NI HAO.- yo aquí reportándome con una historia que participa en el reto de lemon, seduciendo a Naruto-Kun.
Esta historia es para dar la bienvenida a mi gran hermana Jan di Chan a nuestro club hermanitas naranja de irresistible naranja.
El cuarto Hokage naranja o sea yo te nombra a ti Ninja Ambu, categoría Lemon.
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Advertencias: es un mundo alterno Naruto es Kage de la aldea el Remolino, tiene treinta y cinco años. Hinata tiene 16 años.
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Pecado
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By
Aniyasha
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Su piel sabia mejor de lo que había imaginado, sus labios descendían por su cuello, las manos quitaban esas estorbosas ropas que impedían tocar el cuerpo desnudo de su amante. Sintió el temblar el cuerpo femenino que se encontraba debajo de él. Su cara se alzo y la miro con profundo deseo. Los ojos plateados brillaban.
-Soy tuya, Naruto-kun.
Su sangre hirvió mas ante tal afirmación. Su cuerpo ya estaba muy duro. Al ver deseo plasmado en el rostro de su amada, bajo el rostro a escasos centímetros de ella, sus labios se tocaban y sus miradas nunca se perdieron. Ella se alzo y termino la distancia, sus manos lo atrajeron y él correspondió el beso tierno, convirtiéndolo en uno salvaje. Capturo sus labios, los mordió, entraba y salía de su boca, ella ahogaba los gemidos de la pasión desmedida.
Las manos de Naruto no se quedaron quietas, quitaron la ropa y la dejaron desnuda a su merced. Un gruñido antinatural surgió de él, estaba seguro que en estos momentos sus ojos habían cambiado de color a un tono rojizo, siempre ocurría cuando él perdía el control de sus actos. Sin embargo noto que Hinata no se horrorizo, sino al contrario con una tierna sonrisa le autorizo que la poseyera.
No perdió el tiempo mas, sus sentidos bestiales lo dominaron. Ella tenía las piernas separadas, él podía oler su excitación, se coloco en medio de ella y la ataco con una sola embestida. Hinata lo rasguño en la espalda, él ya no pensaba, el lugar en el que se encontraba era tan acogedor, su miembro palpitaba, era enfundado por completo. El siguió embistiendo, ella lo acariciaba y la atraía más y más. Gruño no pudo evitarlo y su grito se unió al de ella cuando ambos llegaron al estasis.
Fue cuando Naruto abrió los ojos y contemplo con un gran sonrojo sus manos, las cuales estaban llenas de semen. Incrédulo de lo que veía miro a su alrededor. Y frunció el ceño.
-¡demonios!.- maldijo en voz alta.- todo un sueño.- se paró de la cama, estaba completamente desnudo y se encamino al baño para eliminar su propia masturbación ocasionada por un jodido sueño.
Al terminar el baño con agua helada, contemplo su reflejo en espejo. Y no pudo evitar un sonrojo.
Él, tenía ya treinta y cinco años, no era un colegiado que se masturbara pensando en una jovencita.
¡Una niña!
Hinata Hyuuga tenía quince años de edad, ella era heredera del clan Hyuuga. Y SOBRE TODO, la NOVIA de su HIJO.
Por kami, era un completamente pervertido, y con quien no debía. Hinata se convertiría en su nuera, seria parte de su familia. Su Hijo la Amaba y él estaba cometiendo el pecado de desear a la mujer otro.
Pero la atracción que sentía por ella fue inevitable, al conocerla su cuerpo despertó de un largo sueño. Él había dejado de sentir desde que perdió a Sakura en la Cuarta Guerra ninja, su esposa lo fue todo para él, se dedico a ser líder del Clan Uzumaki, ahora era el Kage del la aldea el Remolino. Se dedico también a su tesoro Minato Uzumaki, su hijo, aun que como padre no le fue muy bien. Minato era todo lo que él fue cuando paso por la adolescencia, arrogante, no pensaba en las consecuencias de sus actos, era un inmaduro, pero como todo padre pensaba que con el tiempo mejoraría, comprendería lo que es lo mejor.
Y sabia que si tenía a su lado a alguien tan especial como Hinata volvería al buen camino.
Había temido mucho lo mujeriego que era, cambiaba de novia a cada momento, se había metido en tantos problemas hasta que conoció a la correcta. Con Hinata tenía un año, cumplirían exactamente su primer aniversario dentro de dos días, cuando la pelinegra cumpliera dieciséis años, la fiesta seria aquí en la aldea el remolino.
Este noviazgo había abierto las relaciones políticas de Konoha y Remolino. Quienes se distanciaron hace mucho por problemas políticos, la Hokage Tsunade inicio las relaciones con él.
El clan Hyuuga era muy poderoso en Konoha, tanto como el Uzumaki, este enlace matrimonial era estupendo. Una alianza muy ventajosa, por lo que todos estaban a favor de la unión.
Por lo que él no debería andar pensando en lo hermosa que era Hinata, en la madura que era para su edad, en la atrayente de sus sonrojos, en sus ideales, como futuro suegro había compartido tiempo con ella. Y eso fue desastroso, por que conoció a un ángel, a una mujer. Era sorprendente como la madures se podía encontrar a temprana edad, y todo eso debido a Hiashi Hyuuga, el padre que se había encargado de sobajar a su hija en todo lo que pudo. Pero ella había sobrevivido, y quería cambiar a su clan, esas leyes tan absurdas.
Conocerla empeoro todo, porque no pudo evitar sentirse cautivado.
Cerró los ojos y vio una clara imagen nítida de la pelinegra donde le sonreía.
¡Estaba jodido!, no podía competir contra su propio Hijo.
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La fiesta era hermosa, la música, la comida, el ambiente todo perfecto. Sin embargo para ella no todo era felicidad. Miro la copa que traía en la mano y la tomo en pequeños sorbos, el sake de la aldea el remolino era el mejor. Se encontraba en la mansión Uzumaki celebrando sus dieciséis años, había dejado el ambiente de fiesta para refugiarse en los jardines, sentir el aire en su cara y la frescura de la noche. Al mirar el cielo tan estrellado cerró sus ojos plateados y pidió tontamente un deseo.
Que su sueño se hiciera realidad.
Era muy tonto de su parte creer en los deseos pero no perdía nada con intentarlo.
De repente el piso se movió y sintió que perdía las fuerzas, estaba mareada por tanto sake. ¿Cuántas copas había tomado?, 3, 4, 5. La verdad es que no los conto, el sabor le gustaba y la ayudaba a no sentir ese vacío en el cuerpo. Pero nunca sintió el golpe de su caída, así que medio aturdida por el alcohol se atrevió abrir los ojos, y ahí estaba.
-¿Minato?.- pregunto con confusión, alcohol no le permitió pensar bien. Simplemente sentir el abrazo posesivo de él, el aroma atrayente y la calidez del cuerpo masculino.
Los ojos azules se abrieron sorprendidos, sin embargo no hablo. Ella se oculto en su pecho escuchando los latidos del corazón de su novio. Se sentía tan mal. Él era perfecto y ella no lo merecía. Pero aun podía cambiar aria todo lo que estuviera a su alcance, para que ambos fueran felices. Por lo que lo abrazo y se alzo de puntillas para alcanzar el rostro de su novio y besarlo.
Los tibios y cálidos labios de Hinata dejaron en completo shock a Naruto, no sabía por qué no la había corregido. Y ahora lo estaba besando dulcemente, debía de separarse de ella, sin embargo no pudo, su cuerpo no se movió, por lo contrario abrió sus labios y correspondió al beso. El sabor del dulce néctar, lo embriago por completo. Esta ahí había llegado su resistencia, ambos desaparecieron en una cortina de humo para aparecer en las habitaciones de la pelinegra.
Ella no se dio cuenta de nada, el beso la mantenía completamente cautivada, nunca la habían besado así, con deseo, con necesidad, por lo que correspondió a la pasión con pasión. El alcohol la había ayudado a sentirse viva y suelta, lo abrazo, se pago mas al cuerpo, se froto contra la solides de él, sus manos se enredaron sobre la espalda para atraerlo más. Se arqueaba ante él, gemía por él.
¡Demonios!, maldijo Naruto mentalmente, sus manos tocaron todo el cuerpo de la pelinegra cobrando vida propia. Al sentir como ella correspondía y recordar su sueño, lo altero, por falta de oxigeno se separaron. Y él tuvo que abrir los ojos para descubrir la realidad, ella se encontraba recostada en la cama, con su cabello esparcido, los labios hinchados de sus besos, su candente pasión. La piel blanca en algunos lugares era roja, no sabía cómo había descubierto uno de sus senos dejándolos a su merced, su mano se encontraba ahí, y no podía retirarla, abarcaba todo el montículo.
Ella abrió los ojos y lo miro aturdida aun por todo, pero centrando su atención.
-¿Naruto-kun?
Y él desapareció en una cortina de humo.
El solo pensar que su suegro la había manoseado y besado termino por desmayarla.
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Estaba temblando de ansiedad, quería destruir todo a su paso, por kami, él estuvo a punto de ultrajarla. La había tomado y ella no se abría resistido, claro, pensando que era su hijo. Nunca debió de tocarla, nunca debió de desearla, pero al verla en los jardines rodeada de la oscuridad, bajo las estrellas, todo jodidamente romántico. Y después ella lo beso, y no pudo evitar no caer preso de sus instintos.
Golpeo fuertemente el escritorio queriendo sacar su frustración.
La puerta se abrió de su despacho y entro su prima Karin con muy mala cara.
-Tenemos que partir a la aldea de la Arena, Minato está en problemas.
Al ver la seriedad de ella, se dio cuenta que era muy grave lo que sucedió. Él había mandado a su hijo a una misión y se suponía que debió de llegar hoy pero al parecer tuvo contratiempo y no asistió al cumpleaños de su prometida. No perdió más tiempo y formo el escuadrón para ir a ver a Gaara.
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-¡¿Casado?! - grito Naruto. Miro a su hijo que mantenía la agarrada de la mano a la Hija de Gaara.
-Lo encontré en la habitación de mi Hija, completamente desnudo, como comprenderás no daré mas detalles, exigí que cumpliera con su obligación y él accedió.
Los ojos azules de Naruto miraron con desesperación a su Hijo, quien no alzaba la cabeza, la mantenía agachada.
-¿Qué has hecho?.- dijo con reproche, su voz sonó tan fría como hielo.
Minato tan idéntico a él en el físico se atrevió a mirarlo. Nunca le había hablado así, él tenía la confianza de que su padre lo apoyaría como siempre y que todo estaría bien. Pero al mirarlo tan firme y con tanta seriedad, supo que ahora si lo había decepcionado profundamente.
-Padre… yo
Naruto alzo la mano para callarlo, no quería escucharlo.
-Gaara, mi hijo se quedara a tu cuidado, aquí es su nuevo hogar. Disculpa la ofensa que te hemos hecho, podemos llegar a un buen acuerdo y estar en paz.
El peli rojo asintió con la cabeza y llamo a Naruto a la junta entre kages. El padre pasó a lado del hijo sin mirarlo.
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-¡GUERRA!.- fue la sentencia de Hiashi Hyuuga al enterarse de que el prometido de su Hija la había abandonado.- Tu hijo.- le recrimino a Naruto.- se ha atrevido a insultarnos, y esto no se quedara así, aplastaremos al remolino, lo juro, la ofensa no quedara inmune.
Y el salón de juntas empezó a convertirse en un campo de batalla verbal, Konoha contra el remolino.
Sabía que al llamar a Hiashi Hyuuga e informarle de lo que había sucedido exigiría una batalla, ese hombre estaba sediento de poder y de maldad. Su hijo seria la causa de otra guerra, Konoha tenía muchos aliados al igual que ellos. Se veía en el rostro del Hyuuga la ansiedad de sangre. Sus ojos azules recorrieron el lugar, todos atacándose y lo que él siempre había querido era la PAZ.
No permitiría que nada sucediera, no le daría el gusto al Hyuuga.
-¡SILENCIO!.- grito. Obteniendo la atención de todos.- el contrato matrimonial que se ha firmado se cumplirá.
-como pretendes eso.- exigió saber Hiashi.- se su pone que el heredero Uzumaki tome como esposa a mi heredera, no te permitiré que me des a alguien que esté por debajo de ella.
-si te pones a pensar Hiashi.- dijo calmadamente Naruto.- veras lo que te propongo.
El Hyuuga se sorprendió al comprender. No podía ser cierto.
Y Naruto se dio cuenta cuando él entendió, se paro del escritorio.
-YO ME CASARE CON ELLA.
Un silencio se hizo en toda la sala.
-No tendrás al Uzumaki menor, me tendrás A MI como tu yerno.
Interesante pensó Hiashi, tendría al Kage del remolino, en vez de un chico, y el futuro heredero Hyuuga que sería el Hijo de Hinata, sería una unión con el contenedor del Kyuubi.
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Hasta aquí, si lo se muy pero muy raro. ¬¬
La siguiente continuación el viernes, ando corta de tiempo. Pero será muy perversa.
Mi querida Jan di Chan.- espero que te guste la historia, es solo el comienzo de algo realmente perturbador y pervertido, una historia a mi estilo. Sabes que te considero una Reyna en la perversión jajjajajajaj pero daré batalla. XD.
Es una guerra de lemon, así que mis queridos lectores de ustedes dependen la victoria. La historia que tenga más comentarios será la ganadora, así que a comentar XD.
Los quiere Aniyasha.,