Hola a todos.
¡Sé que no he actualizado! Pero la verdad no tengo inspiración, espero traerles algo bueno para la próxima de un fanfic publicado.
Espero este nuevo fic les guste, me inspiré de un fic que leí de FullMetal Alchemist.
Vocaloid no me pertenence.
Harry Potter tampoco.
Capítulo I: La carta
Era un día como cualquier otro en la casa Vocaloid; Kaito comía helado como loco mientras veía la novela de la tarde, Miku estaba en el estudio de grabación realizando la canción de Mothy, Meiko podaba un poco las plantas y las regaba, Gakupo tocaba como desesperado la puerta de Luka disculpándose por el comentario que había dicho hacía unos minutos y la joven pelirosa no abría la puerta de su cuarto ni por error y por último pero no menos importantes, los reflejos de un espejo; Rin y Len tenían una pequeña discusión sobre quién debería lavar los platos esa tarde.
-¡Es tu turno, Len!
-¡Yo lavé los platos ayer, Rin!
-¡Claro que no!
-¡Claro que sí!
-¡Que no!
-¡Que sí!
-¡Que no!
-¡Que sí!
-¡¿Quieren callarse?! Pronto Joe le pedirá disculpas a Azuna por lo que hizo y ¡Ustedes dos no se callan!
Los chicos rubios no prestaron atención a Kaito y siguieron discutiendo como un par de hermanos, que a pesar de que sí parecían ser gemelos, no lo eran. La compañía los hizo iguales, más no eran hermanos, eran reflejos, de ahí se derivaban sus nombres: Rin "Right" que significa derecha y Len "Left" que significa izquierda. Kagami "Espejo" y "Ne" Sonido.
El joven de cabello azul estaba casi pegado a la televisión de plasma esperando su momento deseado en su telenovela, cuando justamente la novela iba a pasar a su punto culminante, la televisión se apagó.
El chico se quedó con los ojos abiertos y sus pupilas eran más pequeñas de lo normal, lo primero que hizo fue mirar el foco en el techo para verificar si su primer pensamiento de que la luz se pudo haber ido, al ver que su presentimiento fue falso miró hacia atrás encontrado a los Kagamine mirándolo a él con cara de terror, Kaito miró la mano de Rin y pudo notar que ésta estaba sobre el control, luego miró la posición de los chicos y Len estaba tomando la muñeca libre de Rin, quizá habían comenzado una pelea física y en medio de sus "jueguitos" apagaron la televisión.
Los ojos de Kaito se tornaron negros con un brillo extraño, mientras a su alrededor se formaba un aura de fuego y extrañamente él era ahora más alto que lo normal. Puso una sonrisa que daba más miedo que la canción del Payaso loco que había cantado con Miku alguna vez.
-¡Veo que interrumpieron mi novela por andar jugando! ¡Ahora es mi turno de jugar también!
Los rubios se abrazaban del miedo, pues Kaito no se enojaba muy seguido, pero cuando lo hacía, pobre de aquél que estuviera en su camino.
La tensa atmósfera desapareció cuando la puerta se abrió de golpe aplastando al chico de azul detrás de ésta. Era Miku, acababa de llegar y parecía feliz, a Rin y Len les salió una gotita en la cabeza al ver que Kaito había quedado aplastado por la gran puerta de la casa.
Miku ni siquiera sabía que le había pegado a Kaito, pues venía demasiado emocionada.
-¡Rin! ¡Len! ¡Llamen a todos! ¡Hay una noticia genial!
-Miku, si es otra versión nueva de tu voz no creo que les importe mucho.
Dijo Rin aún con la gota en la cabeza.
-Tampoco si es que serás la protagonista de alguna saga nueva. Eso no sería novedad.
Secundó Len, al igual que Rin, con una gota en la cabeza.
-¡No es eso! ¡Es algo mejor! ¡Llamen a todos!
Respondió la diva haciendo un pequeño berrinche.
-Ok, ok…
Respondieron los chicos. Llamaron a Meiko, y estuvieron insistiéndole un rato a Luka que saliera de su habitación, ya que ella seguía enojada con Gakupo. Para desgracia de éste, cuando Luka accedió a salir, él sufrió el mismo destino que había sufrido Kaito con la puerta cuando llegó Miku.
Cuando por fin todos estuvieron reunidos, la chica de coletas repartió a cada Vocaloid un sobre con sus nombres escrito y sellado con tinta roja, un diseño quizás algo viejo.
-¿Qué se supone que es esto, Miku?
Cuestionó Meiko inspeccionando el sobre sin abrirlo aún.
-¡Es una carta de Hogwarts!
-¡¿QUÉ?!
Preguntaron todos los Vocaloid sorprendidos y con sus ojos más grandes de lo normal, la única sonriendo era Miku.
-¡¿De qué hablas?!
Preguntó Luka.
-Bueno, verán. El mánager me dijo hace unos días que todos hemos estado muy estresados por los últimos trabajos que han salido: Kaito, Len y Gakupo con Natsu y la saga de Imitation Black.
-Ni me lo recuerdes.
Dijo Len con una mano en su cara, le era vergonzoso, no sabía cómo había accedido a usar solamente vestidos, era raro que le pusieran un traje de hombre.
-Vamos Len, te veías bien, además no perdiste fans, al contrario, ganaste.
Lo trataba de animar Gakupo.
-Meiko estaba preparando el festival de navidad.
Continúo Miku. La castaña sonrió, había disfrutado hacer ese video.
-Luka ha estado con la saga de Mothy, Rin ha estado con la de Synchronicity y yo estoy con lo de mi versión inglesa.
-¿Cuál es el punto?
Inquirió Luka.
-Bueno, el mánager dijo que era hora de un descanso lejos de la fama, y que quizá Hogwarts nos daría la oportunidad de conocer nueva gente que no se relaciona mucho con este mundo, descansar de las canciones y aprender algo nuevo.
-¿Cuánto tiempo sería?
Preguntó Gakupo, que aún no estaba muy convencido.
-Pues… generalmente son 7 años, pero esta vez creo sólo será uno. ¿Podemos ir? ¡Por favor!
Rogaba Miku, los demás se miraron entre sí. Tal vez no era mala idea tomarse un descanso. Al fin y al cabo, estaban saliendo más Vocaloid, pero si se conocían sería mínimo gracias a Miku.
-De acuerdo.
Se rindió primero Rin y se acercó a Miku quien la abrazó con fuerza, Len, al no poder resistir lo que decía Rin, también se acercó y ellas lo abrazaron.
-Bueno, quisiera un descanso del yaoi en que tanto me involucran.
Decía Kaito con una gota en la cabeza. No le molestaba que siempre lo emparejaran con Len o Gakupo, pues él sabía que no era homosexual, pero quería descansar un rato de que siempre le preguntaran con quién de los dos tenía una relación.
-¡Vamos! ¡Hace tiempo quiero salir!
Comentó Meiko que esperaba una gran diversión allí.
-Bueno. No me quisiera quedar sola un año.
Se unió Luka.
-Iré.
Dijo Gakupo, que al lugar donde iba Luka, él también iba.
-¡Sí! ¡Entonces mañana debemos ir al callejón Diagon por nuestros útiles! ¡A empacar!
Gritó la diva.
-¿Y dónde nos quedaremos mientras estemos allí?
-En el caldero chorreante, ¿No?
Dijo Kaito.
-Sip.
Respondió Miku mientras se iba a su cuarto a empacar.
-¿Cómo sabes todo eso?
Preguntó Meiko.
-Leí los 2 libros que han salido… nunca creí que fuera verdad…
Confesó Kaito mientras se encogía de hombros, estar junto a Meiko lo ponía nervioso.
-¿Sólo han salido dos?
Preguntó Len.
-Sí. Dice la autora que serán siete… me gustaría conocerla para preguntarle cómo sabe tanto…
-Mejor dejemos esto de lado y vamos a empacar, Miku es capaz de alocarse y despertarnos a las cinco de la mañana para salir a las diez.
-Sí.
Concordaron todos y se fueron a empacar. Mañana sería un día largo.
