacerle spam es divertido xD
Adoro a Rumpelstiltskin y dado que tenía que ser algo de menos de 500 palabras he decidido hacer algo un poco más reflexivo sobre lo que piensa Rumpel, la verdad es que creo que ha quedado un poco random, pero espero que lo disfrutéis de todas formas.
Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, yo solo intento ser popular y hacer historias con ellos.
Reflexiones
La magia siempre conlleva un precio. Tantas veces lo había recitado, tantas veces lo había advertido, pero todos parecían ajenos a lo que podían perder. No les importaba, venderían hasta su alma de ser necesario, siempre y cuando estuviese dispuesto a ayudarles claro. Durante años le había parecido divertido, los tratos eran una forma de sentirse superior, de ver hasta qué punto podía extorsionar a la gente que necesitaba ayuda.
El tiempo terminó por dejarle claro que nada era lo que parecía, la pérdida de su hijo fue el primer paso hacia la desesperación. Todo lo que había hecho, lo había hecho por él y ahora ya no estaba, no tenía razón para seguir jugando con los mortales. La culpa carcomiéndole, el poder lo había cegado y lo seguiría haciendo durante años.
Tardó demasiado tiempo en trazar un plan, en generar una maldición capaz de llevarle al mundo en el que se encontraba su hijo. Aquel lugar sin magia en el que estaría desprotegido, pero el cual merecía la pena. Necesitaba encontrarlo, necesitaba pedirle perdón y sobre todo arreglar los errores que había cometido.
El amor cruzo su camino después de demasiado tiempo, pero nuevamente demostró que el poder es demasiado fuerte, que este siempre te lleva a hacer las peores cosas. Nunca creyó que tuviese la fuerza de voluntad para arreglarlo, tanto tiempo en el que pensó que estaba muerta, pero no.
Demasiadas cosas ocurrieron, demasiadas como para relatarlas todas, pero por un segundo pensó que podía limpiar su consciencia. Era un villano, pero había muerto como un héroe, los había salvado a todos y era lo que importaba, pero tuvo que resurgir. Había matado a su hijo, lo había hecho y no había forma de volver atrás, a pesar de sus desesperados intentos por salvarle la vida, nada podía salvarlo porque la magia siempre conlleva un precio.
Debería haberle hecho caso, ella tenía razón, la venganza no le llevaría a ningún sitio, pero no tenía otra forma de proceder. No había nada que pudiese hacer, era lo último que haría y lo que le condenaría a un nuevo comienzo lleno de mentiras. Simplemente tenía que vengarlo y era lo que había hecho.
Nadie puede entender como Rumpelstiltskin el precio de la magia, del poder. Nadie puede entender cómo te consume por dentro, como te ciega y hace que tomes las decisiones equivocadas. Nadie puede entender hasta qué punto es difícil luchar contra ello. Nadie lo sabe, pero no importa porque a pesar de su secreto ha prometido ser una mejor persona y con un poco de suerte conseguirá superar todas las barreras.
La magia conlleva un precio, la cuestión es si estás dispuesto a pagarlo.