Solomon llegó al "Zoológico". Diva lo había citado allí hace unos minutos, entonces oyó su voz detrás de el:
-Ven conmigo.-le dijo, Diva.
Lo llevó a dentro de la antigua mansión de los Goldscmiths y lo condujo a la habitación de Saya. Ella ya sabía donde quedaba porque la había visto cuando provocó una masacre en el cumpleaños 72 de Joel.
Diva se acostó en la cama de saya y le dijo a Solomon:
-Ven, acuéstate conmigo.-le dijo con una voz un poco seductora.
Solomon obedeció, se acostó al lado de Diva.
-¿Para qué me has citado?
Diva sonrió con picardía y sus ojos resplandecieron con un tono turquesa brillante.
-Bien, pues.-sacó un frasco, ahí había un contenido rojo, parecía sangre.-la compañía Cinco Flechas me dio este suero, que me permite reproducirme con uno de mis Caballeros, pero solo uno.-Solomon estaba sorprendido. Diva adivinó lo que pensaba.-Si, te he elegido a ti.
Sin previo aviso, lo besó.
El beso era demasiado apasionado, hasta Solomon creyó al principio que saldría lastimado durante el proceso, dado que Diva, al ser una Reina Quiroptera, tenía más fuerza que el, pero durante cada segundo del beso lo estuvo disfrutando.
Y por ultimo, se desvistieron.
Unas horas después, ambos yacían desnudos, dormidos, cada uno en los brazos del otro, y Diva tenía unos futuros quirópteros creciendo dentro de ella.
Al día siguiente, en las afueras de la mansión Goldscmith.
Diva estaba caminando, buscando a alguien al parecer, hasta que lo encontró. Van Argiano.
-Gracias por el suero, monsieur Argiano.
-De nada. respondió serenamente el científico, mientras le ofrecía uno de sus muchos caramelos. Diva lo rechazó, recalcando el hecho de que ella no consumía comida humana.
Como todo escritor espero que les haya gustado, así, ya saben, sus reviews me motivan, y me alegran el día, y también me animan a publica el siguiente capitulo de este fic.
