Harry Potter y el Clan Del Lobo Negro
Capitulo I
Era un bello día como no había sido en varios meses, una suave brisa llenaba el ambiente con un suave olor a rosas. La calle estaba llena de ruidos por la multitud que se apresuraba, una joven parecía fuera de lugar, a diferencia de los demás, caminaba pausadamente en dirección a la estación del tren, poco antes de llegar un joven le cortó el paso -¿Debes partir ahora?- dijo él en tono suave ella se acercó y lo miró con sus profundos ojos azules -Si, prometo que esta noche te contaré todo- -¿Qué es tan importante que ni siquiera a mí puedes decírmelo?- Ella le dio un beso en la mejilla -Confía en mi, te veré esta noche en el lugar de siempre- Él se sentía inquieto, pero siempre había podido confiar en ella, la abrazó y le habló al oído. -Cuídate mucho- -Lo haré, no te preocupes- Ella lo besó nuevamente y se alejó de él.
Ya estaba oscureciendo cuando ella caminaba por el valle del Godríc, se dirigía con paso firme hacía una casa de estilo victoriano que se encontraba en lo profundo del bosque. Le faltaban pocos metros para llegar cuando oyó un grito que desgarró el aire. Instintivamente corrió hacia la puerta, nada la habría preparado para lo que vio, el cuerpo de un joven de cabello negro yacía sin vida en medio de la estancia, la expresión de terror que tenía en el rostro era indescriptible. Sin embargo, ella no tuvo tiempo de compadecerse de él, oyó los gritos de una mujer que provenían de algún lugar de la casa, los gritos eran claros -a Harry no por piedad- Un resplandor de color verde se reflejó en las paredes de la casa, la joven corrió hacía la fuente de aquel resplandor, la escena que vio la dejó sin habla, el cuerpo de una joven mujer estaba en el suelo cerca de la cuna de un niño, un hombre adulto se encontraba apuntando algo parecido a una varita de madera, ella se lanzó hacía adelante intentando proteger al niño pero era demasiado tarde, no supo que paso después, sólo oyó una fuerte explosión y un incesante dolor que le recorría el cuerpo al caer en el duro suelo. Pasaron varias horas antes de que ella despertara, tenía varias heridas en el cuerpo, le tomo varios minutos comprender en donde estaba y que había pasado, la primera luz de la mañana le ilumino el rostro, de sus labios salieron unas palabras que parecieron provenir de lo más profundo de su mente, palabras que no recordaría de nuevo -Harry esta a salvo en Privet Drive- Se levanto y regresó a casa.
Capitulo I
Era un bello día como no había sido en varios meses, una suave brisa llenaba el ambiente con un suave olor a rosas. La calle estaba llena de ruidos por la multitud que se apresuraba, una joven parecía fuera de lugar, a diferencia de los demás, caminaba pausadamente en dirección a la estación del tren, poco antes de llegar un joven le cortó el paso -¿Debes partir ahora?- dijo él en tono suave ella se acercó y lo miró con sus profundos ojos azules -Si, prometo que esta noche te contaré todo- -¿Qué es tan importante que ni siquiera a mí puedes decírmelo?- Ella le dio un beso en la mejilla -Confía en mi, te veré esta noche en el lugar de siempre- Él se sentía inquieto, pero siempre había podido confiar en ella, la abrazó y le habló al oído. -Cuídate mucho- -Lo haré, no te preocupes- Ella lo besó nuevamente y se alejó de él.
Ya estaba oscureciendo cuando ella caminaba por el valle del Godríc, se dirigía con paso firme hacía una casa de estilo victoriano que se encontraba en lo profundo del bosque. Le faltaban pocos metros para llegar cuando oyó un grito que desgarró el aire. Instintivamente corrió hacia la puerta, nada la habría preparado para lo que vio, el cuerpo de un joven de cabello negro yacía sin vida en medio de la estancia, la expresión de terror que tenía en el rostro era indescriptible. Sin embargo, ella no tuvo tiempo de compadecerse de él, oyó los gritos de una mujer que provenían de algún lugar de la casa, los gritos eran claros -a Harry no por piedad- Un resplandor de color verde se reflejó en las paredes de la casa, la joven corrió hacía la fuente de aquel resplandor, la escena que vio la dejó sin habla, el cuerpo de una joven mujer estaba en el suelo cerca de la cuna de un niño, un hombre adulto se encontraba apuntando algo parecido a una varita de madera, ella se lanzó hacía adelante intentando proteger al niño pero era demasiado tarde, no supo que paso después, sólo oyó una fuerte explosión y un incesante dolor que le recorría el cuerpo al caer en el duro suelo. Pasaron varias horas antes de que ella despertara, tenía varias heridas en el cuerpo, le tomo varios minutos comprender en donde estaba y que había pasado, la primera luz de la mañana le ilumino el rostro, de sus labios salieron unas palabras que parecieron provenir de lo más profundo de su mente, palabras que no recordaría de nuevo -Harry esta a salvo en Privet Drive- Se levanto y regresó a casa.
