Capitulo 1
*La huella de tu amor*
Estoy recargada en la barandilla de la popa del barco, mi mirada perdida en el rastro del agua, no sé cuánto tiempo llevo aquí, perdida en mis pensamientos, mirando el agua, ahora hay reflejos de un rojo atardecer no estaba en mis planes viajar, creí que nunca volvería a Escocia, ni en mis más remotos pensamientos me atreví a pensarlo, no por qué no quisiera hacerlo es por el dolor que conlleva el recordar, uno de los mejores años de mi vida a tu lado corriendo en aquellos bellos valles de Escocia yo cerrando los ojos pensando que me besarias nuevamente, y lo que hiciste fue besar mi frente cuando moría porque besaras mis labios nuevamente, si lo hubieras hecho no te hubiera rechazado, sentados frente a la chimenea sin hablar sin decir nada, diciéndonos todo en el lenguaje de nuestras almas, me duelen mucho estos recuerdos por eso los he aislado en algún lugar de mi mente, eres como la estela de este camino, es imposible que no haya rastros de ti en mi vida; hoy voy rumbo a ese lugar y aunque no quiera, tengo que enfrentarme a los recuerdos a mis temores y a este dolor que lejos de dejar de sentirlo, aqui esta mas presente que nunca.
Han pasado más de seis años sin saber de ti, cinco del fallecimiento de Susana, por un instante pensé que me buscarías ó tal vez tendría una carta tuya tristemente no fue así, ni lo será, irónico curó las heridas de mis pacientes y no puedo curar la mías, estas son internas nadie las puede ver se que sangran y duelen desde hace más de seis años, ¡a quien quieres engañar! Candy White Andrew. La huella de tu amor está más presente que nunca en mi alma, marcaste mi corazón.
-Te estaba buscando Candy, ¿que haces aqui? Albert y yo te estuvimos esperando para comer.
-Lo siento mucho Archie se me fue el tiempo sin darme cuenta.
-¿Estas bien? te he notado rara.
-No es nada, estoy bien Archie no te preocupes, ¡me siento triste!
-Te entiendo estos últimos años tú la tía abuela se hicieron muy unidas.
-Si ella cambio mucho conmigo después de una tarde que ella platicara con la señorita Pony y la hermana María, nunca sabré que fue lo que hablaron aquella vez, ahora ya no está con nosotros ¡la extraño tanto!
-Te entiendo para Albert, y yo a sido como nuestra madre; no, nos pongamos tristes Candy, a ella no le gustaría estamos haciendo su última voluntad; este viaje, y ese regalo que te dejó, me pregunto ¿qué será?
-Estoy igual que tú, me sorprendí tanto cuando leyeron el testamento, escuchar que ella me dejó todas sus joyas, y en especial esta cadena con una llave de oro pense que solo era un dije, cuando estaba falleciendo me hizo prometerle que la tendría en mi cuello y llegado a Escocia habría una respuesta para mi del ¿por qué? de esta llave, ella mencionó que con ella debía abrir un cofre, le pregunté entre lágrimas que era lo que había en él, solo respodio -sera una hermosa sorpresa para ti.
-Muero por saber ¿qué será? nunca he tenido paciencia y la tía abuela se esta burlando de mí en donde este.
-¡Ya lo creó Candy!
-No te burles de mi Archie, pero bueno cambiando de tema ¿adonde has dejado a mi hermoso sobrino?
-Candy, has perdido la noción del tiempo ya es hora de dormir para él, esta con con su nanny Mary.
-¡Oh lo siento! es verdad, no se ni que hora es, mi pequeño Stear ya debe estar soñando con caballeros y dragones le dije que esta noche le contaría un cuento, ese pequeñín estará muy enojado conmigo mañana.
-Eso es lo que él dice, pero la única persona a la que le perdona todo es a ti Candy.
-Lo sé, lo sé, soy su tía consentida, que le vamos hacer no te pongas celoso.
-Jamas estaria celoso de ti gatita, es solo que tengo miedo, cuando tú te cases o encuentres el amor te iras y formaras una família no se si el lo soportara o como reaccionara, eres como una madre para él, solo conoce a su mamá por fotos.
-Lo siento Archie, no quise traer tristes recuerdos sobre lo ocurrido con Annie.
-Estoy bien y en paz, ella fallecio en mis brazos pero feliz sabiendo que a nuestro hijo no le paso nada, que había nacido sano y era un hermoso varón.
-Annie siempre fue muy delicada desde niña, más frágil en salud es tan triste que no resistiera el parto pero nos dejó el regalo más hermoso que puede existir, no te preocupes por mi siempre estaré ahí para él, es mi ahijado aunque me casara nunca dejaré de estar al pendiente de él. Más bien me preocupas tú Archie.
-Yoooo! ¿Por qué te preocupo?
- Creo que cinco años es suficiente luto, abre tu corazón Archie permítete amar, a mi hermana le gustaría que estuvieras con una buena mujer que te ame y ame a Stear.
-Lo se, algún día llegará no me cierro a las posibilidades es solo que quiero que mi corazón me lo diga. Pero mira ¿quien? me esta dando consejos de amor la que vive de recuerdos y añoranzas con ese idiota actorcillo, no sé ¿por qué no te busco? perdóna Candy, que te hable así tu crees que nos engañas a mi y Albert pero te conocemos tan bien, eres nuestra hermana, sabemos que en todos estos años no lo has olvidado hemos visto como miras los diarios con las noticias de el, recortas sus fotos; se que a diferencia de mi el esta vivo, y eres tan fiel a su recuerdo por eso lo desprecio, te hace sufrir a pesar de que ya son seis años, ¡ese maldito...!
-Archie no es como tu piensas, esta separación fue por mutuo acuerdo yo lo deje aquella noche de invierno en ese hospital de New York el insistió en llevarme a la estación de tren, no lo deje, él corrió abrazarme en aquellas escaleras pude sentir sus lágrimas caer, sufrió tanto o mas que yo,acaso debió haberme buscado después de la muerte de Susana, es algo muy egoísta pensarlo, él es feliz, soy feliz por él, a diferencia tuya y de Annie, yo sé que esta en algun lugar hace lo que siempre tanto amo, así que no lo odies por favor nunca me había sincerado, hoy lo hago por qué ese corazón tuyo no debe tener odio por nadie y quiero que me comprendas.
-¡Perdóname! Candy, gracias por confiar en mi.
-Tienes razón en algo, es el de seguir adelante y tratar de enamorarme, pero es que con Terrence se fue una parte de mí, no soy ni seré la misma, no se si seré capaz de amar hay personas que dejan huellas en nuestra vidas él es una de ellas; con nuestra separación él se llevó una parte de mi, se que Annie dejó esa huella en ti.
-Tienes razón Candy, hoy te puedo comprender de una manera distinta gracias por abrir tu corazón a mi, sobre tus sentimientos y como miras las cosas, pero bueno vayamos a cenar no creo que tú, Candy White Andrew se vaya a la cama sin cenar.
-¡Archie!
Candy y Archie se dirigieron al comedor del trasatlántico, era una noche donde comenzaba hacerse presente la niebla.
-Hasta que llegan! -dijo Albert.
-¡Lo sentimos! -mencionó la rubia.
-No se preocupen cenemos, sabia que no dejarias de venir pequeña, ese estómago tuyo no resistiría, sin dos comidas al dia.
-¡Albert!
-Eres una pequeña tragonsita -rieron los tres, así transcurrió la cena.
-Albert menciono:
-Ahora que lleguemos a Londres yo estaré un par de semanas ahí, tengo que arreglar asuntos de la familia, George se quedara conmigo y ustedes dos viajarán a Escocia cuando los alcance, créanme me dedicaré solo a ustedes disfrutaremos unas hermosas vacaciones, Candy, te será entregado lo que la tía Abuela te dejo disfruten de la Villa en Escocia consientan mucho a Stear. Y Candy planeo llevarte una sorpresa se que seras muy feliz cuando sepas qué es.
-Bueno ustedes planean volverme loca con eso de tener que esperar por sorpresas, la paciencia no es mi virtud, Albert, ¡anda dime que es!
-lo siento pequeña dejaría de llamarse sorpresa
-¡ashhhhh! -rieron de ella ambos
-Me despido -dijo Candy-. Estoy cansada nos vemos mañana en el desayuno.
Se pusieron de pie ambos y la despidieron -descansa Candy.
-Yo pienso ir a caminar un rato Albert.
-¿todo bien Archie?
-Necesito un tiempo a solas, con mi hijo apenas puedo pensar tu lo conoces es imparable, aprovechó este tiempo para mi, me hace bien tengo cosas en que pensar, Candy me hizo meditar en muchas cosas
-Te entiendo Archie, no tienes que explicarme nada, anda ve nos vemos mañana.
Archie caminaba por la cubierta del barco
-no se mira nada vaya noche para querer caminar
se recargo en la barandilla del barco y hablo
-¡Anie! así como está noche dónde no miro nada, hay momentos en los que me siento de la misma manera, ¡te extraño tanto! el primer año de casados fue algo maravilloso después tú embarazo compartir tus antojos, tus risas, tus lagrimas eras mas llorona de lo normal, si no tuviera a Stear no se que hubiera sido de mi querida Annie, se que debo seguir adelante como dice Candy, y no es que en estos cuatro años no haya conocido a alguien, muchas de ellas hermosas mujeres es solo que quiero sentir un amor verdadero, ese que haga latir mi corazón tal vez sea demasiado tonto en la forma que pienso, se que ahi donde estes me comprendes y que además esa mujer ame a nuestro hijo, es mucho pedir; en el lugar donde estés, ¡ayúdame Annie! y si no está diseñado para mi el amor nuevamente quiero ser Feliz ¡por favor! mi hermosa Annie, ¡ayudame!
Rodaban lágrimas del rostro de Archie cuando de repente alguien chocó contra él haciendolo caer al piso.
-¡Oh! discúlpame -dijo la voz de una señorita.
Con el choque ella le extendió la mano para ayudarlo a levantarse, iba a pronunciar palabra cuando de repente se escucharon los gritos de alguien.
¡Sandra! ¡Sandra! ¡Sandra!
Ella lo jalo de la mano y entre el espacio de los botes salvavidas se metieron quedando tan juntos que ambos sentían su aliento, ella respiraba agitada y estaban tan pegados, el podía sentir el pecho de la chica moverse, el hombre que venía detrás de ella no podía verla, la neblina era tan densa que no permitía la visión.
-¡Sandra!, muchachita deja que te encuentre ya veras ¡tendras un castigo ejemplar!
Archie iba hablar cuando ella lo beso para silenciarlo, cuando escuchó que los pasos se alejaban se separó de el.
-¡perdoname! no quise hacerlo es solo que me delatarias, no podía permitir que mi padre me encontrara.
Archie la miraba con ojos de asombro y ese beso, lejos de incomodar le hizo sentir cosas raras.
-Bueno debo irme, otra vez gracias
Le dio un beso en la mejilla y corrió.
-¿Qué fue eso?
Se preguntó Archie, tocaba su labios y lo único que atinó a decir fue
-¡Sandra! así te llamas.
A la mañana siguiente todos desayunaban Albert, Candy, Mary, Stear menos Archie no pudo dormir en toda la noche el encuentro con cierta dama hizo que no pegara el ojo y logró conciliar el sueño hasta altas horas de la mañana que prefirió quedarse dormido, que ir al desayuno.
En el comedor del barco un chiquillo enojado decía.
-¡Tía Candy no sabes cumplir promesas! me dejaste plantado prometiste leer para mi.
-Perdoname Stear te prometo que hoy serán dos cuentos que te parece.
extendió su mano Stear hacia Candy y dijo:
-Trato hecho, eres una Andrew y los Andrew no rompen tratos así dice papá
Albert, río y dijo:
-¡ay! pequeño serás un gran hombre de negocio.
-Claro que si sere como papá -decía con su dulce vocecita.
Despues del desayuno Stear empezo a estar inquieto.
-Quieres dar un paseo -pregunto Mary a Stear.
-Si -respondió.
Se alejaron de la mesa
-Candy se que no es mi costumbre preguntar, ¿de qué hablaron? tu y Archie, lo note muy raro anoche, hoy no se levantó para desayunar.
-No es un secreto Albert, solo nos sinceramos sobre nuestros sentimientos yo por Terrence y el por Anie nos dijimos que debemos tratar de darle oportunidad a nuestros corazones adoloridos y seguir adelante, le dije que me gustaría verlo con alguien que lo ame a él y a Stear.
-Entiendo removieron heridas, es bueno ojala de verdad pueda pronto verlos a los dos ser felices.
-Candy, creo que tú y Archie van a Londres y Escocia por que es tiempo de cerrar ciclos y empezar nuevos es hora de que sus heridas sean sanadas, no solo para ti es difícil, en este viaje a Escocia pequeña para el tambien es doloroso hay recuerdos con su hermano Stear fue cuando su noviazgo con Annie, se hizo más fuerte.
-Es verdad soy tan egoísta en pensar sólo en mi dolor, cuando el debe estar sufriendo tanto, será como tú dices es tiempo de empezar un nuevo ciclo en nuestras vidas.
Así sería no sólo para Archie, Candy hasta para mismo Albert, sería el tiempo de que personas dejaran nuevas huellas en sus vidas y corazones.
-Albert ojalá que para ti pronto se abra un nuevo ciclo en el amor -la rubia le guiño el ojo-. Solo te la pasas trabajando y no le das espacio al amor, somos unos solterones Albert, y añadió-: necesito a una abuelita dijo en burla.
-¡Ay! Candy que cosas dices, no me cierro al amor pero no cualquier mujer esta dispuesta a compartir su tiempo, ellas quieren toda la atención y para un hombre como yo eso es difícil, si hubiera una mujer que ame de la manera que soy con todas mis responsabilidades que le gustarán las finanzas y negocios, no una mujer convencional que solo quiera estar en casa bordando oh esperando por mi, sabes como soy yo, quiero alguien que no le importe el qué dirá de esta sociedad, que si el dia de mañana deseo ir a la aventura ella se atreva a ir conmigo si hay una mujer así sería el hombre más feliz, y como se que esa mujer de mis pensamientos no existe supongo tendré que quedarme solo.
-No digas eso claro que hay una hermosa mujer para ti, solo que no te enfrasques tanto en el trabajo abre tus ojos, tal vez esté más cerca de lo que piensas.
-Bueno mi querido Albert, voy a caminar con el pequeño Stear, nos vemos mas tarde.
Cuando Candy buscaba entre los pasajeros, a Stear y Mary pudo ver al Capitán del barco para su asombro era el capitán Nive aquel que la llevara en esa barco de carga de regreso a América.
-¡Hola! capitán Nive.
-¡Candy! que gusto volver a verte, ¡que hermosa estas! eres toda una dama, nada que ver con la polizonte de coletas que lleve hace varios años en el Gaviota.
-Ni me lo recuerde, ahora lo pienso no se como me atreví pero gracias a Dios me puso personas como usted en mi camino, tan buenas.
-¿como es qué está usted aquí?
-el Capitán anterior de este barco se jubiló, el es mi amigo me recomendó para el puesto y yo gustoso acepte, podría tener a Sandra conmigo en los viajes, sería menos el tiempo que tendría de estar sola
-¡Que bien! ¿dónde está ella?
-es lo mismo que quisiera saber anoche se enojo mucho conmigo por decirle que esta en epoca casadera, cada pretendiente que a tenido lo rechaza no se ¿por qué?
-bueno tal vez no ha llegado el indicado, no se preocupe
-Candy se que es abusar de tu confianza y te acabo de encontrar me gustaria mucho que hablaras con ella, tal vez contigo por ser mujer se sincere necesita de una amiga
-¡Claro capitán! en lo que pueda ayudar.
-Mira ahí viene disimula.
-¡Hola! Sandra que gusto verte.
La rubia la abrazo con mucho afecto.
- ¡Igualmente Candy!
-Le estaba preguntado a tu papa ¿donde podía encontrarte?, quería invitarte a almorzar con mi familia.
-¡Claro!, Candy será un placer.
-Bueno pero falta un tiempo para el almuerzo qué te parece si caminamos te quiero presentar a mi sobrino.
Llegaron a donde estaba el niño, muy entretenido con un barco de juguete las miro y pregunto.
-¿Quién es ella tia?
-Es una buena amiga se incorporó el niño y con una voz dulce le dijo:
-Mucho gusto bella dama le tomó su mano y beso su dorso.
-Tu si que eres todo un pequeño caballerito.
-Es igualito a su papá -dijo la rubia.
Y aunque físicamente se parecía más a su madre era de cabello negro y ojos azules en lo galante y caballeroso era igual a su papá, siempre lo imitaba en todo lo que el hacia.
-Me imaginó que tú mamá debe ser muy hermosa.
-No tengo mamá ella está en el cielo con el tío Stear -se entristecio.
-Quieres saber algo mi mamá también está en el cielo deben ser buenas amigas quieres que te cuente un secreto que me dijo papá cuando mamá se fue al cielo.
-¡Si!
-Cuando mires al cielo y veas la estrella más brillante, esa es tu mamá diciéndote que te ama, no importa en que lugar estes asi que de ahora en adelante mira las estrellas y cuando veas una estrella fugaz pide un deseo.
-¡Escuchaste tía Candy! tengo que contarle a papá.
Mary corrió tras el pequeño
-Gracias por decirle a Stear, esa hermosa historia su mamá era mi hermana se llamaba Annie.
-¡Lo siento Candy! lo entiendo yo de igual manera mamá murió, cuando nací y aunque papá me dio todo, hubo un tiempo que no estuvo conmigo consiguió este trabajo por mi, para estar más tiempo juntos, pero ahora está empercinado en que debo buscar marido ¡no quiero! quiero sentir amor verdadero, y también no lo quiero dejar sólo, se aferra que use estos vestidos, como extraño poder usar pantalón es lo único que extraño de mi época cuando te conocí lo recuerdas.
-Estoy de acuerdo contigo estos vestidos son insoportables -rieron las dos.
-Referente al amor, yo misma he vivido con una añoranza hace más de seis años, no tiene nada de malo que realmente te quieras enamorar y espero que cuando lo hagas seas correspondida Sandy, te puedo llamar así.
-Claro que si Candy, ahora debo ir a refrescarme nos vemos en el comedor en una hora.
-¡Papá! ¡papá! Por favor quiero conocer el cuarto de mando y al Capitán.
-Stear cuántas veces te lo dije no es posible ya pregunté me negaron hablar con el capitán, está muy ocupado.
El niño empezó a llorar y una voz femenina en la mesa hizo que todos voltearan.
-Yo podría hacer algo al respecto y no sólo podrás conocer el cuarto de mando y al capitán podríamos ir al cuarto de máquinas para que descubras cómo es que este hermoso barco camina en el agua.
-¡De verdad! -dijo emocionado Stear.
-Si es una promesa, si tu papá te da permiso.
Los caballeros en la mesa se pusieron de pie Archie y Albert, Candy presentó a Sandra, Archie no articulada palabra sólo pudo sentir por alguna razón su corazón latir, recordó el beso de la noche anterior aunque sólo fue un toque de labios dejó una huella esa noche en el, Albert lo trajo de regreso a sus pensamientos.
-¡Archie! ¡Archie! No vas a saludar a la amiga de Candy.
-Ahhhh ahhhh si ¡hola! mucho gusto es un placer conocerte -hizo reverencia.
Besó el dorso de su mano se miraron a los ojos, en ambos encendiéndose un rubor, gesto que para Candy y Albert no pasó desapercibido y a partir de ese momento en el corazón de ambos una llama empezaría a crecer.
Hola aquí estoy de nuevo compartiré un capítulo por semana para así ir escribiendo el resto de la historia, espero sus comentarios y sugerencias nos leemos el próximo fin de semana :) acepto críticas siempre es bueno para mejorar
