ACCIDENTALMENTE ENAMORADO
RESUMEN
U.A. Son Goku es uno de los mejores estudiantes de Artes Marciales de su universidad, pero su verdadero sueño es seguir los pasos de su abuelo Son Gohan y convertirse en un gran guerrero. Tras una disputa con su tutor de entrenamiento, es transferido a las clases del Maestro Roshi donde conoce a Milk Mao, una chica que se especializa en las Artes Marciales… A medida que transcurre el tiempo, ambos jóvenes entablan una extraña relación amistosa.
MARCO LEGAL: Quisiera aclarar que los personajes que aparecerán en el transcurso de la narración pertenecen 100% a Akira Toriyama, al igual que su magnífica obra, DB, DBZ.
CAPITULO 1: PRINCIPIOS
Dentro de la sala de entrenamiento, se encontraba un joven de cabellera alborotada mirando un punto perdido en el suelo. –Amado Abuelito, este año en realidad quiero verte de nuevo… ¿Por qué tengo que estar aquí?-hablo consigo mismo. -¿Por qué…?-reitero entre dientes.- Prometí que cuando creciera volvería a la Montaña Paoz, desde entonces han pasado más de doce años y aun siento que no he conseguido ser el guerrero que esperas recibir…-pensó mirando fijamente la ultima fotografía que tenia al lado del anciano.- ¿Por qué debo continuar estando aquí?-
Después de su reflexión, se dispuso a seguir con su entrenamiento. Estaba golpeando con insistencia un saco de boxeo, hasta que este a causa de la fuerza que aplicaba el chico se rompió.
-¡¿Qué estás haciendo?!-reprendió una voz masculina detrás de él.- ¡No dañes los implementos de entrenamiento! ¿Cuántas veces te he dicho que midas tu fuerza?-el hombre de bigote se cruza de brazos.- ¿Acaso tu intención es embarrar mi cara con lodo después que te seleccione para el Torneo de Artes Marciales en diciembre? ¿Esta no es la última competencia de tus años universitarios?-interpelo con arrogancia.
-¡Para, Satan! ¡Siempre riéndote y gritando como un prestamista mafioso demandando dinero prestado! ¿Qué camino estrecho y elitista es este? Ordenando continuamente una y otra vez como idiota, sin si quiera participar…-esgrimió apretando sus puños.- ¡No enseñes obligando tu estilo por encima de mi talento como artista marcial!-
-¿Eso es todo lo que tienes que decir?-pregunto el adulto calmadamente ante la reprimenda de su alumno.
-¡Puedo decir más!-
-No… es suficiente… Lo capte, así que no vengas a ninguna de mis lecciones, le preguntare a otro estudiante que participe en la competencia, ya que tú no lo puedes hacer… Fue mi error sobreestimarte…-aclaro con desdén saliendo del lugar.
Desanimado y frustrado, Goku decide caminar por los alrededores de la universidad buscando distraerse. Pese a su aburrimiento, sus reflejos le ayudaron a esquivar a dos sujetos que salieron aventados con gran fuerza de un salón.- ¡Esto es verdaderamente patético!- reflexiono al verlos tirados en el pasillo. "Eso no es una mujer, más bien es un gorila" logro escuchar de ellos mientras se quejaban.- ¿Una chica?-formulo escéptico, sin embargo, su curiosidad fue más grande y corrió hacia la habitación que tenía un gran agujero en la pared. Con cautela se asomo y vio una silueta femenina que golpeaba a un sujeto. –Sin duda, parece muy fuerte, se está defendiendo muy bien de esos pervertidos…-pensó con una sonrisa de lado.- ¿Quién podrá ser…?-puso su mano en el pómulo de la puerta con la intención de abrirla, pero su acción fue interrumpida por su amiga.
-¡Son Goku!-la peliazul frunce el ceño.- ¿Es verdad que Míster Satan te excluyo?-
-¡Fantástico!-exclamo seguido de un largo suspiro.
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-Ve y pídele perdón a Míster Satan…-sugirió la chica sentada junto al pelinegro en una mesa del bar.
-¿Por qué?-
-¿Por qué? Aunque Sensei es estricto, él es el maestro más talentoso y famoso de Satan City…-argumento dándole un sorbo a su copa.- Todo lo que esperaste por conseguir ser inscrito en el torneo, has perdido tu oportunidad…-
-Está bien con lo del torneo… Después de todo no es el único al que puedo entrar…-manifestó con voz tediosa.- He estado entrenando por mi propia cuenta, además, mi único maestro es mi abuelo Son Gohan…-sonrió.- No quisiera estar endeudado innecesariamente con otras personas.-menciono con una sonrisa antes de dirigir su atención a la espumosa bebida que tenía en frente.
-Pues ve a visitarlo al exterior lo más pronto posible-ella lo miro de reojo y pudo notar cómo empezó a sudar.- ¡Que estúpido eres! Estar tan asustado de los aviones que ni puedes entrar en uno, ni siquiera usas las capsulas que te regalo…-suspiro.- teniendo una sola experiencia de un aterrizaje forzoso cuando eras niño, ¿Cuál es el gran problema?-él luego de llevar a su mente los mas traumantes recuerdos comenzó a temblar.-Y después el colmo de que por poco ahogarte en el mar, tampoco puedas estar en un bote…-se rio escandalosamente.
-¡Cállate! Nunca has pasado por eso, ¿Cómo entenderías?-se defendió aun nervioso y bebió de un trago todo el liquido que tenía en el recipiente frente a él.-Yo… quizá yo deba abandonar las artes marciales…-
-¿Eeh?-
-Aunque sea el hombre más fuerte de todo el Japón, no importa si no puedo mostrarle a mi abuelito el guerrero que soy en la Montaña Paoz.-hizo una pequeña pausa.- Quizá debería pedir ser un empleado en la compañía de tu familia, Corporación Capsula…- La mujer molesta por la incoherencia que había escuchado, se levanta de golpe dispuesta a irse.-No te vayas… Hoy quédate conmigo…-le pidió al detenerla del brazo.
-¡Idiota!-le grito deshaciendo con fuerza el agarre.- Ya no estamos en este tipo de relación, ¡Ya eres un adulto, deberías sentar cabeza!... Además, yo odio a los perdedores.- habiendo dicho esto se marcho dejándolo solo.
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Una bella pelinegra caminaba sola de regreso a su nuevo dormitorio.- Hoy prepararé algo delicioso para la cena…-se dijo a si misma sosteniendo las bolsas que contenían diversos víveres. Al entrar en el edificio, precisamente cuando subió al último piso, (En el cual se encontraba su habitación), mientras tatareaba una canción vio a un apuesto hombre recostado en el pasillo. -¿Eeh?-articulo mirando a los lados, pero no hallo a nadie más. Con sutileza camino hacia él y logro verlo de cerca.- Ah… Supongo que es uno de mis compañeros, ¿Cuál era su nombre?-mascullo haciendo un esfuerzo por recordar. Pero se rindió rápidamente ante su intento fallido.- De todas maneras, no es apropiado que este aquí… Oye, despierta-anuncio jalándolo de la manga de su camisa, pero no despertaba.- ¿Qué debo hacer?-
-Por favor, ayúdame… ¡Quiero estar contigo!- pronuncio entre sueños. Ella sonrió maliciosamente, de seguro era otro de esos pervertidos que conoció cuando se traslado tan solo hace unas horas en la universidad de Orange Star. Así que para darle un escarmiento, se acerco silenciosamente a su oído y le soplo con brusquedad.
-.-.-.- Sueño de Goku-.-.-.-
-¡Qué lugar tan cálido!-sonrió al disfrutar de la vista en la Montaña Paoz.- ¿Eh? ¡¿Por qué soy un niño?! Se supone que yo tengo 20 años…-expreso desesperado con las manos en la cabeza.- Bueno no importa…-comento luego de un par de segundos. –Escucho una voz… es tan melifluosa… ¿Quién podrá ser…?-se pregunto caminando en dirección de la fuente de sonido.- ¿Qué hace esa niña en el lago…?-confundido corrió hacia la pelinegra que extrañamente le era familiar.- ¡Hey!-saludo detrás de ella, pero la pequeña mujer no se volteo.
-Te he estado esperando…-le informo arrancando con delicadeza los pétalos de una flor.- ¿Por qué has tardado tanto, Goku?-
-¿Eh? ¿Me conoces? ¿Desde cuándo?-cuestiono acercándose más para verla, pero no pudo observar su rostro.
-Creí que volverías por mí, Te fuiste cuando más te necesitaba…-prosiguió pero estaba vez entre lagrimas.
-No… por favor, no llores…-le pidió con preocupación.- ¿Por qué me siento tan mal al saber que esta desconocida esta triste?-analizo sin notar que de sus ojos también caían espesas gotas de agua.- ¿Por… Qué?-balbuceo al llevar su mano en la mejilla y notarla húmeda. Luego sintió como un fuerte ventarrón lo alejaba de su compañía, que parecía ser menor que él.- ¡Por favor, ayúdame! ¡Espera! ¡No me quería ir! ¡Quiero estar contigo!-se sorprendió de sus propias palabras, pero aun mas cuando un molesto dolor se presento en su oído.
-.-.-.- Fin del Sueño de Goku-.-.-.-
Sobresaltado, abre los ojos y gira la cabeza hacia uno de sus lados.- ¡Ahora recuerdo! Goku, ¿Verdad?-entreabrió su boca en señal de sorpresa cuando vio una joven a su lado.- ¿Qué haces aquí?-interpelo amenazadoramente.
-¿Eh?-profirió tratando de reponerse.-Y-Yo solo…-trato de hablar, pero aquellos bellos ojos le miraron con mucha más ira y esto logro intimidarlo.
-¿Qué haces recostado en la puerta de mi habitación?-se puso de pie y con los brazos cruzados, emano un aura siniestra. Tan pronto como él consiguió percibirla, se levanta rápidamente y retrocede unos cuantos pasos hasta la habitación continúa.
-¿Eh? ¿Este es mi edificio?-comento para sí mismo. Luego volvió a centrar su atención en la chica y noto que ella abría la puerta, pero antes de que entrara le lanzo una mirada de pocos amigos, algo que lo motivo a entrar rápidamente en su dormitorio. -¿Qué diablos pasa con esa mujer?-trato de regular su respiración.- Es posible que viva en seguida y también de que estudie en la misma universidad que yo…-puso sus manos en su cabeza.- ¡Tendré que ver nuevamente a ese monstruo!-grito.
Al día Siguiente…
-¡Que dolor de cabeza!-se quejo un pelinegro mientras bebía de un refresco.- ¡Rayos! ¡Todo es culpa de Bulma!-le recrimino mentalmente, pero luego escupió el liquido que contenía en la boca al recordar a la temible chica de la noche anterior.- Y también de esa mujer extraña…- suspiro. Pero la expresión de su rostro cambio a una de terror, al ver que la desconocida con la que apenas interactuó anoche caminaba cerca de él. Así que huyo de su presencia, aprovechando para ver el tablero de información.
-¿Maestro Roshi?- leyó de una hoja que indicaba su nuevo profesor de artes marciales.- No lo conozco, pero no puede ser peor que Míster Satan…-concluyo dirigiéndose a la sala de profesores. Al llegar allí, se asomo por la ventana y vio a la pelinegra dándole una fuerte patada a un anciano.
-¡No deberías molestarte tanto, Milk!-menciono el hombre mayor sobándose la cabeza.
-¡Hump! ¿Y todavía quiere que no me enoje? Solo estoy aquí porque mi padre fue uno de sus discípulos, pero no sé si pueda entrenar con un anciano decrepito y… ¡PERVERTIDO!-
-¡Oye! Yo no soy decrepito y mucho menos pervertido-contradijo poniéndose de pie.- Yo solo soy un admirador de la anatomía femenina…-rebelo con humildad.
El joven que los escuchaba cayó al estilo anime.- ¿Este será mi nuevo maestro? ¿Un anciano lujurioso y libidinoso?-pensó mientras continuaba tendido en el suelo.
-¡Bien! Siendo así, participaré en su clase, solo que tendrá que permanecer a un diámetro de más de 5 metros, ¿Entendido?-Roshi iba a negarse, pero la chica lo amenazo con la mirada.- ¡Genial! Gracias por su cooperación-sonrió.- Me voy…-anuncio abriendo la puerta, pero apenas intento dar un paso, tropezó con algo o mejor dicho, con alguien.
-¡Cuidado!-escucho la advertencia demasiado tarde, pues lastimosamente la gravedad la atrajo al piso. Luego sintió un fuerte dolor en su frente, ya que sin notarlo se golpeo con el hombre que estaba debajo de ella.
-¡Auch!-emitió intentando levantarse, pero se fijo en el rostro del chico que tenía muy cerca y al ser consciente de que estaba encima de él, se sonrojo exageradamente.
Por otro lado, Goku apenas abrió los ojos y se encontró con la mujer de la que tanto quería huir, pero esta vez no sintió deseos de hacerlo. Estando tan cerca, pudo contemplar sus delicadas y finas facciones, se sorprendió de lo largas que eran las pestañas que adornaban sus ojos hipnotizantes y se sorprendió así mismo, al pensar que se veía muy hermosa con sus mejillas rojas.
-Ha-Hazte a un lado…-tartamudeo nerviosa sin moverse.
Él solo la miro fijamente, ignorando el hecho de que sus pupilas se dilataron.- T-Tu también…-El silencio reino entre los dos. Ambos temían que al moverse, incomodaran al otro. De repente, la puerta de donde salió Milk se abre mostrando la pequeña y aparentemente débil silueta del viejo.
-¡Ahora entiendo tu afán!...Vaya eres Goku, ¿no?-acaricio su barba mientras los observaba con detalle.- Parece que serás un muy buen sucesor…-indico con felicidad.
-¿Sucesor?-repitió ingenua. Entonces su mirada se endure al considerar que aquel estudiante solo se estaba aprovechando de ella, no podía pensar lo contrario ya que supuso que era alumno del anciano pervertido.
-No… Y-Yo…-intento explicar pero fue interrumpido por la mano de ella que colisiono con su mejilla.
-¡TONTOOOOOOO!-vocifero colérica antes de marcharse indignada.
-¿Qué diablos le pasa? ¿Por qué fue eso?-frunció el ceño en el momento que acariciaba la zona afectada.- ¡Eso me dolió!-confeso internamente.
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-¡Hola Goku!-saludo animosamente Krillin cuando vio a su despeinado amigo entrar al salón.- ¿¡QUÉ!?-exclamo estupefacto al notarle el área roja e infamada.
-¿Qué te paso, Goku?-curioseo Bulma preocupada.- ¿Estás bien? Nunca antes te había visto con un golpe en la cara-camino hacia él.
-Estoy bien… Perfectamente bien…-aseguro con el ceño fruncido dirigiéndose a su asiento a contarle a su grupo de amigos lo que le había acontecido.
-¿Qué fuiste atacado por una chica?-dudo Yamcha enarcando una ceja.- No digas tonterías… ¿Qué chica de esta institución es lo suficientemente fuerte como para causarle una diminuta contusión al sujeto más fuerte de por aquí?-
-¡Te digo que es verdad!-hablo con sinceridad, pero ninguno le creyó y en silencio fueron a sus asientos, ya que una de sus maestras se dispuso a iniciar la clase.
-Bien, antes de empezar, les presentare a la estudiante transferida-miro hacia la puerta.-Pasa, Mao-san- Una enérgica afirmación se escucho detrás de la puerta y seguidamente se abrió.
-¡Mucho gusto!-la pelinegra hizo una reverencia vistiendo un traje chino de color azul.- Soy Mao Milk, vengo del área de Flypan en China… Mi madre era americana y mi padre es japonés, sin embargo, debido al empleo de mi padre tuve que vivir en China, pero como pueden apreciar, hablo perfectamente el japonés, así que pueden tratarme con toda confianza…-recalco con una sonrisa.
-¡Oh! ¡Que linda! / ¡Es hermosa! / ¡Que piernas mas esbeltas!-murmuraron los presentes.- ¡Que buena figura! ¡Sus padres son de distintas nacionalidades!/ ¡Nunca había visto una chica tan linda como ella!/-
-Por lo pronto, siéntate en uno de los pupitres de atrás…-indico la mujer.
-Si…-asintió caminando lentamente a la ubicación señalada. Pero a medio camino reconoció la cabellera alborotada de alguien.
-¡AAAH!/ ¡AAAH!-gritaron ambos mientras se señalaron con el dedo índice.
-¡Tu eres el pervertido de hace un momento!-
-¡Eres la chica violenta de hace un rato!-se levanto molesto al recordar la agresión de la cual fue víctima injustamente.
-¿Vio… len… ta…?-deletrearon todos ante la discusión.
-¡Oye! ¡¿Cómo que chica violenta?!-reclamo con las manos en las caderas.
-¡Hace un rato en el pasillo me diste una fuerte bofetada sin si quiera tener un motivo!-
-¿Qué? ¿Entonces, era verdad?-murmuraron sus amigos.
-¡Eso fue en defensa propia! Después de todo, no tolero a los pervertidos-
-¡No lo soy!-
-Entonces, ¿Por qué Roshi dijo que eras su sucesor? Es lógico que se refiriera a eso…-
-¡Pues no! ¡A penas si sabia el nombre de ese profesor! Fui trasladado de clase hace un par de horas…-
-¿Ah?-su expresión se suavizo al notar que el chico no mentía. Pero su orgullo no le permitiría quedar en ridículo frente a toda una clase.- ¡Te pedí disculpas!-mintió con los brazos cruzados y los ojos cerrados.- ¡No te hagas la victima solo porque te rocé un poco!-
-¡¿Cómo que un poco?! ¡Aun tengo roja mi mejilla!-narro acompañando sus palabras con exagerados movimientos en sus extremidades.- Además…-hizo una pausa.- ¡NO ME PEDISTE NINGUNA DISCULPA!-grito exasperado.
-¿Ah sí? ¿No será que tienes la presión baja y por eso es que exageras y olvidaste lo que realmente paso?-prosiguió molesta.- Deberías perdonarme, ya que me disculpe…-
-¡NO LO HICISTE!-apretó los puños.- ¡Tu…-la señalo.-… GORILA!-enfatizo la última palabra haciendo que en ella se formara una vena hinchada al costado de su cabeza.
-¡¿A quién le dices Gorila?!-reacciono agresivamente dándole una patada en el rostro, él al estar desprevenido recibió directamente el golpe que lo envió a traspasar la pared. Todos los espectadores quedaron anonadados con lo que vieron, jamás creyeron que aquella chica tuviera fuerza sobrehumana y mucho menos que haya conseguido golpear al hombre más fuerte de la región.
-¿Aaah? ¡Soy una tonta! ¡¿Por qué hice eso?! ¡Todos me están mirando!-se regaño mentalmente mientras sus suaves mejillas de tornaron de rojo.
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Continuará
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