¡Hola bellas personitas! Verán, actualmente estoy en unas largas, verdaderamente largas, vacaciones escolares. Así que me he puesto con todo en esto del fanfiction, el cual ya tenía bastante abandonado, y esta es una idea que me surgió hace mucho, pero mucho, tiempo. Subiré tres pequeñas historias con parejitas que si bien si son conocidas no son las "normales" (por decirlo de algún modo), cada una podrá tener una extensión de no más de mil palabras y estará basada en una canción. Ya con nada más que agregar, espero y les guste.

Summer Love

(Miyako y Butch)

Debía ser verdaderamente una tonta para haberme prestado para esto. Pero vaya que lo había disfrutado. Ser la niña buena me encanta, no tengo que esforzarme ni un poquito en portarme bien y creo firmemente que el mundo sería un lugar mucho mejor si todo el mundo se comportara como debe. Sin embargo, y debo admitirlo, portarte un poquito mal de vez en cuando es bastante divertido. Sobre todo si es al lado de un chico tan insanamente atractivo como Butch.

—Oye…

Él me manda callar con un gesto de su mano.

—Ni se te ocurra decirlo.

Enarco una ceja.

—No sabes que planeaba decir.

—Claro que sí— me contradice—. Que me amas, que esto es más fuerte que la distancia, que lo superaremos juntos y tendremos una linda y romántica relación a distancia.

Abro la boca para negarlo, pero inmediatamente la cierro. Vaya que sabía que planeaba decir. Cierro mi maleta celeste extra grande y camino hasta él. Cuelgo mis brazos alrededor de su cuello con dulzura y recargo mi cabeza sobre su pecho, su camiseta verde apenas y puede cubrir un poco sus tonificados músculos.

—Llevo tres años siendo el sexi salvavidas de la playa, eso parece gustarle a las extranjeras. El año pasado una pelirroja, el primero una…— traga saliva, sé que le duele recordarla, y eso me pone un poquito celosa— pelinegra. Ya estoy cansado de esto, estoy cansado de esperar llamadas que nunca llegaran, de hablar de vez en cuando por Facebook hasta que un día suben una foto con su nuevo novio y nunca me vuelven a hablar. Así que no me hagas falsas promesas que no planeas cumplir, mejor limitémonos a disfrutar nuestro último día juntos.

Quiero prometerle que yo no seré como ellas, pero la verdad no estoy segura de poder cumplirle. Así que opto por mejor hacer lo que él me pide, y pasar un buen día junto, así que me paro de puntitas y lo beso.

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Salimos de mi habitación de hotel tomados de la mano como si fuéramos una parejita feliz con mucho futuro por delante. Mi abuelita está en el jardín jugando damas chinas con una señora de aspecto gruñón. Le digo que daré un paseo con mi amigo, aunque creo que ella sospecha que entre Butch y yo haya algo más, y prometo estar de regreso a tiempo. Ella me dice que no hay problema, pero me advierte que debo ser puntual o nos dejara el avión.

Planeo serlo, ni mi apuesto salvavidas sería capaz de hacer que le falle a mi abuela.

Vamos al lugar donde nos conocimos, la playa, muy cerca de su caseta. Nuestra historia de amor empezó de una forma mucho más aburrida que sus dos anteriores. Las cuales incluyen a él salvando al hermano menor de la pelinegra, y a la mismísima pelirroja que se había distraído viendo a otros hombres. En mi caso él simplemente se me hizo guapo, así que me senté muy cerca de su silla hasta que se acercó a preguntarme si una vez acabara su turno podíamos ir por un helado (el mejor helado de mi vida).

Después de eso pasamos cada día de este caluroso mes juntos. Fuimos amantes antes que amigos, sin embargo la confianza fue creciendo entre nosotros hasta llegar el punto de que él me hablo de sus dos anteriores amores de verano, y yo del guapo chico de casa del que llevo enamorada desde que era una niña. Creo que desde ese momento supimos que esto terminaría con las vacaciones.

Caminamos por la playa muy cerca uno del otro, a pesar del calor que hace que nuestros cuerpos estén sudorosos, sin apenas comentar un par de cosas. Me gusta estar así con él, es relajante y me siento segura. Me pregunto cómo se sentirá él conmigo.

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Me gusta Miyako, mierda, ella es tan bonita. Y hoy se va. Probablemente jamás regresara así que debería haberle pedido que nos quedáramos en la habitación del hotel o llevarla a esa poco explorada playa donde lo hicimos por primera vez. Sin embargo prefiero llevarla al lugar de nuestra primera cita, siento que es el lugar perfecto para darle un buen final a nuestra historia.

Pido un helado de vainilla para ella y uno de chocolate para mí, como la primera vez. Antes de ir a sentarme a su lado en la mesa que ha elegido, me detengo un momento a observarla. Nunca imagine estar con una chica como ella, tan tierna, tan buena.

Ella cree que no lo sé. Piensa que en verdad me he creído su farsa de chica provocativa y sexi, pero vi cómo se le encendieron las mejillas cuando logro su objetivo y me acerque a hablarle. Y ninguna chica acostumbrada a tener aventuras me hubiera presentado a su abuelita.

Entonces ella mira en mi dirección y me sonríe, haciendo que sus grandes ojos azules se iluminen. Y sé, que cuando el día sea gris, podre contar con este recuerdo para alegrar mi día.

Camino hasta ella y le doy su helado, que está en vaso mientras que el mío está en cono, soy un firme creyente de que si puedo comerme el embace no tengo porque pedir uno desechable.

— ¿Qué tanto mirabas? —me pregunta con una risita.

La agarro por la barbilla y le sonrío sugestivamente.

— Solo trataba de memorizar tú rostro, tú sabes, para mis noches de soledad.

Su sonrojo es tan notorio que no puedo evitar carcajearme. Ella me dice que soy cruel y me da un golpecito en el brazo, yo le robo un beso.

— No puedo creer que este sea nuestro último día juntos— me confiesa con un suspiro.

— Yo tampoco.

Nos comemos el helado en silencio, simplemente disfrutando de nuestra compañía. Cuando terminamos me pongo de pie y le ofrezco uno de mis brazos.

— Vamos princesa, tu carruaje te espera.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado ¿? En fin, espero que les haya gustado. Seré honesta y les diré que de las tres parejas de las que pienso escribir esta es la que menos me gusta, sin embargo estoy satisfecha con el resultado. Sería muy amable de su parte si me dejan un lindo Review.

Los quiere: yo.