Hola, bueno acá les traigo otro fic, producto de leer muchas historias y películas de piratas con mucho cariño, espero que les guste
Por siempre un Pirata
1. Gusto en conocerte Kagome Higurashi
Esa noche iban a saquear el botín del puerto Sengoku, iba a ver una fiesta en la casa del conde Higurashi, donde solo iba gente importante, pero claro con tremenda fiesta, no iban a dejar pasar la oportunidad de llevarse ese gran botín
El capitán Taisho, un pirata tan ruin y malvado, buscado en todos los puertos, muy conocido, pero solo sus enemigos habían visto su cara, ni sus aliados habían podido verla ya que, cada ves que estaba en un puerto iba con un disfraz, desde algún conde o desde un simple mercader
Su mano derecha y ayudante Miroku, el mayormente lo ayudaba en todos sus asaltos y tomas de botín, el era el único aliado que había podido verle la cara, la leyenda decía que el capitán Taisho usaba una pañoleta en la cara porque en una batalla le desfiguraron la boca, otros decían que era un demonio que tenia horrible boca con unos grandes colmillos y los ocultaba a través de ese pañuelo que cubría su boca
Ya había llegado el día de la fiesta y el barco Goshimboku a cargo del pirata Taisho estaba desembarcando al otro lado del puerto Sengoku
- muy bien mi querida tripulación… -dijo el capitán Taisho- ya saben el plan, yo asistiré a la fiesta como el conde Taisho, por mientras, ustedes roban el botín de la casa, tienen que ser muy sigilosos, toda la casa esta llena de guardias… -dijo Taisho sacando un mapa y colocándolo en la arena- este es un mapa de la casa, tienen cinco entradas por lo que se dividirán en cinco grupos, pondrán inconcientes a los guardias, y entraran, robaran todo lo que se pueda y el gran botín, que se encuentra en uno de los salones de la casa, no se acerquen a la fiesta, el oro de ese productivo Sengoku, me lo traerán…
-si mi capitán!... –grito toda la tripulación al unísono, comenzando a entrar en esa ciudad
Taisho y Miroku comenzaron a caminar, iban a entrar en una taberna, alquilar un cuarto para poder cambiarse y así ir a la fiesta
-muy bien InuYasha… -dijo Miroku dándole unas palmadas en la espalda a su amigo y capitán- esta ves si nos esmeramos con el plan… todo va a salir a la perfección y conoceremos unas bellas jovencitas en la fiesta, a ver si te animas y aprovechas en pasar un rato con una…
-nada miroku… -dijo InuYasha sacándose esa pañoleta de la cara y mostrando completamente su rostro- como odio usar esta cosa, bueno solo quiero ir y llevarme el botín lo mas pronto posible…
Y así el Capitán y su secuaz llegaron a una cantina, alquilaron un cuarto, nadie los reconocía ya que InuYasha antes de llegar a un puerto, junto con Miroku se cambiaban de ropa y así podían pasar desapercibidos, ambos se arreglaron con ropas de gala, solo tenía que esperar el momento de la fiesta
Era el día de la fiesta, iban a conmemorar el XVI año de gobierno del conde Higurashi con una gran ceremonia, un baile elegante y de paso anunciar el matrimonio de la hija mayor, Kagome Higurashi, una joven de quince años, se iba a casar con un conde muy rico llamado Naraku, de treinta años
Kagome una joven alegre, entusiasta, un poco impetuosa, de muy buenos modales y buena familia, una joven muy hermosa, que tenía todo lo que quería, codiciada por muchos hombres, pero ella siempre tenía buenos principios, no importaba si su papa era el gobernador, ella siempre iba a ser una joven buena y bondadosa
- Señorita Kagome… vengo a vestirla para la ceremonia… -dijo una anciana mujer, sirvienta de esa gran mansión, y nana de Kagome
-Kaede… pasa- dijo Kagome un poco entusiasmada por la fiesta
-bueno acá su papá le manda un hermoso vestido y un hermoso juego de gargantilla y aretes…-dijo la anciana dulcemente
-gracias…-dijo Kagome- pero mi papá sabe que no me gusta que gaste mucho en vestidos tan caros…
-ya se eso señorita… -dijo la anciana tomando un cepillo de cabello y cepillando los azabaches cabellos de la joven- pero entiéndalo, desde la muerte de su adorada madre, el no tiene a otra mujer en su familia para atender y engreír…
-si lo se… -dijo Kagome recordando ese día, su vista se nublo un poco y dio una sonrisa triste, estaba sentada en una silla muy linda tallada y mirándose en el espejo- ¿y Souta ya se cambió? –pregunto Kagome por su pequeño hermano de nueve años
-si, el jovencito Souta ya esta listo…-dijo la anciana –muy bien ya termine de peinar su cabello ahora señorita a cambiarla, esta noche va a ser especial... –dijo la anciana con una sonrisa, Kagome se paro de la silla y miro a la anciana con una sonrisa y rolando los ojos- hoy anuncian su matrimonio con el conde Naraku…
-ya se Kaede… -dijo Kagome un poco cansada de que le recuerden a ese hombre- pero yo no lo amo, no le digo nada a mi papá porque el siempre hace cosas por mi, y se que a el le haría feliz que yo me case con el…-dijo Kagome desvistiéndose y siendo ayudada por su anciana nana
-pero no se preocupe… poco a poco se enamorara de ese hombre… -dijo la anciana ayudándola a vestirla
Sabía que esa noche iba a pasar algo muy especial…
Ya había llegado la hora de la fiesta, entrar a esa casa no fue difícil, lo vieron bien vestido con unos finos y costosos trajes, muy bien perfumado y con un excelente peinado…
La casa Higurashi era una casa con muchos lujos y comodidades, la fiesta se estaba desarrollando en un gran salón, donde había unos valiosos cuadros, InuYasha era un joven muy apuesto, con unos ojos dorados muy hermosos
El lugar estaba repleto de gente importante, condes y gobernadores, bellas damiselas, buena música…
-InuYasha… -dijo Miroku tratando de hablarle al joven… pero fue callado por este
-cállate Miroku… -dijo InuYasha manteniendo la postura- ya sabes… prohibido decir mi nombre, me debes llamar con el nombre del conde Taisho
-muy bien pero mira la ceremonia ya empezó… -dijo Miroku muy entusiasmado, iba a disfrutar la comida y el trago caro…
Era una bonita ceremonia, el gobernador Higurashi daba unas palabras de agradecimiento a todos los invitados y presentaba a su hija, la joven Kagome Higurashi, InuYasha se quedo impactado por su belleza, no podía creerlo pero era verdad, esa jovencita tenia una dulzura que te hechizaba…
-hey Miroku mira… -dijo InuYasha señalando con el dedo meñique de la mano izquierda a la jovencita que estaba en el centro del salón junto a su padre, Miroku miraba a otra dirección y después voltio a mirar donde esta observando su amigo- ¿no te parece la mujer mas hermosa que has visto en tu vida?... –dijo InuYasha embelezado por la belleza de la joven
-si InuYasha acá hay unos Ángeles del cielo… -dijo Miroku mirando a la joven, después volvió a mirar a una jovencita de cabello castaño que se encontraba en la mesa principal, por lo visto era amiga de la señorita Higurashi- a estas horas ya deben haber saqueado el botín –dijo recordándole a InuYasha que a las doce de la noche ya debían todos estar en el barco y marcharse
El baile comenzó e InuYasha noto como la jovencita Higurashi no había salido con nadie a bailar, aprovecho esa oportunidad
-Miroku tu bailas con la joven que esta con la señorita Kagome y yo bailo con ese lindo ángel… -dijo InuYasha parándose de su asiento y yendo a la mesa principal
InuYasha caminó con pasos seguros hacia donde la joven se encontraba, estaba vistiendo con un elegante traje negro que figuraba su bien formado cuerpo, se veía muy atractivo, y con unos guantes en la mano ya que en su mano derecha llevaba una cicatriz
-señorita Higurashi… -dijo InuYasha extendiendo la mano a Kagome- ¿me concedería esta pieza de baile? – dijo con una seductora sonrisa
-claro joven… -dijo Kagome con una suave y tierna voz
Salieron a bailar, por suerte InuYasha aparte de ser un buen capitán era un excelente bailarín…
-y dígame…- dijo Kagome con una sonrisa fijándose en los hermosos ojos dorados del joven- ¿cual es su nombre?
-lamento no poder responder a tal pregunta bella doncella… -dijo Inuyasha brindándole una tierna sonrisa, guau ese joven si que era todo un galán, muy atractivo- pero le puedo decir mi apellido, Taisho… soy el conde Taisho…
-vaya… al parecer es muy misterioso… -dijo Kagome con una risita, después le sonrió al joven que bailaba con ella…
-sabe señorita… usted es muy hermosa… tiene unos hermosos ojos… -dijo InuYasha dando una seductora sonrisa que hizo que el corazón de Kagome saliera unos latidos
-gracias joven Taisho… -dijo Kagome un poco ruborizada- y usted unos hermosos ojos…que encantan… -dijo perdiéndose en esas orbes doradas, que te sumergían y te hechizaban…
InuYasha la llevo a un rincón de la fiesta, la miro con cuidado, Kagome estaba muy ruborizada, InuYasha la miro detenidamente
-señorita Kagome… -dijo InuYasha muy caballerosamente- ¿me permitiría darle un beso? –dijo InuYasha recibiendo una sonrisa de la joven en afirmación
InuYasha tomo de la cintura a Kagome, con su mano derecha tomo la delicada cara de la joven y con su mano izquierda la atrajo hacia el, y dio un calido y tierno beso, muy suave y delicado, era el primer beso de la joven ya que esta nunca antes había tenido algún encuentro con un hombre que no sea una conversación, InuYasha sintió esa inexperiencia de la joven y no supo por que se alegro, un pirata alegrándose de que una joven ue jamás volvería a ver nunca antes aya besado, pero por lo menos se alegro de saber que era el primero, atrajo mas a la joven y profundizo un poco el beso, después de un instante se separo de ella
En ese instante Miroku llego al lado de InuYasha y le dijo unas palabras al oído, InuYasha tenso el rostro y miro a la joven que observaba intrigada
-lo siento señorita Higurashi pero tengo que marcharme -dijo InuYasha tomando la mano de la joven con su mano derecha y dándole un beso en sus nudillos, la joven tomo fuertemente la mano del joven y este al darse la vuelta y marcharse se le salió el guante de la mano, pero ya no podía regresar, la tripulación ya estaba en el barco con el botín y debían marcharse lo mas pronto posible, InuYasha a lo lejos dijo- espero volverme a encontrar con usted mi bella jovencita Higurashi… -y desapareció por uno de esos largos pasillos
-no puedo creerlo… -dijo Kagome, en ese instante su amiga Sango llego a su lado y observó el portón por donde se había retirado ese apuesto hombre con el nombre de Miroku- sango creo que me enamore por primera vez…
-Capitán… -dijo Miroku observando a InuYasha que miraba desde su navío la gran casa que estaba iluminada, ya con la pañoleta en su rostro- creo que se ha enamorado
-keh… no digas tonterías Miroku… -dijo InuYasha con una sonrisa triste- tu sabes, yo nunca me enamorare, soy un pirata, encanto a bellas mujeres, me robo los botines y mi vida es el mar, no tengo tiempo para romances….
El navío Goshimboku se alejo poco a poco del sengoku….
¿Les gusto?
Espero que si les aya gustado, bueno acá les dejo este fic, fruto de ver muchas películas de piratas y leer historias de eso
Bueno espero sus reviews…
Atte:
DarkAngelKag19
