Descargo de responsabilidad: Hunter x Hunter no me pertenece al igual que sus personajes y demás relacionado con la serie.

Advertencias: Contenido Yaoi, relación hombre con hombre.

Nota: Este fanfiction, es un regalo de cumplea;os suuuuuuper atrasado (XD) para... Drik E. Zero y Kmashi, feliz cumpleaños atrasado :P

Finalmente... Disfruten! ñuñ


A tu lado

-Mmm... Estamos perdidos, ¿verdad?- declaró el peliblanco y El Moreno lo vio, dándole a entender que así era.

Ya habían pasado algunos años desde la última vez que se habían visto y ahora los pequeños niños que eran, se habían convertido en jóvenes apuestos, a pesar de que sus personalidades no hubiesen cambiado demasiado.

Habían decidió ir a escalar una montaña nevada en una regio lejana, para recordar viejos tiempos y vivir aventuras. Habían invitado a Leorio y Kurapika, sin embargo no pudieron ir.

Así que fueron a la extraña y deshabitada región. Lamentablemente, una tormenta los había desviado de su camino y terminaron perdidos.

-Por ahora, será mejor buscar un lugar donde resguardarnos del frío- le dijo el peliblanco y Gon lo siguió. Después de caminar un tiempo, dieron con una cabaña deshabitada.

-¡Por fin!- dijo entrando Killua- pensé que nunca encontraríamos un lugar donde descansar- Killua tomó una de las viejas sillas que habían y la destrozó para hacer leña. Se acercó a la chimenea y comenzó a hacer un fuego.

Una vez encendido, los dos se acercaron a la chimenea y acercaron sus manos para quitarse el frío.

Gon comenzó a reír por lo bajo y Killua lo miró extrañado.

-¿Qué te pasa?- preguntó

-Nada en especial- dijo Gon con una sonrisa- es sólo que estoy feliz de estar a tu lado de nuevo, Killua- y a continuación lo beso en los labios.

Fue un beso rápido y suave, pero Killua ya estaba sonrojado y un poco decepcionado de que ese beso durara tan poco. Así que tomó la iniciativa y beso una vez más a Gon, esta vez haciendo que el beso durará más que el anterior.

- yo también- susurro y continuo besándolo.

En esa pequeña cabaña se encendió una pequeña llama en sus corazones, ya existía la chispa, pero juntos la avivaron. Ahora sabían con certeza que no se alejarían del otro, porque todo lo que deseaban era estar juntos.