Hola (: He traído una de mis parejas crack más recientes, y aunque sea sin sentido, me encantan estos dos. Creo que el personaje de Beth vendría a representar a todas esas adolescentes hormonales que sueñan, como yo, estar al lado de Daryl hehe :D En fin, éste vendría a ser un drabble cortito y casi sin sentido que tomaría lugar en un día cualquiera de esos meses de invierno que no se mostraron en la serie.
Saludos.
Hydrae
Disclaimer: Ni la serie ni la historieta me pertenecen. Todo mi diversión, sin ánimos de lucrar.
A destiempo
Drabble
Su boca era besada.
Beth lo sabía a la perfección, el ajeno peso sobre sus labios no dejaba lugar a dudas, no obstante, la joven se hallaba tan sorprendida y desconcertada que una parte de su cerebro dudaba que aquello tuviera cabida, que fuera cien por ciento real.
Conteniendo la respiración, situó sus manos temblorosas sobre los gruesos hombros de él, y pese a decidir empujarlo, lo único que terminó logrando fue aminorar la reducida distancia que en tiempo pasado pudo ayudarla a separarlos. Su corazón estaba acelerado mientras que su cuerpo pedía con urgencia aire. Beth no pudo evitar preguntarse que rayos había sucedido, en especial con él, y cómo todas las cosas se enmarañaron a favor de lo que acontecía como su interior pasaba de un estado neutral a la mayor pirotecnia del mundo. No tenía miedo ni estaba tranquila, sólo exaltada y muy fascinada. Le era difícil explicarlo.
Una mano grande y áspera se posó sobre su mejilla derecha e instantáneamente su cuerpo se destensó. Sin preverlo ni evitarlo, todo su sistema se trastocó. Olvidó las causas que los llevaron a eso, difuminó la idea de que un hombre mucho mayor que ella la tenía entre sus brazos y desechó la probabilidad, alta y riesgosa, de que en cualquier momento alguien, como su padre, podía entrar a esa habitación y encontrarse con una imagen demasiado retorcida como para ser sano.
Beth, simplemente, quedó en blanco… pero aun así acabó correspondiendo el gesto.
Pronto, y mediante tímidos roces por parte de la muchacha, a Daryl Dixon se le esfumó todo el enfado y frustración que Beth anteriormente le hizo sentir. Ahora, y aunque resultara un hecho preocupante del que luego cavilaría con cuidado, sólo podía pensar dos cosas claras: no era una jodida niñera, sin embargo no permitiría que esa mocosa repitiera la estupidez de esa mañana, o por lo menos no sola, y que, de una forma inquietante y absurda, sentía una sensación agradable al besar a una niñata inexperimentada como esa.
¿Cuan enfermo estaría?
Ella acarició los cabellos largos que pendían de su nuca y, ahora si, toda problemática pasó a un segundo o tercer plano para ambos.