Hola!

La idea de este fic surgió hace muchos meses, pero no me atrevia a publicarla, no estaba segura si gustaría, pues como podrám deducir por el titulo es ya una idea bastante gastada en fanfiction, espero que me dejen su opinión, es importante para mí saber si lo estoy hacicendo bien o no.

:D

DISCLAIMER: Harry Poter y su mundo le pertenecen a J.K. Rowling

El Campo de batalla era totalmente devastador, hace un momento es taba peleando con un mortífago, y ahora se había ido, no estaba y presentía que nada bueno estaba pasando, no se oía nada, el silencia era abrumador, ¿Dónde estaban todos? ¿Dónde estaban los de la orden? ¿Dónde estaban los mortífagos?

Bien si no veía nada tenia que esconderme, como dice papá: "si no ves a nadie, no dejes que te vean a ti".

Se escondió tras unas cajas, tenía que llegar fuera del edificio para aparecerse en un lugar más seguro, pero ¿Dónde estaban todos? No la dejarían ahí sola, no, eso era imposible, se levanto sigilosamente; cuando de pronto un hombre encapuchado levanto su varita a unos metros de ella, el hombre sonreía, maldición es mi fin – Pensó; todo paso muy rápido de la varita del mortífago salió un rayo verde y de pronto sintió el peso de un cuerpo que la cubrió, ella casi pudo sentir el impacto y el peso del cuerpo inerte sobre ella, cuando vio quien era las lágrimas empezaron a caer sobre sus mejillas.

-Papá… papá no, tú no, por favor tú no –

El mortífago sonrió más ampliamente, ella levanto el rostro, su vista borrosa por la gran cantidad de lágrimas que inevitablemente cubrían su rostro. No pudo reconocer al mortífago, solo se veía su maldita sonrisa, con unos dientes tan amarillos que seguro su abuela se hubiera muerto de tan solo verlos, claro si estuviera viva. Apretó con fuerza su varita y la levanto contra su contrincante, el hombre sonrió nuevamente y apuntó también a la niña que tenia enfrente.

De pronto sintió que alguien la abrazaba y luego un revoltijo en su estomago, cerró los ojos por inercia, cuando los abrió estaba en casa.

-Pero… - Voltio y vio a un pelirrojo que lloraba sobre el cuerpo inerte de su padre y sus lágrimas volvieron a salir incontrolablemente.

-Fue mi culpa… lo hizo por salvarme, fue mi culpa- Su padre la había salvado cumpliendo una de las promesas que le había hecho ya hace mucho tiempo, pero al mismo tiempo había roto otra promesa aún más importante para ella.

-Papá, por que no regresó mami contigo-

-Ella estará siempre con nosotros pequeña-

-Pero… no está aquí ahora-

- Ella está aquí- dijo señalado el pecho de su hija – y aquí- señalando el su propio pecho- aunque no la veas ahora ella siempre estará con nosotros cuidándonos-

-Pero papá, tu ya haces eso- dijo la pequeña con obviedad

-si Pequeña, siempre te protegeré, siempre, cueste lo que me cueste, te lo prometo-

-Pero tu no te iras verdad, siempre estarás aquí no papá, promételo-

- Sí hija, siempre, te lo prometo- abrazo a su pequeña hija, evadiendo así la intensa mirada que suplicaba por ver a su madre. Y al mismo tiempo ocultando sus ojos enrojecidos por tanto llorar la muerte de su amada esposa.

El pelirrojo levanto el rostro y miró a su sobrina.

-No Rose, no fue tu culpa… me tengo que ir, no quiero que te muevas de aquí-

-No Tío, necesitan ayuda, tengo que ir, yo puedo pelear- Se levanto para alcanzar a su tío, pero este la miró muy serio, quedaba muy lejos los años en su tío Fred junto a su tío George reían y hacían bromas a todo el mundo y engreían y consentían en todo a su sobrina, desde la muerte de su tío George, Fred cambio drásticamente, se le veía muy serio, casi no reía y las circunstancias no ayudaban mucho, cada vez eran menos los Weasley que quedaban y Permitir que su sobrina lo acompañaran era enviarla a una batalla que no sabía si él mismo sobreviviría y menos su pequeña sobrina de tan solo 16 años.

- Rose, no discutas, no tengo mucho tiempo, solo quédate aquí, enviaré a alguien en un rato- la abrazó – necesitas recuperarte para pelear, si vas en ese estado tu padre habrá muerto en vano- la soltó y desapareció.

Rose siguió llorando, había derramado muchas lágrimas por muchos familiares, pero su padre… no estaba preparada para que el se fuera y no regresara, sabía que estaban en guerra, desde que recordaba vivían de una forma poco tranquila, ella aislada del mundo, en esa pequeña casita, su hogar, donde su madre le enseñaba de todo, ella era su maestra, su amiga, cuando llego su hermanito Hugo, su vida se hizo más feliz, sus primos la visitaban claro, James y Albus eran muy buena compañía y siempre se quedaba con ellos y con algunos de sus otros primos con la supervisión de su abuela Molly cada vez que sus padres se iban, pero Hugo era su hermanito, ellos compartían más que juegos y travesuras, compartían sentimientos y miedos, la angustian de que sus padres un día se fueran y no volvieran y la felicidad cuando ellos volvían; pero cuando él se fue con mamá y no volvió más se sintió muy sola, en ese momento nadie le explico porqué su hermanito no volvía, ni porqué su madre lloraba tanto, solo el tiempo le haría entender que no debería preguntar cuando alguien no venía más, pero el tiempo jamás le pudo enseñar a vivir con la ausencia de los que ella más quería. Y mucho menos sabía como aprendería a vivir sin su padre.

Desde el ataque que sufrió su madre en callejón Diagon donde se encontraba con Hugo y este murió, la mantuvieron totalmente aislada, ya no habían más salidas, tampoco las había antes muy seguido, pero por lo menos acompañaban a sus padres de vez en cuando a visitar a sus tíos o abuelos o como en esa ocasión salían a comprar algunas cosas necesarias para la casa, claro siempre bajo otra imagen, camuflados como los fugitivos que eran, para pasar desapercibidos.

El Ministerio de Magia de Inglaterra estaba controlado abiertamente por Lord Voldemord desde hace ya algunos años, claro antes también lo controlaba pero de una forma distinta, jamás se le veía, no se presentaba en las batallas, y pocas personas pronunciaban su nombre, en cambio ahora no había un día en el que los periódicos no anunciaban algún decreto o anuncio que hacia Lord Voldemord a todo el mundo mágico y las personas hablaban maravillas de cada una de esos decretos, nadie lo contradecía, nadie. Era simple o estabas de acuerdo con él y con sus ideales o no, en el caso de que no, ya se sabía como terminaban.

Lord voldemord solo tenía una molestia. Harry Potter y sus seguidores, no eran muchos y principalmente eran sangres sucias que no tenían posibilidades de una vida digna en el mundo mágico, y algunos pocos mestizos y claro, los traidores de sangre. En comparación con las tropas de Lord Voldemord ellos no eran nada, pero a Harry Potter se les seguían uniendo más personas, habían infiltrados en el ministerio y sabían jugar bien sus cartas para nunca ser encontrados, Pero tanto Harry, como Voldemord sabían que eso no duraría mucho tiempo, en cada batalla morían mortífagos, pero eran muchas más muertes las que tenia la Orden del Fénix, era solo cuestión de tiempo para que encontraran a Harry Potter y con él muerto se acabarían las esperanzas para el mundo mágico.

-Rose!, Rose! Rose!

-Papi!

La niña corrió a los brazos de su padre y lo abrazo con fuerza, el cabello pelirrojo como el de su padre pero tan alborotado con el de su madre en ese momento lucia algo gracioso, tenia una trenza muy bien hecha de un lado y del otro estaba suelto y muy despeinado.

- Estas preciosa pequeña pero deberías decirle a tu mamá que te termine de peinar- y con una mano alboroto aun más el cabellos desarreglado de su hija.

-Mamá no esta, salio muy apurada y me dejo en la biblioteca, me dijo que me escondiera y que saliera solo si tú venias.

- ¿Salió…?- en ese momento notó lo que su hija tenia en la mano - ¿Qué tienes ahí?

-¿esto?...- le enseño a su padre una pequeña piedra rojiza, algo liza y redonda- lo encontré en la biblioteca, con las cosas de mamá. ¿Qué es papá?

- hummmm… me parece que es un transportador del tiempo, pequeña-

-un transportador, o sea que te puede transportar a donde tú quieras como un traslador- dijo la niña emocionada

-no pequeña no como un traslador, pero para serte sincero no sé bien como funciona, tu mamá me hablo de esto, pero no le preste atención… pero shhh que sea nuestro secreto- la niña sonrió ante la complicidad que compartía con su padre.

-¿Pequeña tu mamá salio hace mucho? ¿Recibió alguna carta? ¿Alguna ave vino?

-No, pero vi un patronus papá, creo que era de tío Harry por que tenia cuernos

-escuchaste algo o mamá te dijo algo sobre el mensaje- dijo el pelirrojo con cara de preocupación.

-No papá.

-Bien, iré a buscarla, tú quédate en la biblioteca y no salgas hasta que yo te llame ¿si?

-Sí papá, pero vuelve pronto con mamá para comer juntos.

-Si pequeña, pero si no volvemos pronto ya sabes donde esta la comida ¿verdad?

-si papá- beso a su hija en la frente queriendo volver pronto a casa para cumplir el deseo de su hija. Estar juntos, como una familia.

Abrió los ojos lentamente, aún con los recuerdos del sueño que había tenido, le dolía los ojos, ahora enrojecidos e hinchados, enfoco una figura borraza en el marco de la puerta de la habitación de su padre, donde había trasladado el cadáver, ella se había quedado dormida de tanto llorar. Levanto el rostro pestañeando muchas veces para poder enfocar mejor a quien tenía enfrente. Unos ojos grises, cabello rubio platinado, estaba vestido de negro, un poco sucio y con rastros de sangre, era obvio que venia de una batalla.

-Scorpius, ¿que haces aquí?

-Esperando a que despiertes para que te tomes esto- dijo el rubio señalando un vaso con una poción.

-oh, ¿para que es? Y ¿Quien te trajo aquí?- le dijo acusadoramente

-Es una poción energizante nada más, tu tío me dijo que no estabas bien, y ahora veo por que… lo siento- dijo mirando a su padre que yacía sin vida recostado en la cama.

-¿Mi tío Fred te trajo hasta aquí?- dijo tomando la poción y poniendo una mueca de desagrado, sin embargo se tomo toda la poción.

- ¿Había otra forma de poder entrar?

-Supongo que no- dijo Rose, sabía que nadie podía entrar a su casa por que estaba protegida bajo el encantamiento Fidelius, su padre era el guardián secreto, pero estaba muerto. Eso significaba que a todos los que el revelo el paradero de la casa serían una especie de guardianes secretos, su tío era uno de ellos, dudaba que su padre haya siquiera hablado con Scorpius Malfoy, y no es que desconfiara de él ya que Scorpius también era miembro de la Orden del Fénix, era solo que no le caía para nada bien a Ron, igual que su padre, Draco Malfoy.

-Te has revisado las heridas?- dijo en tono preocupado, mirando los cortes que tenia Rose en los brazos.

-no, es nada- el chico se acerco, saco la varita y empezó a curar sus heridas, estás cerraron inmediatamente. Rose había escuchado lo bueno que era Scorpius preparando pociones y curando, había sido de mucha ayuda en muchas batallas, pero pocas veces lo había visto en acción, cambió su cara de asombro que tenía en ese momento y retiró el brazo que Scorpius todavía tenía tomado.

-Gracias- Musito- Deberíamos estar en batalla en este momento y no aquí… por que mi tío te mando a ti, no me estoy quejando, pero debes tener ganas de pelear ¿no?

-Tu tío me trajo inconsciente, me despertó y me dijo que estabas mal y que no dejara que salieras, hasta que él volviera. La verdad que ya no hay nada que hacer ahí, Voldemord ganó, Harry está muerto y los pocos que sobrevivieron están a salvo, si tu tío aún conserva el traslador con el que me trajo no dudo que ya haya sacado a los demás heridos.

-¿Tu padre..? –preguntó la chica un poco apenada por el interrogatorio que le había hecho al chico. Pero el chico la cortó antes de que terminara de preguntar

-No, lo mató Parkinson, la muy cobarde lo atacó por detrás, yo la iba a atacar pero alguien me aturdió y no recuerdo nada más luego desperté aquí con tu tío

-Tú estas bien?-

-Sí no te preocupes, ya me curé… Que bueno que pudiste traer su cuerpo, puedo ayudarte a enterrarlo en el jardín- Dijo el chico.

-Voy a esperar a que vuelva mi tío- dijo mirando a su padre, las lágrimas volvieron a acudir inevitablente.

-Esto es así, uno no puede volver el tiempo atrás y recuperarlos aunque quisiera- dijo Scorpius con un dejo de amargura en su voz pues ellos no solo habían perdido a sus padres ese día, también toda su familia, Scorpius perdió a su madre cuando tenia 10 años y Rose perdió a su Hermano cuando tenía 6 y a su madre cuando tenía 8 – Nos hemos quedado solos.

Rose se quedo en transe, por un momento vino a su mente el sueño que más que eso era un recuerdo lejano de su niñez que había tenido momentos antes – Retroceder el tiempo y recupéralos- repitió casi en un susurro, pero que el chico logró escuchar, este enarco una ceja – el Transportador de Tiempo- La chica se paró rápido y salio de la habitación.

-¿De que hablas?- dijo el rubio y la siguió, entraron a la habitación continua, era la biblioteca, estaba abarrotada de libros todos clasificados y ordenados meticulosamente. Rose fue directamente a una esquina del lugar y saco una caja grande donde empezó a buscar desesperadamente algo. -¿Qué buscas?

-Antes de que mamá muriera estaba investigando un objeto, del cual no le dijo a nadie, solo a mi padre, pero el no pudo explicar que era o que hacía o no quiso no se, yo era algo pequeña aún.- dijo todo esto sin dejar de buscar.

- y que tiene que ver ese objeto con todo esto… -no dijo nada más al ver a la chica sacar una caja pequeña, sonreía como si hubiera encontrado un tesoro.

-Esto- le dijo sacando de la cajita una pequeña piedra rojiza- es un transportador de Tiempo – saco y desempolvo muchos pergaminos, leyendo con avives – cuando mamá murió yo empecé a estudiar aquí, y encontré los estudios que mi mamá había hecho sobre él, pero no encontré está piedra, yo la había visto antes, cuando era pequeña pero no le di mucha importancia en ese entonces, cuando le pregunté a mi papá me dijo que me olvidará de eso… hace poco la encontré con las cosas que papá guardaba de mi madre, no se lo dije a mi padre por que sabía que no me permitiría hacer lo que pienso hacer.

-¿y que piensas hacer?

-evitar que mis padres mueran, evitar que todo esto pase.

-Como podrías evitar la muerte eso es imposible…

-Retrocediendo en el tiempo- El chico quedo mudo ante esta respuesta, había oído hablar de los giratiempos, pero estos habían sido destruidos todos, hacía mucho tiempo, el Ministerio no volvió a construirlos ni nada parecido ya que todos los estudios habían sido destruidos junto con ellos. Y además el Ministerio había prohibido la investigación de todos estos artefactos por ser peligrosos.

-Estas segura de que funciona

-Jamás lo he probado, por que necesitas una de estas –mostrándole la piedra- para viajar al pasado y 2 para viajar al futuro, o regresar al presente y como verás solo tengo una.

-De donde lo saco tu madre?

-no lo sé, en sus estudios solo dice como podemos activarla y sus posibles consecuencias.

- y que piensas hacer, regresar al pasado y matar a Voldemord antes de que sea poderoso.- la chica levanto el rostro y miro al chico, pensando en sus palabras.

- Eso sería útil, pero muy peligroso, si lo eliminamos antes de que sea Lord Voldemord, cabe la posibilidad que nuestros padres no se enamorasen y eso significaría que nosotros no existiríamos. Aunque caben un millon de posibilidades…

-Por que piensas en esto recién ahora, si ya lo habías estudiado antes.

-Ya te dije, me obsesione con esto y a mi papá no le gusto, además no tenía la pieza principal, mi mamá viajo hace mucho tiempo en el pasado con un giratiempo ¿sabes que es? – el chico asintió- bueno tuvo éxito, pero esto no es como los giratiempos, con esto puedes viajar a muchos años atrás si así lo deseas, los giratiempos solo te daban unas horas, si hago lo correcto tendré éxito como mi madre y podré salvar muchas vidas

-¿Qué pasa si no funciona?

La chica se encogió de hombros – Ya no tengo nada que perder, además nada puede ser peor que esto- siguió revisando los pergaminos.

Scorpius no tenía claro todo esto, era una locura y lo sabía, pero también esto daba una esperanza, si Rose arreglaba el pasado eso significaría que ellos no tendrían que pasar por todo lo que habían pasado, no tendría que haber visto a sus padres morir, no tendría que haber sido un prófugo toda su vida, y dejaría de esconderse y de ser perseguido.

La chica se levanto y salió de la habitación, Scorpius aprovecho el momento para ver los pergaminos que tanto veía la pelirroja, se dio una sorpresa al ver que solo habían símbolos, Runas, él jamás aprendió a leerlas, soltó los pergamino y fijo su atención el la piedra, está era peculiar sí, pero nada fuera de lo común, vio que tenía símbolos pequeños, apenas perceptibles a la vista alrededor de la piedra y ese color rojizo tan parecido al color del cabello de Rose.

Al poco tiempo entró la chica con una maleta mediana, estaba llena, pero la chica siguió metiendo libros y muchos pergaminos.

-No pensarás irte ahora ¿o sí?

-Sí, no pienso esperar a que vengan a decirme quien más murió.

-Iré contigo- la chica se voltio a mirarlo – No lo creo, este es un viaje que posiblemente no tenga retorno.

-Lo sé, pero no puedo dejar que tú vayas sola, además si tu tío vuelve y no te encuentra, me matará y estoy seguro que de una forma muy dolorosa.

Estaba sorprendida, y aunque estaba segura que necesitaría mucha ayuda para sobrevivir en otra época y lograr todo lo que tenía planeado, no podía ir con alguien más sabiendo que talvez se quedarían atrapados en el tiempo, si es que no sucedía algo peor.

-No puedo dejar que vallas conmigo, es peligroso y no creo que estés preparado para esto- el chico enarco una ceja, no le gustaba que lo menospreciaran, el no era ningún cualquiera era un Malfoy y aunque su apellido no significara lo mismo que significo hace muchos años atrás, su padre siempre le inculco que debería estar orgulloso de quien era, de lo que hacía y que sobre todo nadie lo subestimará y menos menospreciara, como lo estaba haciendo esa chica.

-Vamos Rose sabes perfectamente que no soy un inútil, y que tú necesitaras ayuda y como dices ya no tengo nada que perder y si puedo ayudar a que este caos termine estoy dispuesto a hacerlo.

-Necesitaras ropa y dinero y no tengo tiempo para esperarte…

-Llevaré la ropa de tu padre, no creo que la necesite ahora, y traigo dinero suficiente- dijo prácticamente para que la chica no le ponga más excusas.

-Bien, ire a ducharme, haz lo mismo en el cuarto de papá hay un baño tu entra ahí y luego coges la ropa que necesites, hazlo rápido.- dijo esto y salio de la habitación.

Rose, se dio un ducha rápida y fue a la cocina y puso algunas latas de conservas de comida y lo puso en la maleta, luego recogió algunas cosas de valor y también las puso en la maleta y la cerró.

Luego saco un pequeño bolsito y puso en el todo el dinero que tenía, y los pergaminos más importantes, la mitad del diente de un basilisco y algunos libros que ella consideraba importantes.

Mientras hacia todo esto no pudo dejar de pensar que tal vez dejar que Scorpius vaya con ella era un error, serviría de mucha ayuda sí, no había duda que Scorpius era muy buen mago, su padre le había enseñado como pelear desde muy pequeño a diferencia de ella que recién pudo ir a una batalla a los 15 años y aunque era muy buena con la varita, Scorpius la sobrepasaba mucho, además era muy bueno en pociones sin duda el hubiera sido un muy buen medimago si hubiera tenido la oportunidad.

-Ya estoy listo- Scorpius entró a la biblioteca vestido con la ropa de Ron, eran de la misma altura, pero Scorpius era más delgado que Ron y eso se notaba en que la ropa le quedaba algo holgada.

Bien, tenemos que esperar a media noche para empezar el ritual- dijo ella mientras dibujaba símbolos dentro de un gran circulo que dibujo en medio de la biblioteca.

Faltan todavía dos horas. A que año piensas llevarnos?

Oye, esto puede ser peligroso, cabe dos posibilidades que viajemos en el tiempo y abramos una brecha en el tiempo y creemos una línea temporal distinta a esta en la que no haya Voldemord o simplemente viajemos en el tiempo y todo esto suceda de nuevo aunque intentemos detenerlo, ¿estas seguro que quieres venir?

Ya te dije que sí, si hay una esperanza será mejor tomarla.

Esta bien, estaba pensando en ir al año 1995, evitar que Voldemord regrese o retardarlo el mayor tiempo posible, mientras los convenceremos de ir a buscar los Horrocruxces, ya tenemos ubicados 5 de ellos solo nos falta el relicario de Slyfherin, luego de los Horrucruxes le seguirá el turno a Voldemort. Talvez encontremos más datos sobre el relicario en ese año, ya que tendremos más libertad para buscar iformación.

¿Cómo nos acercaremos a ellos? Digo no, no creo que nos crean si les decimos que venimos del futuro y menos de un futuro como este.

No, no podemos decirles eso bajo ningunas circunstancias, tendremos que tomar otros nombres ya tengo arreglado eso, y también nuestro aspecto, pero eso lo arreglaremos cuando estemos aya.

Bien- Scorpius salio de la biblioteca y volvió con una pequeña maleta en la que tenía la ropa que había tomado de Ron.

Esperaron lo que faltaba de tiempo en silencio, Rose leyendo los pergaminos y comprobando que el dibujo que había hecho en el piso estuviera perfecto para que no cometieran errores, Scorpius tenía muchas preguntas pero no se atrevía a decírselas, jamás habían tenía demasiada confianza, y dudaba que toda esa locura saliera bien pero no tenía de otra, Rose había demostrado ser muy buena ayuda para Harry en la búsqueda de los Horrocrucex a pesar de su corta edad. Él necesitaba hacer algo y si eso era seguir a Rose Weasley a un viaje sin retorno, lo haría, total en cualquier momento voldemord los encontraría y los mataría, sabía que no había futuro para ellos, así que encontraría la solución en el pasado.

Rose miró su reloj, ya era hora tenían que hacerlo en cuestión de un minuto.

-Toma mi mano y no la sueltes por nada o nos podríamos perder en tiempos diferentes.

Scorpius toma con una mano la mano de Rose que tenía la piedra y con la otra tomo su maleta. Estaban en medio del círculo.

Rose miraba su reloj inquietamente, y apenas las manecillas indicaron que era media noche, ella empezó a recitar muy bajo, Scorpius apenas la oía y no entendía nada, jamás había oído el idioma o lo que sea que estaba pronunciando Rose, de pronto el circulo con todos los símbolos que tenía dentro empezaron a iluminarse, todo sucedió muy rápido, Rose no dejo de recitar mientras todo empezó a girar, cerraron los ojos instintivamente, sentía como todo giraba y ejercían una tremenda presión en ellos, hubo un momento en que la presión fue demasiada y Scorpius atrajo a Rose contra si para que no se separaran, pero cuando lo hizo de pronto cayeron bruscamente sobre el suelo.

GRACIAS POR LEER

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