Disclaimer: El mundo de Harry Potter pertenece a J.K Rowling y a la Warner BROS. Si yo fuera su dueña, Harry y Hermione estarían juntos hace tiempo…
Rating: K
Summary: Es 31 de julio y parece que alguien tiene ganas de felicitar a su padre.
NdA: Es mi primer oneshot y espero vuestros reviews.
31 de julio
Los primeros rayos del alba comenzaban a filtrarse entre las cortinas. Lily se desperezaba restregándose los ojos con sus manitas. Saltó de la cama y corrió a mirar el calendario. No cabía duda, era 31 de julio. Buscó en los cajones la cómoda y sacó el regalo para su padre. Se dirigió a la habitación de su hermano y abrió la puerta despacio para no hacer mucho ruido. Dentro encontró a James roncando tranquilamente. Lily se acercó de puntillas a la cama y lo zarandeó con cuidado.
- James, despierta. Es el cumpleaños de papá. –
- Mmmmm. ¿Qué quieres Lily? –
- Vamos a despertar a papá. –
- Ahora voy… - rezongó James dándose la vuelta en la cama.
Lily puso rumbo a la habitación de sus padres. Se encaramó a los pies de la cama y gateó hasta su padre que rodeaba con una mano la cintura de su madre.
- Papá, papá, papi,…-
Harry esbozó una sonrisa al escuchar a su pequeña Lily. Aún recordaba como si fuera ayer el día que Hermione le dijo que iban a ser padres. Como la inseguridad inicial dio paso a la felicidad. Y cuando llegó el día y pudo sostener a su hombrecito en los brazos pensó que todo lo que le había pasado en la vida no le importaba mientras pudiera verlo crecer junto a su mujer. Todavía no se había acostumbrado a lidiar con las primeras travesuras de James cuando supo que esperaba otra criaturita. Desde el momento que Lily le miró a los ojos por primera vez supo que su pequeña princesita sería su debilidad. Como negarle algo a esos ojillos verdes.
Harry se acomodó en la cama para hacerle un hueco a la pequeña.
- Buenos días, princesita. No hagas mucho ruido que mami sigue durmiendo. –
- ¡Felicidades papi! – le susurró Lily abrazándolo por el cuello.
- Muchas gracias, pequeña. – le dijo mientras la besaba en la frente.
- Tengo un regalo para ti. –
- ¿Ah, si¿Y qué es? -
Lily gateó hacía los pies de la cama donde había dejado un papel enrollado con un lazo.
- Ábrelo, papi. – le dijo mientras se lo tendía.
Harry deshizo el lazo y desenrolló la hoja. Sonrió al descubrir el trazo irregular de Lily en un dibujo en el que aparecía su familia junto a él mientras soplaba las velas de una gran tarta. Su familia. Que bien sonaba. Todavía se sorprendía pensando en lo afortunado que era al haber formado una familia junto a Hermione. Su Hermione desde hacía ya más de diez años. ¿Quién le iba a decir que aquella niña de pelo encrespado que entró al vagón preguntando por el sapo de Neville iba a convertirse en su esposa? Cuanto la amaba… Volteó a mirarla y la encontró observándolos con una sonrisa en la cara.
- Feliz cumpleaños, cariño. – le dijo antes de besarle suavemente en los labios.
James asomaba por la puerta frotándose los ojos.
- Felicidades, papá. – dijo mientras se acercaba a la cama.
Harry amplió su sonrisa. No necesitaba más regalos. Ya tenía todo lo que podía desear.
