.:|Acosadora de Profesión|:.

.

.

Disclaimer: Obvio que los personajes de Naruto no son mios, si hubieran sido mios, Kakashi no tuviera esa mascara horrenda y Sasuke estaria con Sakura y viceversa... Pero la historia, aunque vino a mi mente luego de una cancion, no tiene que ver en nada con esta... Es toda mia... Salio del cerebro de Delany...

Resumen Completo:

La atracción humana siempre a resultado un poco… ¿extraña? Comenzando con una buena apariencia física aunque diferentes factores entraban en juego, al ver el asunto de los "gustos propios" pero rara vez las palabras nos cautivan, alejando su aspecto.

En ocasiones lo miraba tan fijamente que podrían clasificarme como una acosadora, pero la realidad era que poco me importaba, verlo sentado siempre en la banca del parque, con un libro entre sus manos el cual captaba su toda su atención, me frustraba un poco al no saber de que se trataba específicamente…

Pero olvidando todo aquello, lo más importante era que lograra conocer aquel espécimen de hombre que me tenía tan cautiva sin siquiera haber intercambiado una palabra…había analizado todo lo posible hasta el momento, con mayor razón había conseguido el apodo de acosadora…pero acosadora de profesión.

Pareja: SasuSaku

Rating: M

Notas de la Historia: Últimamente me estoy dedicando a hacer OS y fic cortos.

En fin… Estaba oyendo la canción de Fallen de Mya cuando me vino este fic a la mente. Esta canción me gusta desde hace años… ni idea tengo de qué año es, pero me encanta. El fic no tiene que ver nada con la canción, pero cuando la estaba escuchando la idea cruzo como un flash por mi mente cochina y loca, y rápidamente abrí el Word y me puse a copiar lo que llegaba a mi mente… así que aquí esta…

Aunque todos mis fic están dedicados para mis hijas que son las que me ayudan cuando su madre esta bloqueada en algo y que me dan ideas cuando las necesito en verdad. Y Aunque yo las quiero mucho a todas, este es un regalo especial, sacado de mi "limpia" mente, porque para mi este OS esta libre de culpa… y pues… Es para mi hija Amy Zhang, en el día de su cumpleaños.

Love You, Amy! ¡Tu Oka-san querida! Espero que no me mates, y espero que te guste, pasa por alto las faltas ortográficas y todo lo demás. Hablo en serio Amy! Puse todo mi entusiasmo como madre para hacerte este regalo (exagerando), espero que te guste…

.

.

Acosadora de Profesion:

Capitulo Unico:

Acosando

.

.

Parecía una acosadora. Eso era lo que era exactamente. ¿Qué diablos hacia allí oculta en esos arbustos viendo fijamente a aquel espécimen de hombre que parecía un dios griego?

Pero no podía quitar la vista de ese chico que parecía de su edad con una complexión, según lo que había observado desde hace ya tiempo, muy buena, tenia un poco musculosos los brazos, siempre llevaba una camiseta blanca o negra que con cualquiera de las dos se veía mas sexy de lo que ya era, su cabello negro estaba siempre despeinado y casi siempre llevaba vaqueros con rotos que lo hacían parecer un chico malo.

Chico malo o no, Sakura Haruno, una pelirosa de ojos verdes, estaba obsesionada con aquel tipo. Ni siquiera sabia su nombre, no sabia nada de él, solo que siempre a eso de las 6 de la tarde, aquel chico aparecía con una mochila negra calada al hombro y con una expresión distraída, y que siempre se sentaba en el mismo banco a leer un libro que tenia el mismo grosor que el libro Amanecer de Stephenie Meyer o tal vez alguno de la saga de Harry Potter, en fin…

Sakura no podía dejar de observarlo. Y todo aquello empezó cuando un día, la pelirosa salió de su trabajo como ayudante de la bibliotecaria del pueblo donde vivía. Iba apresurada porque estaba tarde para ir a su clase de prácticas nocturnas de medicina, había decidido cortar caminos y entrar por la vía que encontraba mas corta para ir al hospital, el parque. Cuando iba por la glorieta que quedaba en el mismo centro de aquel sitio, su vista se había fijado rápidamente en aquel chico de pelo negro azulado que estaba sentado en una banca con una pose que encontraba muy sexy, totalmente concentrado.

Desde ese día, había comenzado a pasar por allí para ver al «Tipo Concentración». Se había vuelto una rutina obsesiva, pero no podía dejar de mirarlo, era muy guapo.

Suspiró y ajustó mas los binoculares enfocándolo desde el otro lado, detrás de esos arbustos que la cubrían totalmente. Llevaba días en eso y aunque un día decidió seguirlo "sigilosamente", el chico había volteado hacia ella dándose cuenta de que era perseguido y la miro con una mirada furiosa, que Sakura no quería recordar para nada.

—Creo que por eso deje de perseguirlo, pero acosarlo seguirá siendo mi hobbie—susurro bajito mientras seguía observándolo secretamente.

¿Qué diría el chico si supiera que era acosado ocularmente por una chica loca y psicópata como ella?

—Seguramente me odiaría…

Sakura frunció los labios al ver un chico de cabello rubio pincho, casi de la misma estatura del «Tipo Concentración» y casi de igual complexión, pero el pelinegro era mil veces mas sexy. Lo apuntó con los binoculares, al parecer el rubio era igual de guapo que su chico.

«Lastima que solo tengo ojos para mi niño estudioso *o*», pensó Sakura dirigiendo la mirada otra vez al pelinegro.

En ese instante el chico concentración se levantó y se fue junto al rubio. Sakura mascullo una pequeña maldición, maldito chico rubio, se había llevado a su hermoso Dios. Suspiro y metió los binoculares en una mochila de flores de cerezo que llevaba en la espalda. Miro su reloj y se dio cuenta de que iba a llegar tarde a su clase de práctica.

.

.

.

.

Al día siguiente, luego de salir de la biblioteca, agradeció a Kamisama por no tener clases en el hospital ese día. Estaba libre para observar a su chico sin ser interrumpida por un estúpido reloj o la estúpida clase de práctica. Rápidamente antes de que llegara se metió detrás del arbusto, en el mismo sitio de siempre y mientras bebía un poco de jugo de cajita y se comía un donut, de lejos vio como llegaba su chico favorito y se sentaba en la banqueta, sacando de su mochila el libro, que aun no sabia de que era, se puso a leer al instante, como olvidándose de las personas que estaban a su alrededor.

Sakura rápidamente saco sus binoculares y lo enfocó, se quedo embelesada viéndolo, era tan guapo, pero era una lastima que el ni siquiera sabia que ella existía.

Suspiro.

La tarde paso tranquila mientras Sakura seguía observándolo, en un momento el chico dejo de leer y miro hacia donde estaba ella, como si el supiera que estaba allí.

Sakura se escondió un poco más. ¿Acaso el la había visto o era que se sentía observado? Negó con la cabeza, seguramente era la segunda opción. Algunas personas sentían cuando otros los estaban mirando y tal vez ese chico era uno de ellos.

Volvió a mirar.

Ya el parque se estaba poniendo oscuro y las luces de la glorieta se estaban encendiendo. Sakura estaba tan encismada acosando a ese chico que no se dio cuenta de que ya había anochecido. Aunque el chico ya no estaba leyendo el libro, aun estaba sentado allí, es como si no quisiera irse a su casa.

Sakura se pregunto donde vivía el chico ese, o mejor aun como se llamaba en realidad, cual era su edad, donde estudiaba… Se preguntaba muchas cosas sobre él y deseaba saberlas, pero no podía levantarse e ir hacia él y preguntarle todas esas cosas. Seguramente él la reconocería, aunque ella solo fue vista una sola vez y solo fue por unos minutos…

Bajo la cabeza quedándose sentada de rodillas de frente a los arbustos. ¿Cómo era que se había enamorado? Porque ahora que lo veía estaba enamorada de él, de ese ceño fruncido, de esa cara concentrada, de esos rebeldes cabellos, de esta postura elegante…

—Dios, ya estoy babeando, pero me tengo que controlar, tal vez algún día pueda conocerlo, algún día tal vez le hable y sepa como se llame. Ya me lo estoy imaginando…—chillo feliz pero su felicidad se detuvo.

La pelirosa sintió como algo le pasaba por los tobillos. Sintió su cuerpo ponerse frio y tiro un grito. No veía para nada, estaba muy oscuro… ¿Y si era una serpiente o peor aun, alguna araña de esas que salían en la película Arack Attack?

Se puso mas fría de lo que ya se encontraba. Odiaba esos pájaros raros…

—No te muevas—se dijo así misma, pero estiro la mano hacia su mochila donde guardaba sus "herramientas de espionaje" y busco rápidamente algo largo de metal, lo encontró y la encendió rápidamente, enfocando hacia sus piernas.

No había nada…

Suspiro llevándose una mano hacia el corazón. Seguramente había sido la hierba que se había movido con el viento…

Movió la cabeza mientras guardaba la linterna, no le gustaría ser encontrada, al menos no todavía. Palmeó el oscuro suelo buscando sus binoculares encontrando lo que deseaba. Volvió a enfocar hacia la glorieta que estaba iluminada y luego hacia el banco donde estaba su chico misterioso, pero se quedo anonadada, el chico ya no estaba ahí.

Sakura recorrió con sus binoculares todo el perímetro de la glorieta, enfocando cada banco que estaba cerca, pero entre las personas que había en la mayoría de los bancos, su chico no estaba allí.

—¿Dónde estará…?—se pregunto quitándose los binoculares del rostro.

Se quedo sentada de rodillas preguntándose donde había ido su chico. Maldijo a la cosa que le había pasado por los pies, esa cosa la había distraído y no se había dado cuenta cuando el su niño estudioso se había esfumado.

Lloriqueo un poco y luego comenzó a recoger sus cosas. Tal vez mañana lo podría ver, aunque tenia que echar el día en el hospital porque era la practica final. Ella no quería nada de eso, solo quería ver al «Tipo Concentración». Termino de recoger sus utensilios y se iba a parar pero…

—Así que tú eres la chica que me acosa, ¿eh?—dijo una voz detrás de ella.

Sakura sintió como el corazón se le salía del pecho y volvía, para hacer lo mismo en aquellos segundos que estaban pasando. Se volvió lentamente hacia la voz que estaba detrás de ella. Se giro por completo, gracias a la poca luz de la luna que se filtraba por los arboles pudo ver una silueta.

—Oh…—murmuró la pelirosa al reconocer al chico al que últimamente acosaba con sus binoculares. Era más hermoso de cerca.

—¿Quién diablos eres?—pregunto el chico mirándola con una gélida mirada.

Sakura se ruborizo. Había sido atrapada…

.

.

.

.

Era idea suya o estaba siendo observado por alguien. Sasuke Uchiha comenzó a mirar a todas las personas que estaban cerca suyo, pero ninguna de esas personas lo estaban mirando, a excepción de un grupito de chicas que estaban en un banco y chillaban mientras se lo comían con los ojos. Acosándolo… Seguramente imaginándoselo haciendo otras cosas…

Desde hace días sentía esa sensación extraña, esa sensación de ser observado. No le había dado mente, porque pensó que su mente estaba jugándole una mala pasada. Siempre iba a aquel parque luego de sus clases para distraerse mientras leía uno de sus libros favoritos, esa era su rutina diaria, ya era como si fuese un hábito.

No le dio importancia a aquella sensación y siguió leyendo hasta que empezó a oscurecer. Dejo el libro metiéndolo en su mochila y se quedo un rato sentado mirando por todo el parque. Aquella sensación no desaparecía, era obvio que estaba siendo observado por alguien, pero quien era tan estúpido para hacer eso.

«Tal vez un detective», pensó mientras se acariciaba la barbilla.

Era un niño rico, sus padres tenían dinero y eran dirigentes de una de las más grandes empresas del país. Su padre básicamente lo tenía vigilado, aunque últimamente no había visto a ningún guardaespaldas cerca de él.

«Quizás mando a investigar donde paso mis tardes metido…, quizás sea eso y estoy siendo vigilado por un detective. Ya vera mi padre cuando vaya a casa», se dijo mientras suspiraba.

Algo capto su atención. ¿Rosa? Se sentó derecho en la baca y miro hacia donde había visto el destello rosa… Afino la vista y se quedo ahí, viendo hacia unos arbustos que estaban exactamente frente a él del otro lado de la pequeña glorieta, hasta que la cosa rosa volvió a aparecer. Parecía como si fuese un manto rosa, no podía ver bien…quizás era un peluche o algo de una niña que se le había quedado… tal vez podía acercarse. Esperaría a que fuese de noche y que nadie lo viese…

Sasuke se arrellanó en el banco sin dejar de mirar hacia ahí. Otra vez la cosa rosa salió por encima de los arbustos, parecía una cabeza.

Un momento…

El recuerdo vino como un rayo de luz. ¿Rosa? ¿Cabeza? El había visto antes una cabeza con rosa. Se quedo pensando, recordando donde lo había visto. Tenía una buena memoria fotográfica así que el recuerdo llego rápidamente junto a la imagen de una chica de cabello rosa que lo haba estado persiguiendo un día.

En su rostro se dibujo una sonrisa ladina. ¿Acaso aquella chica lo estaba acechando? ¿Tal vez era una agente contratada por su padre o algo por el estilo?

Comenzó a anochecer y Sasuke no se movió del banco, esperaría a que esa chica, si era lo que era en realidad, saldría. Se miro el reloj, eran las 7 y media y la cosa rosa aun no se movía de ahí… ¿Qué estaba esperando?

«No seas idiota, Sasuke, esta esperando a que te levantes para ir a perseguirte. No debes darle ese honor, debes enfrentarlo…», dijo una voz en su cabeza. Tenia que buscar una oportunidad para acercarse sin ser visto y sorprender a la cosa que estaba detrás de esos arbustos.

Escucho un grito lo bastante alto y Sasuke supo que venia el momento indicado. Rápidamente tomo sus cosas y se adentro a la arboleada que rodeaba por partes el centro del parque, como estaba un poco oscuro y la luna iluminaba algunas partes de su camino, pudo acercarse lo suficiente hasta donde estaba la cosa rosa.

Sasuke mientras se iba acercando vio gracias a la luz de la luna, que si se trataba de una chica y que si tenia el pelo rosa. Se escondió detrás de un árbol y la observo, parecía un poco alterada, aunque no podía ver su rostro muy bien.

—No te muevas—dijo la chica y Sasuke dio un respingo. ¿Acaso la chica se había dado cuenta de que estaba allí?

Sasuke se quedo quieto y movió la cabeza hacia un lado, sigilosamente para ver que hacia en ese momento, tenia una especie de luz en las manos, como una linterna. Sasuke pudo completamente que si se trataba de alguien, de una chica y que esa chica si era la del otro día.

Debía de estar loca… ¿Qué estaba haciendo ahí? ¿Acaso era una detective de verdad? ¿O tal vez una acosadora de las múltiples que tenia? Volvió a mirarla, la chica suspiro muy alto y luego guardo el objeto de luz. Sasuke no podía seguir viendo muy bien, la luna no ayudaba mucho.

Enfoco mas la mirada y vio como la acosadora o lo que sea que fuese, hacia unos ruidos extraños y luego volvía a su tarea de siempre, mirar hacia donde se supone que estaba él.

Sasuke sonrió, imaginándose su expresión cuando se diera cuenta de que el no estaba ya ahí.

—¿Dónde estará…?—escucho que la chica murmuraba.

Comenzó a moverse otra vez y Sasuke supuso que estaba guardando sus cosas para irse a buscarlo, tal vez para no perderlo de vista, pero escuchó como un sollozo. ¿Acaso estaba llorando?

Sasuke rodo los ojos. ¿Qué clase de loca era esta chica?, se pregunto.

Volvió a mirarla en ese momento la chica esta como parándose en ese momento, este era el momento perfecto para enfrentarla. Salió de las sombras y se acercó a ella con pasos sigilosos.

—Así que tú eres la chica que me acosa, ¿eh?—dijo sonriendo con sorna.

Vio como la chica se quedaba media estática, ella se volvió por completo, mientras se quedaba fijamente observándolo.

Sasuke la miro con rabia. ¿Quién se creía esa chica para venir a arruinar sus únicos momentos de paz que tenia en el día?

—Oh…—murmuró la chica sin despegar la vista de el y con la cara un poco perpleja.

—¿Quién diablos eres?—decidió preguntar al fin. Necesitaba saber para quien de sus familiares trabajaba, si era para su hermano mayor o para uno de sus padres.

La chica comenzó a balbucear.

—¡Respóndeme!—le grito mientras se acercaba mas a ella, la agarro por un brazo y la levantó de un tirón para soltarla luego, la chica se tambaleo pero consiguió recuperar el equilibro.

Se quedo frente a el mientras seguía mirándolo como embobada. Sasuke se estaba enfadando. La volvió a agarrar del mismo brazo, aprisionándoselo con fuerza.

—¡Respóndeme ya!—murmuró entre dientes.

La chica soltó un sollozo.

—Me haces daño…—susurro con una voz muy suave.

Sasuke mascullo un improperio y la soltó. La chica comenzó a sobarse con una mano el área adolorida, mientras lo miraba como con miedo.

—No te voy a hacer nada—le dijo Sasuke—Solo quiero que me digas que haces aquí, ¿por que diablos me observas desde lejos y por que también me persigues? ¿Te contrato mi padre? ¿Mi hermano? ¿Mi madre? ¡Contesta!—grito esto último al ver que la chica se quedaba dudosa.

—Yo… —la chica recogió algo del suelo. ¿Una mochila? Se la cargo al hombro y lo miro—No se de que hablas…

—Mejor respóndeme quien eres…

—Soy Sakura Haruno…

Sasuke arqueo las cejas. ¿Acaso ella creía que un simple nombre le iba a revelar quien era? Que tonta era…

—Ni idea de quien seas…

—Bueno, yo… —bufo—Te diré la verdad—dijo la chica que ahora que se fijaba en ella, si tenía el pelo rosado o algo que llegaba a ese color y sus ojos parecían luciérnagas, grandes y verdes. Por alguna razón se la encontró un poco guapa, pero una psicópata.

Sasuke dejo de mirarla y rodó los ojos. Eso era lo que estaba esperando, que ella dijera la verdad. Al parecer aquella chica aunque sea bonita era media retrasada mental.

—Ya habla…—grito Sasuke desesperado.

.

.

.

.

Había sido descubierta… ¿Ahora que le iba a decir? No podía decirle que un día lo había visto y que le había gustado, y que desde ese día se había obsesionado con él, el podría confundirla con una loca psicópata, aunque eso era lo que realmente era.

—Yo…

—No tengo todo el tiempo, o lo dices ahora o te vas a arrepentir. Odio que me estén vigilando y tú al parecer lo hacías demasiado.

—Mira, yo te diré que un día te vi y me gustaste. Se que suena obsesivo, en realidad yo me obsesiono con las cosas que me gustan y pues tu me gustaste, como al aparecer tu siempre estabas en ese banco sentado, pues cada vez que pasaba por aquí, me di cuenta de tu rutina y decidí… Emm… verte… observarte…—dijo la pelirosa nerviosa por confesar su secreto al chico que tanto había mirado.

El la miro perplejo y luego soltó una risotada.

—Estás loca, debería mandarte a la comisaria por acoso sexual.

—¿Acaso te he tocado?—pregunto ella.

—Si, has acosado mi cuerpo con tus ojos. Aun me estas acosando, tu mirada te delata…—dijo el chico acercándose a ella.

Sakura se quedo quieta al ver como el chico se acercaba a ella, con pasos decididos, le iba a hacer daño, iba a castigarla por hacer eso, pero aquello no era un pecado. Al ver que el chico la miraba con furia en los ojos, Sakura grito y corrió rápidamente pasando por donde estaba el chico para alejarse de el.

Tenia que salir a la claridad, no podía seguir entre los arboles, entre la media oscuridad, cuando al fin diviso el otro lado del parque que daba hacia la calle, Sakura sonrió feliz, pero así mismo como se sintió feliz, se sintió aterrada al ser halada por alguien hacia atrás.

La pelirosa cayó al suelo de frente y fue aplastada a este por alguien que sabia muy bien quien era. Comenzó a forcejear debajo del chico, pero el rápidamente como la tumbo, le agarro las manos, posesionándoselas en su espalda.

Sakura sollozo de dolor. ¿Acaso iba a golpearla?

—Suéltame por favor, te juro que solo lo hice porque me pareciste lindo y tenia mucho sin ver a un chico así de guapo como tu. Te lo juro. Déjame ir, por favor… Ya no te molestare más, por favor…

—Así que soy guapo…—murmuró el encima de ella.

—Eso seguramente lo sabes…—murmuró ella sin dejar de forcejear, ese chico pesaba una tonelada y el maldito la estaba ensuciando con el suelo—pero por favor quítate de encima mio, no puedo respirar…

—Ah…—el chico se levantó, quitándosele de encima.

Sakura respiro y apoyando las manos en el suelo, se impulso para pararse. Una vez que estuvo de pie se limpio las rodillas de los pantalones y miro al chico con furia.

—¿Por qué hiciste eso?—le espeto.

—Porque tu me provocaste, por tu estar vigilándome como una maldita acosadora… Por estar observándome. Odio que me miren.

—Si no te gusta que te miren porque no te pones una bolsa de papel en la cara o mejor aun no salgas de tu casa…

—Tú arruinaste mi paz…

—No es cierto, yo solo te observe porque me gustaste…

—¿Te gusto?—pregunto el chico como si no pudiese creérselo.

Sakura se ruborizo y gracias a que estaba oscuro el seguramente no vio su sonrojo. Bueno, si le gustaba, y mucho y también estaba enamorada de el, sabia que era estúpido porque apenas lo conocía y ahora sabia su nombre, pero nada mas, no sabia que edad tenia exactamente, el podría estar en el instituto…

—¿Estas en el instituto?—le pregunto para calmar su curiosidad, aunque tenia un montón de preguntas que hacerle, pero aquella fue la única que su boca pudo soltar.

—A ti que te importa—le espeto él.

—¿Qué edad tienes?—siguió ella, no podía parar, tenia que saberlo ya.

—¿Para que quieres saberlo, loca?

—Solo dímelo…

—No te lo diré, aun no me conformo con que te guste y que solo estas haciendo esto por dicha razón, no es suficiente…

—¿Acaso me tienes miedo?—le pregunto Sakura. El se quedo callado y ella soltó una carcajada—Eres un miedoso… Aunque no lo pareces, pensé que eras más valiente…

—Tengo 18, eso era lo que querías saber…

—Soy mayor que tu…

—¿Y a mi que me importa?—dijo el.

—A mí si me importa…

Sakura lo escucho suspirar y el se llevo una mano al rostro, tapándoselo y comenzando a mover la cabeza. Comenzó a darse la vuelta. Ella parpadeo confusa, ¿acaso se iba a ir así, así sin mas? ¿No iba a preguntarle otras cosas? El no podía irse, quería, deseaba saber más de él. Además si se iba nunca lo volvería a ver, porque el seguramente no volvería al parque.

Ella lo agarró del brazo antes de que él diera el primer paso para irse. Él volvió la cabeza hacia ella y la observó.

—No te vayas…

—¿Qué pretendes?

—Me gustas, quiero estar aquí contigo…

—Estás muy loca, yo no te conozco y no tengo porque estar aquí contigo, mientras tú me miras con esa mirada cochina que tienes… Loca…

Sakura se sintió ofendida, pero no daría su brazo a torcer. Ella lo iba a tener.

—No me digas loca, ¿acaso nunca nadie te ha observado mucho y le has gustado? ¿Nunca nadie ha hecho lo que he hecho?

—Eso no te interesa…

Sakura se rio.

—¿Le gustas a nadie?

—No te importa…

—Seguramente eres gay, un chico no puede ser así de sexy. Seguro que eres igual a Ricky Martin… Aunque eres muy hermoso, tienes algo que dice, soy sexy pero raro… Umm… debes de serlo, eres gay, ¿verdad? ¿Así como Ricky Martin?—le preguntó iba a hablar mas pero se calló cuando vio la mirada del chico.

Este se acercó a ella y la tomó del brazo, halándola hacia el.

—¿Quieres saber lo muy gay que soy?

Sakura parpadeo confusa y sonrió para si con sorna. Al chico al parecer le molestaba que le dijesen gay, bueno a todos los hombres les molestaba que le dijesen que eran homosexuales, hería su gran orgullo masculino.

«Ummm, ese es tu punto débil, Chico Misterioso…», pensó ella sin borrársele la sonrisa de la cara.

—Por favor, todo el que es gay no lo admite… Ricky Martín no lo admitía… y todo el mundo lo sabia, solo que el se negaba… y al fin salió de closet, deberías hacerlo también… Nadie te juzgara…

—No soy gay, estúpida loca…

—¿Entonces quien era el chico rubio con el que estabas hablando, eh? ¿Era tu novio? Vienes aquí a verlo para que tus padres no se enteren, ¿verdad?—siguió ella, el juego estaba en su apogeo, no podía echarse para atrás.

No lo vio venir, pero el chico la empujó hacia el suelo y ella cayó de espaldas, pero nunca pensó que él se le subiría encima después. La miró con los ojos centellantes. Sakura pensó que una de sus fantasías se estaba haciendo realidad, tener al chico que le gusta de esa manera, tan cerca… Sin pensarlo dos veces, le pasó las piernas por la cintura, pegándolo a ella, atrapándolo.

—Estas loca…—murmuró el roncamente ante la acción.

—Tú me gustas…—le dijo sonriéndole—Te deseo…

Estaba tan cerca, podía oler su colonia, sentía su respiración agitada. Podía tenerlo para ella, al menos podía recibir un beso suyo, se conformaría con tan solo eso… Levantó una mano y la plantó en su mejilla, comenzando a acariciarla. El chico murmuró algo indescifrable y cerró los ojos.

—Ni siquiera me conoces…—le dijo él mientras volvía a abrir los ojos.

—Es cierto, pero se algunas cosas, tienes 18 y estas en el instituto verdad… Ese chico es tu novio…—murmuró esto ultimo intentando molestarle.

—¡No es mi novio!—gritó el chico y Sakura sonrió, había dado en el clavo de nuevo.

Sakura se apretó más contra él, apretando las piernas alrededor suyo, sintiéndolo donde mas quería. Sabía que era de atrevimiento, pero estaba desesperada, hacia mucho que no tenía un novio, o peor aun, que no daba un beso y era tocada.

«Ni siquiera recuerdo la ultima vez… Estúpida universidad, estúpido trabajo y estúpidas practicas nocturnas, me han quitado todo mi tiempo, con razón estoy tan desesperada, con razón estoy viendo a este chico como posible objeto sexual para mi…», pensó ella mientras comenzaba a mover las caderas, quería sentirlo más cerca.

—Deja de hacer eso…

—¿Hacer que…?—murmuró ella.

—Eso… No se que estas tramando…

—Tu sabes lo que quiero—dijo sin detener sus movimientos, lo estaba excitando y su cuerpo estaba respondiendo a ella. Típico de un adolescente como él. Excitarse con un simple roce… Tal vez era virgen… Aunque no podía ser cierto, era demasiado sexy para serlo.

«Que sabes tu, Sakura, seguramente es virgen, nada mas hay que mirarlo, parece como si se fuese a morir de los nervios…», pensó.

—Si… Se lo que quieres, pero no podemos tenerlo…—dijo el escondiendo la cabeza en su cuello.

—Tu nariz esta creciendo, pinochio…—murmuró ella en su oreja mientras con la mano que le sobraba, ya que la otra estaba acariciando su mejilla, la deslizaba hacia abajo, hacia donde sus cuerpos se tocaban y tocó lo que latía con ímpetu cerca de ella, por encima de la ropa.

El gimió y Sakura encontró aquello tan sensual, pero retiro la mano.

—¿Lo sientes?—le pregunto.

—Estas jugando con fuego… y ya sabes lo que va después…

—Eso es lo que siempre dicen—dijo ella riéndose. Era algo típico, solo esperaba que ese chico resultara ser un incendio que no se apagara nunca.

Ella volvió a llevar la mano hacia lo que palpitaba con frenesí, pero esta vez en vez de solo tocarlo, como pudo, metió la mano entre los pantalones del chico y lo tocó como quería, estaba muy caliente y estaba latiendo demasiado entre su mano, se sentía que era grande, esperaba que lo fuese.

—Saca la mano de ahí, loca…—murmuró el sacando la cabeza de su cuello y mirándola con enfado, pero Sakura sabia que a el le gustaba tenerla ahí, ningún chico se resistiría a eso.

—Soy Sakura…

—Como sea que te llames…

Sakura sonrió, el chico continuaba resistiéndose y no sabía porque, los chicos de esa edad pasaban el día entero pensando en sexo y otras cosas relacionadas a esta. ¿Acaso este chico no era igual que los otros?

Volvió a sonreír y tiro de su cabeza hacia abajo y aplasto sus labios contra los del chico. Él se quedo frio, quieto, ella deseaba que moviera los labios, así que fue ella la que tomó la iniciativa y comenzó a mover los labios, al instante el abrió la boca, respondiéndole.

Sus lenguas se encontraron comenzando una danza entre ellas. Sakura se sentía cada más acalorada y sintió más calor dentro de ella, cuando él le agarró el pelo con una mano, tirando de su rostro hacia él, tomando el control por completo.

Sakura gimió, el chico besaba de maravilla, retiraba todo lo dicho anteriormente, era espectacular, magnifico. Él se separó abruptamente y se quedó mirándola mientras respiraba agitadamente. Ella se relamió los labios, aunque había sido un beso ni muy largo ni muy breve, sentía los labios un poco hinchados.

—Eso era lo que querías…—murmuró el chico.

—Si, chico gay…—dijo sonriéndole

—Estas intentando provocarme, ¿verdad?—preguntó el con una sonrisa.

Sakura borró la sonrisa de sus labios. Dios, que sonrisa tenia ese chico. Debió de llevar una cámara para guardar ese recuerdo, una sonrisa muy bonita. El bajo al cabeza y volvió a besarla, hundió la lengua en su boca y fue él el que controlo el beso, Sakura se sentía demasiada anonadada con el para poder pensar por si misma.

—Umm…—gimió separando su boca y deslizándola hacia su cuello, el chico hizo lo mismo mientras le tocaba un pecho—Estas siendo muy atrevido…

—Y tu también… ni siquiera se porque te estoy tocando…—murmuró el apretándole el pecho.

Sakura gimió y el volvió a posar la boca sobre la suya. Comenzó a tirar de sus labios mientras llevaba las manos debajo de la blusa, tocándole con las puntas de los dedos el borde del sujetador, entro las manos por dentro de la prenda y tomo sus pechos con las manos.

—Dime tu nombre…—susurro Sakura.

—Sera un secreto…

—No, quiero que me lo digas…

—Sera más divertido si no sabes mi nombre…

—¿Acaso es de gay?—pregunto ella con una sonrisa.

—Estas frustrada con los homosexuales, ¿verdad?

—Umm… No—murmuró Sakura mientras ahogaba un gemido. El chico le estaba pellizcando los pezones.

—Ahh…—gimió ella.

El chico sacó las manos de su blusa y procedió a desabotonársela. Sakura dejo que lo hiciera, total si el no lo hacia, ella la rompería para más fácil. Cuando el desabotono los botones, dejó a la pelirosa en sostén, Sakura sabia que era rosa, pero seguramente el chico lo confundiría por blanco.

—Es rosa—le dijo.

El chico arqueo las cejas en la media oscuridad y Sakura sonrió.

—Sigue tocándome….

—Hmp…

Pero él no la toco si no que se quedo viéndola, se llevo las manos a su propia camiseta y comenzó a levantársela. Sakura deseo que hubiese más luz para ver lo que ahora el chico le estaba mostrando, pero, la luz de la luna solo podía ensombrecer sus rasgos.

La pelirosa llevo una mano al pecho del chico, posándola abierta sobre este, estaba caliente y el corazón le latía un poco rápido, comenzó a deslizarla hacia abajo, parpando con ella y asombrándose un poco cuando sintió que el chico, aunque no tenia los abdominales tan definidos como un luchador o un supermodelo, se sentían muy bien… se mordió el labio cuando volvió a deslizar la mano, esta vez mas abajo. Otra vez volvió a meter su mano entre los pantalones y lo toco.

El chico dejo escapar un gruñido.

—¿Te gusta?

—Eso no te importa.

—Eres más seco que un tronco…

—¿Qué clase de comparación es esa? Es estúpida…

Sakura sonrió y lo empujo. El chico quedo de espaldas al suelo y ella se le colocó encima, a horcadas. Pero él no se quedo atrás, el chico cogió su cabeza entre las manos y asaltó su boca de nuevo, casi sin darle opción a respirar, pero aquí entre dos, ella prefería que la besara.

—Besas de maravilla…—dijo rompiendo el beso, algo que ya se estaba volviendo un hábito.

—Yo ya lo se…—murmuró el mientras llevaba las manos al pantalón de Sakura.

Ella levantó las caderas encima de el, para facilitarle el trabajo. No era que quisiera darse rápido, porque deseaba disfrutar el momento, pero estaba desesperada por tenerlo dentro de ella. El desabotono sus pantalones y comenzó a tirar de ellos. Sakura se levantó y se los quito junto con las bragas, seria más fácil, vio como él tenía una cara muy lujuriosa.

Volvió a sentarse sobre el, el chico la agarró de las nalgas y presiono su centro contra el. Sakura gimió. Mientras el chico comenzaba a mover las caderas, torturándola, le estaba chupando los pezones. Sakura sentía como poco a poco, a cada segundo llegaba al orgasmo, quiso gritar, pero la boca del muchacho se tragó todo el grito, comenzando a besarla desesperadamente.

Sakura no se dio cuenta de cuando el chico se bajo los pantalones, fue lo suficiente para dejar su miembro al aire. El escabullo una mano debajo de ella, para acariciar su centro, adentrando fácilmente dos dedos en ella. El chico despego la boca de la suya y la miro confundido.

—Yo había jurado que eras virgen…

—¿Te decepcione?

El se encogió de hombros.

—Es más fácil… —y sin esperar a que ella dijera algo, saco los dedos de Sakura y se posesiono en su entrada, entro al momento de hacerlo.

La pelirosa grito, no de dolor, si no de placer. Sakura se sintió desfallecer, había pasado mucho tiempo desde la última vez y el chico, además de que era todo un manjar, la llenaba completamente. Sakura posó las manos en los hombros del chico y comenzó a moverse sobre el desenfrenadamente, arriba y abajo, cabalgándolo como una salvaje necesitada, obvio, de sexo.

Le clavo las uñas y el gimió, un sonido placentero para sus oídos. Sakura bajo la cabeza y lo beso, mientras seguía moviéndose como loca. Tal vez ella pareciera una salvaje, una prostituta por estar teniendo sexo con un adolescente que no conocía muy bien y estar actuando locamente, pero aquello era buenísimo, riquísimo, ni uno de sus mejores novios, Sasori, se comparaba con esto.

—Eres increíble…

El no dijo nada, solo siguió penetrándola y gruñendo, mientras murmuraba algunas palabras incoherentes, producto de que estaba llegando al igual que ella. Sus uñas se clavaron más profundas en los hombros del chico, no lo pensó, estaba tan encismada en su placer que no veía nada mas que eso.

«Pronto…», se dijo gimiendo…

Sakura sentía que otra vez estaba llegando al orgasmo, pero este era el mejor de todos, comenzó a rogarle por más, que la penetraras más fuerte y el lo hizo. Sintió como una oleada fuerte le daba una cachetada, subiéndola hasta los cielos, hasta el paraíso.

Ella llego, pero el no, al menos no todavía… El chico se dio la vuelta sin dejar de penetrarla, dejándola debajo de él. Esta vez su penetración era más salvaje. Sakura dejo que el terminara y lo hizo, con un sonido gutural que creyó que se había escuchado por todo el parque, el se desplomó encima de ella. Sakura lo abrazó con las piernas, dejando que se calmara. Dios, había sido la mejor sesión de toda su vida. Un novio como él, una pareja así era que quería… que la llevara hasta el cielo, aunque había sido algo parecido con su ex novio, este chico era mil veces mejor, además de tener esa cosa, aunque no la saboreo, era rica dando placer.

Se quedaron tendidos en el suelo jadeando por la reciente actividad. Sakura se dijo que estaba loca por haberlo hecho con alguien a quien no conocía, ¿que había estado pensando?

Sintió como el chico comenzaba a levantarse aligerando su peso, sin salir de ella, se quedo de rodillas frente a la pelirosa, con las piernas de Sakura alrededor de su cintura.

—Eres una dinamita…—le dijo.

—Siento serlo…

—No paraste hasta que me tuviste entre tus piernas…

—Eso fue muy cruel…

—¿No era eso lo que deseabas?

—Pues si, pero yo quería mas que tener relaciones…

—¿A que te refieres?—pregunto su chico mirándola confundido.

Ella no podía decirle que lo deseaba como novio. Apenas se conocían, no sabia nada de él, solo pocas cosas no importantes. Ella deseaba conocerlo completamente, sus rutinas, sus hobbies, que le gustaba, que le desagradaba…

Su chico misterioso se levantó por completo, saliendo de ella y comenzó a arreglarse sus pantalones, luego dio un paso hacia atrás, recogió su camiseta y se la puso rápidamente.

—¿Te vas a ir?—le pregunto Sakura tontamente.

—Este parque tiene un vigilante… Me he extrañado de que no este aquí… Aunque no es muy tarde…—murmuró esto último sacándose un móvil del pantalón, según lo que vio Sakura, porque le alumbraba la cara.

«¿Lo había tenido antes ahí?», se pregunto Sakura.

El cerró el móvil. Sakura se sentó de rodillas. Recogiendo su ropa que no estaba tan esparcida, se la coloco rápidamente y recogió su mochila que estaba tirada por ahí. Miró al chico, el seguía en el mismo lugar, de pie, mirándola igualmente.

—¿No te ibas?

—¿Acaso quieres que me vaya?

—¿Acaso quieres seguir esto en otra parte?

El sonrió.

—Me gustaría, pero… Tengo que llegar a casa, es muy tarde…

—Ah, el niño de mami…—murmuró ella con una sonrisa.

El se encogió de hombros pero no dijo nada, se quedo como estaba observándola. Sakura se mordió el labio, estaba nerviosa y esa mirada que el tenia la ponía mas nerviosa.

—¿Nos volveremos a ver?—preguntó, intentando romper el silencio con una pregunta importante para ella y estúpida para el.

—¿Tu que crees?

—No lo se, seguramente me ignoras después de esto… Y tal vez nunca volverás aquí, porque tendrías miedo de verme…

El volvió a encogerse de hombros.

—Quizás…

—No es justo…

—Lo se…—dijo el.

Sakura miro como su chico no tan misterioso con una sonrisa en los labios se daba la vuelta y se iba, desapareciendo entre los arboles. Suspiro. Tal vez nunca lo volvería a ver o quizás si, porque regresaría al parque a acosarlo de nuevo. Solo esperaba que el volviera, para poder verlo de nuevo.

Sonrió… Tal vez debería dejar la medicina y hacerse detective, dedicarse a acosar chicos, pero aquello no resultaría. Era una lastima que el chico fuese menor de edad y ella una chica que ya pasaba los veinte. Si hubiese sido mayor lo habría secuestrado y se hubiera quedado con el para siempre.

—Umm… Mejor dejo de acosar y me voy a mi casa…—dijo ella mientras comenzaba a salir a la "civilización", cuando estaba saliendo del parque, pero se detuvo perpleja. Lo había olvidado…

Nunca supo su nombre… u_u

.

.

.

Notas Finales:

Amy don't kill me babe… ^^ Hice el Lemmon "suavecito" para no parecer más pervertida ante mi hija.

1. Eight Legged Freak (Arack Attack) Yo la conocía como Arañas Patonas, ahora fue que vine a saber que se llamaba así.

2. Lo de la nariz de pinochio, no recuerdo donde lo vi, pero me pareció muy gracioso y estaba buscando en mis apuntes y lo encontré. Me pareció perfecto para la situación… ^^

Yo pensando en el libro de Amanecer, el que tengo tiene un grosor espeluznante, pero ese me lo leí rápidamente, eso si, luego de dejar mí vicio en la pc y del celular. Se que hay otros libros mas gruesos que ese, pero me pareció poner ese para que alargara la estancia de Sasuke en el parque, ya que solo he visto ese asi, además de los manuales que eso es otra cosa…

No puse de que trataba el libro, pero imagínenselo como ustedes quieran ^^

Por primera vez hice un fic en el que Sakura no es virgen, pero déjenme decirles que a mi me encanta hacer Sakura virgen sin experiencia alguna, la manejo mejor, creo que por eso siempre la hago así.

¿Cómo estuvo el Lemmon? Quise hacerlo suavecito, pero creo que no me salió así u_u ¿o les aprecio un poco suave?

¿Un comentario? ¿Les gusto? Lo admito… u_u no sirvo para esto… u_u Los OS No son mi fuerte…