Todos los personajes mencionados en este FanFic pertenecen a DreamWorks.
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Silencio y oscuridad, aquello era lo único que podía apreciar... un silencio que parecía inquebrantable y una oscuridad que amenazaba con consumir todo rastro de vida.
Hasta que una risa, cantarina y más que conocida por ella, desquebrajó todo esquema de soledad existente. Era una carcajada alegre, pero lo que sintió al escucharla fue seguridad. Así es, se sintió segura, sabía que nada malo podría pasarle si aquella risa la acompañaba en su melancolía.
—¿Por qué tienes esa cara? ¡Sonríe! Eres más linda cuando lo haces.
Ante aquel comentario, cualquier signo de oscuridad se desvaneció. Ahora podía contemplar al propietario de la simpática risa: poseía unos hermosos ojos con una tonalidad similar al café, enmarcados por un cabello desprolijo y castaño.
Aquel muchacho era su difunto hermano.
— Jack... – Lo llamó en un susurro apesumbrado, mientras sentía como las palabras se acumulaban en su garganta, sin intenciones de salir de ella –
El aludido simplemente le sonrío.
— Emma ¡Creciste mucho! Estoy feliz de verte, te extrañaba – Y al decir esto, el gesto en el rostro de el se ensanchó considerablemente –
Aquellas palabras causaron un tibio calor en su corazón. La extrañaba... su hermano no tenía ni la más remota idea de lo mucho que ella lo añoraba cada día de su vida. Jack era la diversión y la bondad en su estado más puro, y había muerto para salvarla... había muerto por su culpa.
Las lágrimas comenzaron a surcar sus sonrosadas mejillas.
— Jack... espero que en algún momento seas capaz de perdonarme. Yo también te extraño y n-no existe un día en el que no te piense – Balbuceó entre temblores producidos por el llanto –
Intentando consolarla, la acunó en sus brazos, acariciando su largo cabello. El abrazo solo gestó más sollozos en Emma, ella había anhelado ese contacto muchísimos años, incluso más de lo que le gustaría admitir.
—No hay nada por lo que deba perdonarte, para mi es una alegría verte sana ¡Estás hermosa! Y también pareces ser una chica inteligente, estoy orgulloso de ti – Con suavidad, limpió cada indicio del llanto presente en el rostro de su hermana – Te amo, nunca me arrepentiré de haber dado mi vida por ti, así que no quiero verte triste por eso.
Emma abrió los ojos, los brazos de Jack ya no la protegían. Ahora estaba sola, en las penumbras de su habitación.
Aquello había sido solo un sueño. Sin embargo, sonrió. A pesar de que el sol que iluminaba sus días se había apagado hace ya quince años, siempre le daría calor en los confines de su mente y corazón.
Jackson Overland Frost siempre sería su único sol.
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Me inspiré en la canción "My only sunshine" de Elizabeth Mitchell para este escrito, aunque honestamente no estoy muy conforme con el resultado. Ustedes dirán... ¿Tomatazos, aplausos? Como siempre, cualquier opinión es aceptada, las críticas son productivas sean buenas o malas.
En fin ¡Besos! Muchas gracias por tomarse el tiempo de leerme, espero encontrarlos en otra lectura :)