La verdad, últimamente estoy pensando mucho lo que escribo, y eso no va con mi estilo.
Normalmente, pienso una cosa, me gusta, la escribo, la publico y que sea lo que mi mente quiera.
Pero últimamente, estaba más indecisa que nunca en iniciar mis historias, sé que pasé por un periodo bastante oscuro este año, pero quiero seguir dándoles lo mejor de mí a todos esos lectores que están siempre conmigo, en las buenas, en las malas y en los fandom al que vaya.
Es por eso, que voy a volver a mi viejo estilo, lo pensé, lo escribí y lo solté.
Eso es lo que verán aquí, les mencioné en mi pagina que iba a hacer una historia cómica sobre viajes en el tiempo y aquí esta.
Sé que al leer esto dirán, ¿Y la comedia?
¡Pues en los capítulos que vienen!
Porque mientras se me ocurría esto, la escena final del fic se hizo clara en mi mente...
¡Así que preparados!
Sirena Misty está de regreso~
¡Antes muerto que volverte a elegir!
~Prólogo~
Quizás aquella situación debería ser tan común entre ellos, que deberían tomársela con humor. Quizás aquella situación debería hacerlos reflexionar que los bosques y ellos dos solos, no compatibilizaban. Quizás aquella situación debería hacerlos trabajar en equipo para salir de ahí.
Pero no lo harían.
No, porque preferían siempre echarlo todo a perder en una pelea verbal trivial y estúpida. Porque preferían descalificarse en vez de pensar una solución. Porque a sus dieciocho años, quizás habían olvidado que las palabras se convierten en armas a medida que uno crece, y las que hace ocho años eran simple frases que quedaban en la nada, hoy eran tan filosas como para atravesarlos y lastimarlos.
—¡Cada día que pasa lamento más haber estado pescando en ese rio! —soltó la pelirroja de ojos verdes, cruzándose de brazo. Su cabello se movió con violencia para darle la espalda a su amigo, aquel joven de tez morena que había alzado ambas cejas oscuras en señal de sorpresa por las palabras pronunciadas.
—¿Ah sí? —pese a los pedidos de Pikachu desde el suelo, el muchacho también se cruzó de brazos— ¡Pues como nunca lamento el haberme quedado dormido! —aquellas palabras parecían ser escupidas con el más poderoso veneno de Arbok— ¡Lamento en el alma haber robado tu estúpida bicicleta que nos unió en esta amistad tóxica y ridícula!
Ahora fue turno de la chica de abrir los ojos en sorpresa por las palabras dichas por el joven. Tomó aire antes de enfrentarlo una vez más.
—¡Pues al parecer al fin estamos de acuerdo en algo! —exclamó dando un aplauso— ¡Porque de poder volver en el tiempo, te dejaría ahogar en el río!
—¡Yo pensaría mil veces antes de saltar al río!
En eso se miraron con rabia por unos segundos y ambos se dijeron al mismo tiempo:
«¡Si pudiéramos volver en el tiempo, prefiero morir antes de volverte a elegir en mi vida!»
Y con aquella frase dicha, y las lágrimas del roedor eléctrico que miraba a aquella pareja desde el suelo, una ráfaga golpeó todos los árboles a su alrededor, e incluso a ellos.
La voz del bosque había despertado antes sus palabras. Se miraron con miedo, y aún enojados, se protegieron del torbellino de aire que los envolvió.
Pero era tarde, el bosque había hablado…
Cuando la ráfaga de viento desapareció, lo único que quedaba en el lugar era un pobre y desconcertado Pokémon eléctrico, y su grito de angustia inundando el silencio del bosque.
