FT & sus personajes son propiedad de Hiro Mashima.

Holis~, ya se que dirán que como chingo con otra historia, peeeeeeeeeerooo déjenme informarles que está historia no será tan larga, tendrá pocos capítulos, pero en fin, solo diré que esta historia era toda absolutamente de Gray's PoV, y trate de hacer lo mejor que puede en cuanto al "PoV" but fracase, soy un frak-zoh (?)

Así que mejor edite todos los capítulos a una narrativa "normal" (?), que espero sea de su agradeizhoon (?)

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¿Saben?, las personas me preguntaran si yo podría volver a enamorarme…sin duda diría que sí. ¿La razón?, no lo sé…simplemente sé que llego. Cuando todos comenzaron a sentir lastima por mí, no necesitaba que sintieran eso por mí, simplemente quería apoyo de las personas que creí que eran mis amigos. Incluso mi novia de toda la vida se alejó de mí. Ahora si me sentía por completo vacío…solo contaba con la ayuda de mi padre, mi madre murió hace años y ahora solo éramos él y yo. ¿A qué viene el comentario de al principio?, simplemente creí que sería imposible volver a enamorarme o sentir ese afecto, después de que Nano me botara me volví a ser como era antes, frío y un vil resentido con la vida. Pero después de la nada llego ella, incluso cuando yo estaba con Nano. Ella ya había llegado…No soy de los que suelen hablar mucho, pero comenzare a contar lo sucedido…

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Capítulo 1.- Celeste.

Hoy era un día como cualquier otro. Se encontraba en el comedor, desayunando junto a su padre y sus hermanos. La misma rutina diaria, suspiro mientras llevaba lo último que quedaba de su pan tostado a la boca y lo trago, tomo su jugo de naranja y por último, y como siempre fue el primero en levantarse del comedor. Dejo sus platos en el fregadero y miro al cielo por la pequeña ventana que había. Chasqueo la lengua en señal de molestia, el día estaba nublado. No era que le molestara la lluvia, pero odiaba cargar con paraguas. Pues a pesar de ir en coche a la universidad, tenía que cargar con uno ya que está era muy amplia y no todos los pasillos contaban con techo.

— ¿Ya te vas? —le pregunto su padre. Silver era un hombre atractivamente mayor y muy bien conservado para su edad. Cuestiono a su hijo mientras bajaba un poco el periódico que leía y lo observaba con una ceja alzada.

—Aún es muy temprano. —Le respondió. — Además no creo que Nano aún este lista, así que me quedaré a hacer algo de tiempo aquí.

—Yo me voy ya. —Se hizo presente la voz de Ultear. La mayor de los tres jóvenes que vivían con Silver, Ultear era una atractiva joven alta, de cuerpo voluptuoso y de piel blanca que hacía contraste con su hermoso y largo cabello negro. Gray la había mirado un tanto extraño desde su lugar. ¿Se iría tan temprano?, se sabía que ella siempre era demasiado puntual en cuanto a los estudios, pero esa vez era demasiado temprano como para que ella se fuese antes, algo poco usual. —Tenemos una junta importante, y como representante del consejo estudiantil debo estar junto al presidente del consejo para ver los últimos preparativos.

Gray dejo de prestar algo de atención cuando menciono aquello último y aparto su mirada de ella en cuanto supo que Ultear posaría su mirada en él.

— ¿Y tú Lyon? —pregunto Silver al observa al joven albino sentado de manera perezosa en la silla.

—Yo en un momento me iré, tengo práctica de Hockey a primera hora. —Lyon miró su reloj y abrió tanto como pudo sus ojos rasgados. —Creo que ya me voy o no llegare, nos vemos más tarde. —Y sin más se marchó lo más pronto que sus pies le permitieron.

Dejando solo a Silver y a Gray.

Ambos se quedaron en silencio después de ver a Lyon irse. Gray se recargo en la barra que había en el comedor y su pierna comenzó a moverse por sí sola con un ligero tic. No era que no se llevará bien con su padre, al contrario ambos se llevaban de maravilla, pero no eran de tener muy fija una conversación. Estaba por irse a la sala por su cosas, pues Nano no tardaría en llamarle, bueno eso hasta que la voz de su padre le hizo detenerse.

—Gray. —el joven hizo una señal de que continuara hablando. —Hoy llegará un socio muy importante. —Gray suspiro levemente, ya sabía por dónde va el asunto. Seguramente querría que fuese como representante para ver sus capacidades de trabajar en el negocio familiar. Hace apenas unas semanas atrás le había pedido lo mismo a Lyon, así que Gray supuso que haría lo mismo con él para ver el potencial de ambos. —No, no tampoco es lo que crees…él además de ser mi socio, es un viejo amigo…se podría decir que mi mejor amigo de casi toda la vida. —Gray extrañado alzo una ceja, pues aquello ya era algo raro. Silver nunca hablaba de que tuviera un mejor amigo, no que él recordara…Solo sabía y desde que tenía memoria que hablaba con un tal sujeto llamado Keith, pero de ahí en fuera no le conocía a nadie más a quien llamará "amigo". —La cosa es que viene con sus dos hijos, y está noche les daré la bienvenida con una cena aquí en la casa, pues aparte de venir solo por negocio se quedará permanentemente a vivir en la ciudad, y quiero que los tres, tanto Ultear como Lyon, y tú estén presentes, se que a lo mejor tendrás planes con Nano, pero solo les quiero pedir de favor eso para que los hijos de mi socio y amigo, se sientan un poco más en confianza.

— ¿Ultear y Lyon ya sabían?

—Se los mencione ayer. —definitivamente no estaba enterado ya que tampoco estaba en casa. Había salido al cine con Nano a ver una película que la chica había estado esperando a que saliera, la verdad el chico no recordaba ni el nombre de aquel filme. Pareció meditarlo por unos pocos segundos y suspiro—. Está bien, me quedaré a cenar hoy.

—Puedes invitar a Nano si lo deseas, ya sabes que ella siempre es bien recibida.

—No creo que quiera ya que es algo familiar y tal vez ella ya tenga planes. —Le respondió con simpleza.

— ¡Pero ella es de la familia! —dijo de manera enérgica Silver. Y de cierto modo era verdad, su padre veía a Nano ya como su esposa o algo por el estilo. Y bueno con cinco años de noviazgo ¿Quién no lo pensaría?, eso sin contar desde cuando eran más jovenes.

—Va, va yo le comento, no te exasperes tanto. —trato de sonar lo menos molesto y la verdad no lo estaba pero muchas veces su forma de hablar o actuar mostraba lo contrario. Y ahora que lo recordaba, algo de lo que platico con Nastu ayer vino a su mente y sus ojos casi se salían de su lugar desconcertando un tanto a Silver.

Sin sonar grosero le dijo a este que ya debía marcharse por que recordó que tenía algo que hacer con Natsu. Tomo sus cosas y salió de la casa. Entro a su coche, lo encendió y espero a que calentará un poco, pues con el reciente invierno el motor de este muy seguramente se encontraba casi congelado. Una vez que el coche se calentó lo suficiente arranco, y en el primer alto encendió la radio y conecto su teléfono a un cable AUX que ya estaba conectado al estéreo, pues así podría ir escuchando su música favorita sin necesidad de ir moviéndole a cada estación de radio. Busco una canción hasta que salió "wonderwall" de oasis. Era una de sus canciones favoritas. Cuando menos se había dado cuenta ya estaba afuera de la casa de Nano, así que solo se dedicó a esperar a que saliera. Se recargo en el asiento y justo cuando cerró sus ojos escucho un portazo y como la música era apagada. Se reincorporó y observo con algo de confusión que Nano ya se encontraba en el coche.

— ¿Paso algo? —le cuestiono. Era raro verla de mal humor, ya que siempre se mostraba sonriente y feliz.

—Nada en especial…—respondió de manera quedada. No quiso preguntarle nada, nunca fue bueno con las mujeres, y con Nano nunca tuvo algún problema, y si lo había lo olvidaban y ya. La joven de cabellos cortos se acercó a Gray para depositarle un beso corto en los labios y le sonrió, mientras que al mismo tiempo él le devolvía la sonrisa. —Buenos días, perdón, olvide saludarte.

—No hay problema. —le sonrió y arranco el coche de nuevo. Sabía que a Nano no le agradaba mucho el estilo de música que él escuchaba, así que dejo la radio apagada.

—Por cierto, ayer que hablábamos por teléfono me dijiste que hoy llegaba un amigo de Natsu y tuyo de la infancia ¿verdad? —pregunto repentinamente. Gray solo respondió con un "aja" y un leve asentimiento.

Ella soltó una risilla.

— ¿Qué pasa? —cuestiono curioso y con una ceja alzada. ¿Qué le causaba tanta gracia?

—Nada, es solo que estoy un poco celosa. — Gray la miro algo extrañado después de aquel comentario, ¿celosa?, no tendría por qué estarlo, ya que ella sabía de sobra qué el joven Fullbuster solo tenía ojos para ella y nadie más. —Es que, ayer estabas tan emocionado por la llegada de tu amigo, me siento celosa de que te pongas muy feliz de verlo. —dijo entre risas. Por una parte sabía que ella estaba feliz por él, pues era muy raro que el Fullbuster se mostrará muy emocionado por alguna razón.

—No deberías de estarlo, sabes que solo tengo ojos para ti guapa. —respondió de manera seria.

—Lo sé. —le sonrió. — ¡Por cierto!, ¿Qué te pareció la película qué vimos? —freno en otro alto más y apretó levemente el volante. ¿Por qué tan de repente preguntaba por aquello?, obviamente no le iba a decir que la película no me gusto ya que ni el nombre de está recordaba, y tampoco quería que se sintiera ofendida o desilusionada. La verdad había mejores películas que esa, pero como ella esperaba con ansias aquella película decidí acompañarle.

—Pues, estuvo bien. —respondió con simpleza. En cuestión de pocos minutos ya habían llegado al estacionamiento de la universidad. Gray esperaba alguna respuesta por parte de Nano mientras se disponía a buscar algún estacionamiento solo hasta que lo encontró y aparco el coche.

—Si la película no te gusto, ¿Para que ibas conmigo a verla? —y aquí venía lo que trato de evitar desde el principio. —Sabes que te he dicho innumerables veces que si no quieres hacer algo conmigo bien me lo puedes decir. —respondió de manera golpeada mientras tomaba su bolso.

—Nano, no quiero discutir contigo por una película. —respondió el chico lo más sereno que pudo y claro que pudo ver de reojo la expresión de indignación en ella cuando se giró para tomar su mochila y el maletín con su laptop.

Ella inhalo y luego exhalo.

—Bien, tampoco quiero discutir, pero últimamente cada cosa que te propongo que hagamos juntos no te parece o simplemente respondes "estuvo bien, no estaba mal". —volvió a responder con su tono de voz lleno de indignación. Gray sin duda alguna la ama y la quiere demasiado, pero le desagradaba que para todo se indignara o que a lo que él respondía de sus preguntas todo le pareciera mal. La vió bajarse del coche y él hizo lo mismo. —No me sigas, hoy me quiero ir sola.

—Si eso quieres…—le respondió encogiéndose de hombros mientras la miraba alejarse. — ¿Qué carajos le pasa?, últimamente la que está rara es ella, y no yo.

Le restó importancia al asunto y siguió con su camino. Y la mera verdad no pudo evitar darle vuelta al asunto con Nano, por un momento sonó muy convencida cuando le dijo que estaba celosa del amigo suyo y de Natsu. Eso era raro, ella nunca se mostraba celosa. A lo lejos vislumbro su aula, así que sin pensarlo tanto apresuro el paso para llegar lo más pronto posible. Saludaba algunos conocidos que se le cruzaban y cuando dio vuelta en una esquina para llegar a su salón de clases, su vista comenzó a nublarse, y noto que la distancia para llegar a su salón había aumentado más de lo que recordaba, comenzó a caminar lentamente hasta sentirse desvanecer poco a poco y una fuerte punzada en su cabeza ocasionando que perdiera por completo el equilibrio y ocasionando que se sujetara de la pared. Sintió las miradas curiosas sobre si, maldijo mentalmente aquello ya que odiaba que se le quedaran viendo más de lo normal. Nunca le había pasado ese tipo de cosas, pensó en que tal vez era por no dormir, ya que últimamente se desvelaba mucho haciendo proyectos. Llevo una mano al puente de su nariz y lo froto un poco, pensando en que con eso el dolor se iría a pasar un poco.

Eso hasta que escucho a alguien llamarle.

— ¿Se encuentra bien? —Cuestiono una voz femenina. Cuando se dio cuenta, había unos brazos más pequeños que los suyos rodeándole. Una vez que la vista se le aclaro, pudo notar con más claridad un cabello azul celeste junto a unos ojos de un azul más oscuro y profundo mirándole de manera curiosa y ¿preocupados? Ante aquello el chico se reincorporó y solo asintió a la pregunta de aquella joven. En todos los semestres que llevaba estudiando nunca la había visto o no la había notado. —Me alegra que se encuentre bien. —dijo de manera aliviada. Luego la miró agacharse mientras acercaba una caja a ella en la cual habían cosas que honestamente Gray no puso atención, o su cerebro no le dejaba pensar, solo alcanzó a reconocer un micrófono y unos enorme audífonos junto a una cámara. La joven echo a la caja unos cables que se habían tirado al suelo e instintivamente Gray se agacho y sujeto la caja, tomando por sorpresa a aquella chica que al instante se levantó y le sonrió al momento en que le entregaba su caja.

—Gracias por lo de hace rato… ¿ahmm? —espero a que ella dijera su nombre, aunque no parecía captarlo hasta segundos después.

— ¡Juvia, Juvia Lockser! —contestó de manera muy rápida, pero logro entenderla. ¿Juvia?, nunca había escuchado ese nombre por aquí. Bueno, solo le había ayudado un poco al preguntarle si se encontraba bien. —Lo siento, pero Juvia debe irse, va tarde en su primer día. —le dijo de manera cortes mientras se iba yendo, aunque le había parecido extraña la forma de referirse a ella en tercera persona.

Gray solo se giró un poco para ver cómo se iba. Y solo había logrado alcanzar a ver como su cabello celeste y ondulado se movía de un lado a otro mientras corría y tropezaba de manera torpe. Sonrió para sus adentros, definitivamente esa chica era algo rara. Metió sus manos a los bolsillos de su chamarra y siguió con su paso para entrar al salón de clases.

Justo cuando había entrado, el Fullbuster fue recibido por una bola de papel impactándose en su cara, cortesía de un joven de alborotados y rosados cabellos.

— ¡Deja de hacer esas idioteces Natsu!

— ¡Cállate! —y le lanzó otra bola de papel mientras se acercaba a Gray.— ¡Llevamos rato esperándote calzoncillo-man!

—Ese no es mi problema imbécil. —y tras procesar bien las palabras de su amigo, sus ojos se abrieron de par en par al escuchar una risa de más.

—Ustedes nunca cambian, par de ruidosos. —dijo una voz un poco más gruesa y molesta —según Natsu—, pero muy conocida por ellos.

— ¿Gajeel? —cuestiono el Fullbuster de una manera que le hacía lucir como él imbécil que realmente no era.

—Gehee~ —soltó su típica risilla y les dio una fuerte palmada en los hombros a sus dos amigos—. ¿Quién más podría ser Stripper?

To be continued...

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~Chachos~