Mis manos están temblando demasiado, es sin duda la peor noticia que he podido recibir en todos los años de mi vida, las lagrimas se azotan cruelmente en mi rostro mientras bajo la mirada y ahogo un grito de forma que parece que me cortaron la lengua y mis cuerdas vocales se hayan desgastado, me tire pesadamente en la mesa del la oficina del Doctor en el hospital general de Junon, siento la mano de Barret en mi hombro, tratándome de consolar ante tal declaración, aquel medico de ya avanzada edad se acomodó los anteojos y con un enorme pésame dijo disculpándose de forma dolorosa un "Lo siento señorita Lockhart" y se dispuso a salir de aquel lugar con olor a vejez y muerte, dejándonos solo a ambos, rápidamente el enorme hombre me abraza con unas lágrimas en su rostro, deje caer gran frustración en su hombro con unos ojos irritados de tanto llorar.
¡¿COMO ES POSIBLE QUE ME ESTE PASANDO ESTO?! Yo quien realmente me esforcé por vivir, yo que supe seguir adelante después de todo lo que me ha sucedido con la muerte de mi padre en Nibelheim cortado a la mitad por aquel maldito Sephiroth, ser atacada por el anterior mencionado y dejar una fea cicatriz en mi voluptuoso pecho, que mi pueblo terminara calcinado por las llamas hasta el punto de que solo quedaba de el un recuerdo llano que se perdió con el viento que sopla…
Tras unos minutos en donde mi llanto comenzó a bajarse y quedo en un simple sollozo que poco a poco se iba apagando, mire los ojos oscuros de quien me dio su exuberante hombro para dejar salir todo aquel dolor, además de notarse muy tristes, podía mirarlos como si claramente me leyeran, como si fuera un libro abierto, entendieran todo como si igualmente lo hubiera vivido antes…
Después de unas miradas algo entrañadas, Barret fue el primero en salir ya que los demás estabas tanto preocupados además de ansiosos, a excepción de "cierta" persona, Sali y vi sus rostros realmente clavados en mí, esperando saber si eso de que colapsara y las manchas dejando mi piel mas reseca solo fueran algo no tan importante por no llegar a decir que no fueran algo mortal.
- ¡Tifa! - soltó la pequeña ninja obsesionada con la materia - ¡¿Qué es lo que te dijeron?!
Me abrace a mi brazo derecho como si estuviera teniendo pena o vergüenza de lo que estaba a punto de decir, ¿Tenia miedo de que mis viejos compañeros sepan lo que me estaba pasando? Aunque con el simple hecho de que mirara mis pies, aquellas largas piernas realmente fuertes y esbeltas poco a poco fueran perdiendo su figura y en el peor de los casos, desaparecieran, ahogando una mueca acida de dolor, dije con una voz realmente tímida.
-Me diagnosticaron Fascitis Necrosante
Solo pocos como Vincent y Cid conocían dichosa enfermedad, el resto claramente se podía mirar desde lejos que no sabían de que diablos estaba yo hablando, trate de explicarles, pero unas crueles y delatadoras lagrimas hacían acto de presencia antes de que yo me diera cuenta de que estas estaban cesando en mi rostro, el calor de estas me hizo darme cuenta de ello.
Barret tomo la palabra viendo lo tan desdichada que me miraba en aquel momento y dijo de forma triste pero sería:
-Es una enfermedad que es peor que la gangrena, en unos pocos días comenzara a poner callosa gran parte del cuero, dejando la piel más brillosa pero realmente sensible hasta el punto en el que podríamos llegar a ver la sangre hacia afuera… El médico le receto a Tifa unos medicamentos que evitaran que las bacterias avancen lo más rápido posible, si ella sigue las instrucciones al pie de la letra podrá sobrevivir, pero…. ¡¡YA QUE ESTA PUÑETERA ENFERMEDAD TIENE LA MALDITA FAMA DE QUE NADIE HA SOBREVIVIDO PARA PRESUMIR QUE PUDO SUPERARLA NO CREO QUE PASE ESO!!- Aquel hombre que parecía un monstruo de chocolate casi rompe la pared con aquel puñetazo lleno de frustración.
Ahora todos comprendieron que estaba a punto de morir, es imposible sobrevivir ya que eso de que pueda estar aquí por unas cuantas décadas más es un vil engaño para así poder seguir comprando medicamento que solo ralentiza lo inesperado, en un pestañeo todo el grupo se abalanzo sobre mi abrazándome de forma protectora, dándome ánimos y demostrándome que estarán ahí para mi…
Todos excepto Cloud, al cual no le importo en lo más mínimo mi condición, más bien parecía que un milagro se le había cumplido a el, su risa y mirada de felicidad lo delataban de una forma realmente macabra, eso me deprimió pero ahora estaba mas asustada en ver que mi cuerpo se iría poco a poco pudriendo hasta que muera en menos de unos 3 meses si me sometía a más operaciones que remplazarían mis anticuerpos, mirar que dentro de poco una enfermedad que es difícil de aparecer me matara injustamente, era como si la muerte quisiera jugar conmigo, los demás le reprocharon a Cloud por su forma injusta y grosera, pero el tan solo se limito a decir.
- Así de dura es la vida… tengo que terminar las entregas- se levanto y se dispuso a salir ignorando todo aquel ambiente que empeoro después de que el hizo eso.
Me llevaron al bar, el camino de regreso a Edge fue realmente incomodo, nadie quería hablar de eso, incluso Yuffie trato de levantarnos el animo con sus chistes y bromas pero solo logro que todo se pusiera aun mas imposible de soportar, los miembros de Avalancha prometieron venir a verme mas seguido las siguientes semanas, sobre todo Yuffie y Barret, que eran los mas preocupados al parecer de todo lo que me sucedió.
Apenas entramos a Edge sentí que mi piel se retorcía de dolor, cosa la cual hizo a todos los demás preocuparse aunque rápidamente solté una sonrisa diciendo que nada me sucedía, al parecer los dolores comenzarían a hacer acto de presencia, ahí supe que eso solo era el principio de un largo sufrimiento a partir de ahora.
Abrí la puerta trasera del 7to Heaven y los niños me recibieron abrazándome lo más tiernamente, pero a su vez, desesperadamente, fue una mala idea dejarlos a ambos solos mientras me llevaban al hospital, los dejamos preocupados a mas no poder, los pequeños comenzaron a preguntar obviamente que me había sucedido, su insistencia era aun mas porque al parecer "cierta persona" le dijo algo antes.
- ¡¡Tifa!! Pensamos que algo horrible te ocurrió, Cloud nos dijo que todo cambiaria a partir de ahora contigo ¡¡¿Que paso, acaso es algo grave?!! ¡¡¿Tenemos la culpa de eso por nuestras travesuras?!!
Rápidamente los abrase y con la mejor voz calmada posible, les susurre en un tono muy alegre que apenas podía disfrazar la depresión que tenia
- ¿Porque dicen eso? No tengo nada mis cariñitos, solo es un poco de anemia y es algo difícil dormir para mi, por lo que me encontraron cansada últimamente, solo es eso…
Los pequeños sonrieron y se alegraron, los demás miraron todo con tristeza, entendía perfectamente que no debía decirles que morirá, seria demasiado para sus mentes jóvenes.
Tras terminar aquel abrazo que mas bien me pareció eterno pero reconfortante, los demás se acercaron y entre aquel momento incomodo Yuffie saco provecho para hacer que los niños no notaran que algo estaba mal
- Oigan pequeños bribones, que les parece si vamos a jugar a que… ¡¡El primero que le robe las materias a Cloud será el gran ganador!!
Ambos pequeños saltaron de alegría y sin pensar dos veces fueron corriendo a la habitación del rubio, pero al llegar a esta notaron algo extraño, ¿la puerta tenía llave? Los pequeños volvieron a la planta baja, en donde me ordenaron que descansara y no hiciera nada por el resto del día, ellos lo harían, ambos gritaban y decían que la puerta de la habitación de Cloud estaba cerrada con llave, rápidamente subí, aquella puerta no se abría, algo malo sentí que estaba ocurriendo, pero decidí ignorarlo, ya que no era el momento perfecto para este tipo de preocupaciones sin sentido.
Fue una noche mas que relajante, divertida hasta el punto de que ninguno de los adultos se embriagara (cosa que es imposible hasta ahora) y solo nos la pasamos recordando aquellos ayeres lejanos, cerca de las 3:00 am todos menos Yuffie, quien con su testarudez enorme y agallas, me convenció de quedarse a vivir conmigo después de mi estado crítico, ella dormía conmigo por si sentía algún dolor o algo malo ocurría, fue una noche relajante en la que finalmente pude dormir con otra persona en la misma cama, que a pesar de ser amigas, nuestro lazo fuerte de amistad era enorme.
Cuando la mañana se azotaba por el horizonte y los finos rayos cálidos del sol se desprendían por la cortina de mi habitación dejando unas iluminadas pero a la vez delatadoras gotas de un bello amanecer que tranquilizaban al más quisquilloso, escuche al Fenrir aparcar.
"Bonitas horas de llegar en la mañana" pensé en mi mente, ya que desde el hospital de Junon, no se sabía ningún rastro acerca de Cloud, como si este… se hubiera desaparecido para siempre….
La puerta de la cocina se escucho abrirse, los pesados pies que tocaban fuertemente la madera de las escaleras se oían claramente, tanto que despertó a Yuffie, ella aun con un somnoliento bostezo pesado mientras se limpiaba los parpados.
- ¿Qué hora es Tifa? -
- Cerca de las 7:00 am, parece que Cloud llego, iré a verlo- rápidamente salte de la cama dispuesta a salir cuando Yuffie me detuvo diciéndome que iría conmigo a verlo.
Apenas salimos de la habitación, vimos que Cloud baja las escaleras con un enorme costal en su espalda, la puerta de su habitación se quedo abierta y ese fue nuestro momento perfecto para entrar, esa fue la peor idea que pude haber hecho…
Las cosas de el poco a poco ya no se encontraban, es como si el se fuera de aquí, las lagrimas se tristeza y sobre todo, furia, se estamparon fuertemente tanto que Sali corriendo a gritarle a Cloud porque me estaba dejando.
-¡¡Cloud!! ¡¡Maldito hijo de puta!!- le lance una enorme patada que el tan fácilmente esquivo, Yuffie llego y trato de calmarnos a ambos, sobre todo a mi agarrándome fuertemente.
- ¡Tifa tranquilízate! No actúes tan precipitadamente- ella me tomo fuertemente de la cintura, pero algo malo ocurrió, mi cuerpo se sintió adolorido a mas no poder, la enfermedad estaba saliendo a luz, gemí de forma dolorosa cosa la cual hizo que Yuffie me soltara, Cloud permaneció quieto sin importarle nada a el en común.
-Lo lamento Tifa….-
- Descuida, pero antes que nada tengo que preguntarle algo a este imbécil evasivo- dije con mucha rabia que estaba mezclada por el enorme dolor que estaba soportando, a duras penas podía hablar sin que este me hiciera gritar de dolor.
-No me molestes Tifa, tengo que irme-
-Se puede saber porque llevas todo eso en aquel costal – lo digo señalando dicho objeto.
-Que esperabas? Me largo de aquí, que asco vivir con una enferma como tú, que vergüenza compartir techo con una semimuerta- sus palabras secas eran horribles…
Mi pecho se sintió horrible, seguido de un dolor peor y mas amargo que aquel de la Fascitis, lo que Cloud dijo me hizo sacar las lágrimas, Yuffie le propino un excelente golpe que solo logro hacerle a Cloud un típico rasguño, ya que él se inmuto bastante.
-¿Eres un imbécil de mierda Cloud, Tifa te ha cuidado todo este tiempo y tu solo te vas así como asi? Ella te necesita ahora más que a nadie, ¡¡QUEDATE CON ELLA POR EL AMOR DE GAIA!! ¡¡¿PENDEJO DE MIERDA QUIERES QUE LLAME A LOS DEMAS Y QUE TE GOLPEEN HASTA QUE ENTIENDAS?!!
Yuffie tenía su cara más seria y agridulce que jamás le haya visto en su bello rostro joven, sin duda ella daba miedo al estar así de enfadada, Cloud se asusto al escuchar que llamaría a los demás, dejado caer pesadamente el costal de su hombro y dijo con un suspiro cansado de regañadientes
-Cuando "esta chica" de carne podrida muera, me largo, ¿te parece? –
Ambas quedamos anonadadas, ese comentario era mas que cruel, describía perfectamente lo que Cloud sentía por ni, absolutamente nada