Disclaimer. Ni glee ni sus personajes me pertenecen, si fuera así probablemente la serie se llamaría KLAINE.

"The Edge Of The Life"

Kurt Hummel es de los cantantes de Broadway más reconocidos, con tan solo 24 años de edad, el podía describir su vida como la que siempre soñó, para el todo era perfecto, llevaba 7 años junto al amor de su vida y llevaban 3 años de casados.

Se caso a los 21 cuando ambos se graduaron de la universidad, Blaine lo sorprendió por completo cuando una semana después de su graduación Blaine lo había hecho empacar sus cosas, lo subió al coche y lo llevo hasta un lujoso hotel al pie de una hermosa playa, Blaine solo había dicho que ese era su regalo por sus graduaciones, kurt quiso saber cómo iba a pagar todo eso, pero el moreno se negó a darle un respuesta. A los 3 días de estar en esa playa, lo sorprendió aun mas en una noche cuando ambos salieron a caminar por la playa, cuando la puesta de sol empezó ambos se recostaron en la arena y Blaine paso un brazo por su espalda y lo acerco mas a él recargándolo en su pecho, pasaron vieron como el sol se tornaba naranja luego rojo y se comenzaba a meter lentamente reflejándose en el mar, todo era perfecto ambos estaban en silencio relajados viendo tal espectáculo que la naturaleza les entregaba, kurt sentía como Blaine le acariciaba los brazos y la espalada el solo sentía que no podría estar en mejor lugar se sentía lleno. De repente Blaine lo movió para que ambos se sentaran, Blaine se arrodillo frente a él y ahí con el sol medio oculto y enfrente del vacío mar Blaine le pidió matrimonio, kurt no dudo ningún momento en que él quería casarse con Blaine, no dudo en ningún momento en aceptar.

Desde ese día unieron sus vidas para siempre, hasta la muerte.

Ambos eran famosos y exitoso, mientras el tenia una gran carrera en Broadway, Blaine tenía en planes de lanzar su segundo disco, el primero había sido un total éxito y ahora ambos eran reconocidos.

Blaine estaba en un viaje en Los Angeles cerrando el trato para el lanzamiento de su segundo disco. Kurt se quedo en su departamento en Nueva York, cada vez que pasaban días separados por negocios y demás ambos se extrañaban con locura.

Ese día kurt tenía una cita en le medico, iría a recoger los estudios que se hizo hace una semana porque últimamente se sentía mal, Blaine lo había acompañado cuando se hizo los estudios y Blaine quería acompañarlo a recogerlos y saber que tenia, pero su junta con los inversores de su disco se había adelantado impidiéndole ir, el había dicho que no le importaba la junta que el iría con él, que él era más importante, pero kurt se lo impidió.

Ese día kurt se despertó y desde la mañana había recibido 8 llamadas de Blaine pidiéndole disculpas y diciéndole que apenas saliera del hospital le llamara.

- entonces…. Llámame apenas salgas ¿sí?

- si Blaine ya me lo dijiste 10 veces, no se me olvida hablarte, tranquilo.

- no como me dices que tranquilo hoy tiene tu cita para saber que salió en tus análisis y radiografías, se supone que debería estar ahí como tu esposo, me mata no poder estar ahí.

- lo sé amor… pero tranquilo nada malo saldrá.

- bien… ok llámame, no se te olvide.

- que si Blaine, ¿Qué me crees muy distraído u olvidadizo?

- mmm las dos… o te debo recordar la vez que metiste el teléfono al refri.

- ya olvídalo, eso fue solo una vez, ni me acuerdo como llego el teléfono ahí.

- ya vez te lo digo distraído y olvidadizo.

- ya olvidalo, bueno amor te dejo que se me hace tarde. Te amo.

- yo también, te vas con cuidado y llamarme.

- si papa. Nos vemos.

Kurt colgó y rio de la sobreprotección que a veces le tenía Blaine.

Manejo tranquilo hasta el hospital, estaba nervioso de lo que pudiera salir en los análisis y radiografías, pero se deshizo de malas ideas y entro sentándose en los pasillos esperando a que lo llamara.

- ¿Hummel? – una enfermera pregunto saliendo del consultorio del doctor, el se levanto y fue donde ella estaba – el doctor lo espera.

-gracias- entro y cuando dio un paso dentro los nervios lo estaban matando, sentía algo raro.

- buenas tardes señor Hummel- lo saludo un doctor, pero kurt no conocía a ese doctor.

- buenas tardes, disculpe y el doctor Guzmán, se supone que él me atendería hoy.

- siéntese señor Hummel, al doctor Guzmán, le dieron sus vacaciones, pero no se preocupe regresa en 3 semanas, el me dijo que analizara sus estudios y el también me dijo que cuando regresara lo llamaría para una cita y que el mismo analizaría sus estudios, por si usted no sentía la suficiente confianza conmigo. Soy el doctor León, yo lo atenderé porque sus estudios se deben entregar hoy, pero no se preocupe dentro de 3 semanas podrá hablar con el doctor Guzmán.

- está bien lo siento…. Y como salieron los análisis.

Si kurt estaba nervioso, cuando vio que la cara del doctor se tornaba seria y rigida, como si se estuviera preparándose para dar una mala noticia, kurt se puso mas nervioso, podía sentir los latidos de su corazón golpeando sus oídos.

- Señor hummel, me temo que le tengo que dar una mala noticia.- y con esas palabras los nervios de kurt terminaron de colapsar.

- ¿Qu- que mala noticia?

- me temo que le hemos encontrado un tumor en el cerebro. – esas últimas palabras lo bloquearon por completo, kurt estaba más que shockeado, no quería creer, "esto es una broma, una pésima broma" pensaba.

- ¿co-como que un tu-tumor?, no, no entiendo.

- lo siento señor Hummel, pero el tumor se comenzó a desarrollar aproximadamente hace dos años.

- pe-pero, ¿Qué tengo que hacer?, hay, hay cura.

- me temo señor Hummel, ni una operación podría salvarlo, el tumor creció demasiado, ya no se puede hacer nada.

- voy-voy a morir….- dijo esa última palabra en más bajo que un susurro y lagrimas comenzaron a caer.

- lo siento señor Hummel, pero tiene los días contados.

- no. No puede ser, debe de haber un error, no puede ser.

- lo siento, no hay errores, usted tiene los días contados.

Kurt tomo su cara entre sus manos y se inclino sobre sus piernas y ahogo varios sollozos, se sentía mal. Alzo la cara para encontrar la del doctor.

- ¿cu-cuantos días me quedan? – pregunto no queriendo saber la respuesta.

- un mes.

Un mes, un maldito mes, no podía creerlo, después de la respuesta dejo de escuchar todo, no recuerda cómo es que se levanto y salió, salió de ahí del hospital y llego a su casa, seguía llorando y con todo dando vueltas.

"¿Cómo puede ser posible todo eso?, el no podía morir, no, no ahora ¿Qué era todo eso?, debía ser una broma. ¿Cómo les diría a todos?, ¿Cómo le diría a…. Blaine?"

Bueno aquí otra nueva historia.

Espero les guste, dejen sus reviews.