N/A: Neocolai no es dueño de X-Men ni de nada relacionado a la franquicia.
N/T: La historia no es de mi propiedad ni autoria, la original puede ser encontrada en el perfil de Neocolai.
Erik estaba un poco sorprendido de ver al niño colgando de una silla, su pierna derecha golpeando a un lado mientras despedazaba metódicamente la envoltura de un twinkie. Él ya había visto antes esa mueca melancólica en el bribón, pero siempre es un borroso Estoy infeliz mira que tan infeliz soy mientras asalto el refrigerador y levanto la mitad de la habitación y te miro como si me lastimaras. Esta clase de muecas eran demasiado lentas para el ajetreo mental del niño.
"¿Te está molestando tu pierna?" Erik intentó simpatizar.
Resentidos ojos marrones lo recorrieron antes de dejar de destrozar la envoltura. "Estoy bien."
"Él es tu problema sabes," Erik llamó a Charles mentalmente. A pesar de ello, se sentó en la silla frente a Peter y observó los trozos de envoltura en el suelo.
"¿Qué te está molestando, Niño?" (No es que estuviera preocupado. Es sólo que sabía cuando el diablillo mentía.)
Descansando su cabeza en el reposabrazos, Peter dejó que sus brazos se extendieran a un lado y suspiró. "¿Tu sabes... cómo es cuando... cuando intentas decirle algo a alguien y ellos simplemente no escuchan?"
¿Así como Charles y la mayoría de los X-Men? Erik asintió.
Peter se mofó miserablemente. "Bueno... le di la tarjeta a mi papá. Él le dio un vistazo más o menos. Como si ni siquiera le importara."
"¿Sientes que has perdido tu tiempo?" Erik acertó. Nunca había tenido que consolar a un familiar. El perderlos parecía lo que el destino le tenía deparado.
"Creo que simplemente no lo capta," el niño dijo. "He intentado con una tarjeta; he intentado todo. Siempre parece fallar en el último minuto."
"Las tarjetas puedes ser confusas," Erik declaró. "¿Has intentado decírselo cara a cara?" Algunos hombres eran demasiado estúpidos.
Quicksilver parloteo una respuesta inentendible.
Aclarando su garganta, Erik se cruzó de brazos. "Así que déjame comprender esto: Tu padre no sabe que dejó un hijo atrás, y tu estas muy inquieto como para decírselo de frente."
"Creo que sí..." Quicksilver se desconcentró. Parecía desesperanzado, como un pajarillo intentado volar de regreso a la primera rama. "¿Qué harías tú?"
Magneto se encogió de brazos indiferentemente. "Usaste a En Sabah Nur como saco de boxeo. Seguro encontrarás la forma."