Los personajes de Naruto no me pertenecen.
El deshielo de la princesa.
Naruto miró con sus ojos abiertos azules de par en par, rayando a incredulidad y palidez. Alzó la mirada al cielo para comprobar que el mundo seguía girando en su entorno. Sintió el chakra de algunos y comprobó que no era un genjutsu.
—¿Qué?—pregunto en un tartamudeo.
—He dicho que te amo Naruto Uzumaki—gruño Hanabi alzando la barbilla con prepotencia. Naruto le miro con fuerza antes de morder los labios con indecisión.
—Hanabi-chan...
—No utilices palabras dulces para rechazarme Naruto Uzumaki —la voz dura penetro en lo hondo del rubio, él suspiro y se rasco la nuca.
—Eres Hanabi-chan.
—Eso lo comprobé cuando me miré en el espejo esta mañana—dijo sarcástica rodando los ojos blancos. Uzumaki frunció las cejas y cruzo los brazos en su pecho.
—Eres menor que yo—apuntó Naruto haciendo hincapié con un fruncimiento de labios.—También la hermana de Hinata-chan.
—Lo sé.
—Tal vez la nueva futura heredera del clan Hyūga.
—Lo sé.
—Tendrás problemas si te ven conmigo.
—Lo sé.
Naruto frunció más las cejas antes de recargar su cuerpo en el poste de luz. No entendía a esa niña. Le daba las razones para que se echara atrás pero seguía imperturbable.
—¿Dirás más cosas estúpidas Naruto Uzumaki?—pregunto con dejo de aburrimiento. Él negó.
—Acepto tus sentimientos—murmuro con seriedad. Ella asintió con fuerza sin poner esperanzas.—Pero tendrás que esperar.
—¿Porqué?
—¡Eres menor de edad Hanabi-chan! ¡Me matarían!
—No importa. Esperare tu respuesta, no importa una negativa.
—Eres demasiada madura para tu edad—rezongo Naruto. Hanabi asintió y giro sobre sus talones antes de poner una pequeña sonrisa en sus labios carnosos.
—No huyas de esta declaración Naruto Uzumaki. Enfrenta esta lucha como la de Pein.
—¡Lo sé dattebayo!
Hanabi irguió la espalda y volvió a asentir antes de caminar por el lado opuesto de el rubio.
