Otro fic, el yuri necesita más amor, pero no soy yo la más indicada para hacerlo -me sale horrible- las que quieren la tira del fic anterior se las mandaré cuando llegue a mi casa -en el colegio- disfruten! :D
Pareja: AlfredxArthur y EmilyxAlice -Fem!Estados UnidosxFem!Inglaterra y Estados UnidosxInglaterra.
Disclaimer: Hetalia y todos los personajes que lo conforman no me pertenecen. El respectivo dueño es Himaruya Hidekaz.
Advertencia: No mucho D:
Una hermanita tierna y común al estar en una casa ajena con su hermano mayor mientras éste le confesaba algo tendría que haber actuado con más normalidad, sorprenderse incluso o dar un pequeño grito de exclamación se vería más razonable. Pero Emily Jones era diferente, ella estaba hecha un verdadero torbellino.
Dando patadas con la cara roja, rabia y más rabia: celos. Mataría a su hermano por posar sus cuatro ojos en su más hermosa joya.
–¿Em-Emily? ¿qué pasa? ¡en este momento deberías estar consolándome o algo así! ¡oh por dios, esa última patada samurai casi me llega!–gritaba el americano esquivando con cierta elegancia las patadas y combos.
Después de todo, ambos hermanos defendiéndose eran unas bestias... pero Alfred apretó la muñeca de su hermana colándola sobre su espalda, la chica gruñó, Jones la sujetó más pero se alejó un poco con miedo.
–¡Suéltame Jones, ahora mismo, hablo en serio!–
–¡Si lo hago me arañarás la cara malvada hermana!–susurró manteniendo a la agresiva mujer al margen.
–¡Pero tú... tú no me la puedes quitar, ella es mía, mi princesa! ¡yo me tendría que casar con ella en un futuro, yo sería la que ella quisiera y tú llegas y...!–
El chico miró a su hermana impactado, extrañado con un deje de duda ¿de que demonios están hablando? la chica aprovechó la condición del de lentes para tirar una patada que le liberara.
–¡Alice es mía, mía, he luchado mucho porque lo sea y ahora llegas tú y lo arruinas!–la chica iba a seguir con su batalla a muerte.
El americano volvió a detenerla de manera hábil y la tomó de los hombros. –¡Lo has entendido todo mal Emy, dije que me gustaba una "persona" de esta casa! ¡no dije que era Alice!—suspiró agotado.
La mujer miró perpleja a su hermano, quien inflaba las mejillas, algo le dijo que decía la verdad, pero si no le gustaba Alice ¿quién? ¿acaso le gustaba la madre de los Kirkland?
¿Quizás tenía el mal de la lagartija? mal de la lagartija: la madre está más rica que la hija.
El americano suspiró algo abochornado desviando la mirada, miró a su hermana a los ojos, se le notaba en éstos que no le creía del todo, siempre le quiso decir y ese día lo haría, pero la muchacha se tiró sobre él cuando trató de comentárselo.
–Me gusta Arthur ¡él me gusta, me encanta, quiero besarlo y llevarlo a la cama! ¿feliz? ¡soy gay Emily, por él lo soy!–
Y la chica quedó helada, pero de una manera u otra la noticia la alivió, esa inglesa volvía a ser toda suya, el tema de la homosexualidad de su hermano luego la superaría, después de todo ella era lesbiana.
Se abrazaron como los homosexuales hermanos que eran y se rieron de eso... y cuando voltearon, dos ojos verdes los miraban, un guapo joven inglés y una elegante mujer inglesa de pelo largo tomado en cachos.
Estaban ambos sonrojados, lo habían escuchado todo, los Jones rieron de manera boba, ahora... les tocaba explicarles a ellos, lo malo o lo bueno, es que esta vez no era un malentendido.
N.A: Insisto que nadie escribe yuri, yo sí lo haré, un poco... y me imagino que Emily es una fiera cuando le quitan lo que considera "suyo", en fin, espero les haya gustado :3.