Disclaimer: Todos los personajes que les parezcan conocidos son propiedad de J.K Rowling =)
Espero que les agrade esta historia, sé que me voy por las ramas al escribir así que por favor téngame paciencia =)
Cuando el pequeño Scorpius de 11 años, con su pelo rubio y tez blanca como todos los Malfoy, vio a su padre saludar a otra familia, simplemente se giro para veros, y fui ahí la primera vez que vio a la niña pelirroja y pecosa, ella conversaba con su padre y por un segundo miró hacia donde estaban y se vieron. Ninguno de los dos entendía a cabalidad porque sus padres se empeñaban es decirles que no se acercaran, siendo que ellos no veían nada malo en el otro niño.
Al despedirse de sus padres Rose subió al tren en busca del compartimiento donde se encontraban sus primos, si bien sabia que para su tranquilidad no le haría muy bien estar con James, pero al pasar por uno de ellos, vio al chico que le había mostrado su padre en el andén, estaba sólo, mirando por la ventana y jugueteando distraídamente con la tapa de la revista de quidditch que llevaba, Rose sin pensarlo mucho llegó y entro al compartimiento.
-Hola! Soy Rose, me puedo sentar aquí?
-Hola! –dada la entrada un poco sorpresiva, Scorpius mira rápidamente hacia la puerta, viendo a una persona que no esperaba - Ehh, si no hay problema, soy Scorpius - el chico que recordaba que su padre le había dicho que no le convenía juntarse con ella ni con el otro chico que era su primo, no sabía muy bien qué hacer con ella ahí.
-Al parecer mi papá no quiere que hable contigo, pero como no me dijo porque quiero saber.
-No lo sé, mi padre me dijo lo mismo pero no me dio razones - en ese momento en la puerta del compartimento apareció el primo de ella, haciendo que los dos miraran nuevamente hace allá, el chico que había llegado los miró un poco extrañado, pero de igual manera entró y se sentó al lado de su prima.
-Hola, soy Albus, y tú?
-Scorpius - ambos se sonrieron y Albus dirigió la mirada hacia Rose
-Me escapé del donde estaba James, ha estado todo el rato contando historias terribles sobre la selección, me estaba poniendo nervioso, creo que lo mejor será que nos quedemos no volvamos allá - en ese momento volvió a mirar a Scorpius - ¿En qué casa quieres quedar?
-Toda mi familia ha estado en Slytherin así que también quiero ir allá. ¿Y ustedes?
-Gryffindor, aunque según lo que dicen yo puedo quedar en Slytherin también, pero con toda la familia en Gryffindor sería raro - empezó a relatar Al, que ya al ver que el otro niño era amable empezó a parlotear con más naturalidad - aunque según mi padre, si uno realmente quiere ir a otra casa lo que tiene que hacer es pedírselo al Sombrero Seleccionador, mmm, aunque realmente no sé cómo es eso, James dijo que el sombrero empieza a sacar cosas de tu cabeza y que duele montones y que dependiendo de cuanto duela y como lo tomas es a donde te mandan - comento esto bastante intranquilo, y este sentimiento se extendió a los otros dos ocupantes que se miraron con caras de no estar muy seguros de querer llegar luego a su destino.
- No creo que sea cierto, después de todo James ha estado tratando de asustarnos desde que empezaron las vacaciones - dijo Rose, aunque no totalmente segura de sus propias palabras.
En ese momento apareció en el pasillo el carrito de los dulces, y los 3 niños se apuraron a la puerta para comprar sus favoritos, para luego ponerse hablar de diferentes cosas siendo lo principal el quidditch, dado que Rose con Albus no podían creer que Scor fuera seguidor de los Chudley Cannons, como el padre de la primera, y Scorpius se defendía diciendo que ellos tenían el mejor cazador que se hubiera visto, no así el buscador.
Al llegar al castillo los de primero fueron conducidos a través del lago en los botes, llegando más tarde que el resto al Gran Comedor, afuera de este se amontonaban todos ellos esperando para entrar y ser enviados a sus respectivas casas. Scorpius si bien no quería decepcionar a su familia yendo a parar a otra casa que no fuera Slytherin, tampoco quería quedar separado de sus nuevos amigos, que según lo que habían dicho querían quedar en Gryffindor, por lo que estaba nervioso y moviéndose de un lado para otro tratando de ver hacia más adelante, en eso, siente que le tocan la mano y ve a su lado a Rose
-No importa en qué casa quedes, igual podemos seguir hablando y tendremos clases juntos - y con eso le sonrió. Abrieron las puertas y todos siguieron a la profesora Dashwood que fue la encargada de darles la bienvenida. En la parte de adelante se veía sobre un taburete el Sombrero Seleccionador y la profesora McGonagall al lado de este con un pergamino en la mano.
-Bienvenidos a Hogwards, este será su hogar por los próximos 7 años, y esperemos que todos ustedes independiente de la casa en la que queden se lleven muy bien. Ahora los llamare por orden y ustedes se sentaran en el taburete para saber a qué casa pertenecerán y luego pasan a sentarse en la mesa correspondiente de la misma. Ahora la primera persona, Abott - con eso una chica castaña paso a delante y al sentarse le pusieron el sombrero y este grito rápidamente Ravenclaw, dado que la niña no hizo ningún gesto de dolor ni espanto, Albus, Rose y Scorpius se miraron y sonrieron aliviados, para ahora seguir esperando su turno mucho más tranquilos.
Así pasaron varios niños hasta que la profesora llegó a Albus, en el salón rápidamente se escucharon unos susurros, para luego mirar expectantes que iba a suceder, al ponerle el sombrero a Al, este no proclamó tan rápido como antes la casa, y cuando lo hizo grito
- Slytherin! - inmediatamente el gran comedor se lleno de gente hablando y otras gritando, especialmente la casa de Gryffindor en donde la familia de Al, gritaba su desacuerdo, este ruborizado y nervioso, se bajo rápidamente del piso y se dirigió a paso rápido a la mesa de las serpientes. Mientras que Scor, si bien lamentaba que Al no quedara en la casas que quería, le aliviaba el saber que si quedaba ahí ya no estaría solo, dado que desde la Batalla de Hogwarts, su familia no era bien vista en el mundo mágico.
- Scorpius Malfoy - Dijo la profesora McGonagall y Scor se enderezó y saco a relucir toda la altivez Malfoy que tenía en sus genes, aunque internamente agradeció el pequeño apretón en la mano que le dio Rose, como dándole ánimos, y camino con paso decidido a donde estaba la profesora, se subió y sintió como le pusieron el sombrero, el cual al poco tiempo grito
-Slytherin!
Rose al ver que a su primer amigo en Hogwarts lo mandaban también a Slytherin se le hizo un pequeño nudo en el estomago, puesto que como a Albus lo habían mandado allá, si no le tocaba en la misma casa, no iba a tener ningún conocido en su mismo año en las otras casas, si bien no era tímida, no le agradaba demasiado llegar a una parte completamente nueva sin alguien con quien hablar.
Dado que su apellido es uno de los últimos, le tocó esperar un rato más con los nervios de punta. Cuando al fin la llamaron con paso vacilante fue y se sentó, al mirar hacia la mesa verde, vio como Al y Scorpius le sonreían y les devolvió una pequeña sonrisa, cuando sintió el sombrero escucho una voz que le decía
-Mmmm... Interesante, mucha inteligencia, pero también valor, es que casa debería ponerte, en Ravenclaw desarrollarías tu intelecto, pero en Gryffindor tu personalidad, que debería hacer?
Rose al escuchar esto, pregunto - Y Slytherin?
-Slytherin? mmmm... no lo creo, no calzas con Slytherin estarías fuera de lugar, estarías mejor en - y para todos gritó - Ravenclaw!
Muchas Gracias por leer, por favor si les gusta o no, lo que sea dejen un review!
Gracias =D
