ADVERTENCIA: Este fic no contiene, es YAOI. En este primer capítulo no he llegado a meter LEMON pero planeo hacerlo enseguida ^^ Y el que avisa no es traidor (LLL)
Os dejó aquí el primer capítulo de un fic que me venía rondando por la cabeza desde que terminé el Crisis Core (¡Gran juego! Menuda llorera con el final tío ;__;)
Tenía el primer capítulo desde hace bastante tiempo escrito en unos papeles cuadriculados en mi carpeta pero como he estado de examenes y con entregas de trabajos no pude pasarlos a limpio. Bueno, y que tampoco se me había ocurrido como continuarlo, para ser sinceros ^3^… Pero… anoche antes de meterme en la cama me vino la grandiosa inspiración y he aquí esta… cosa. Yo no estoy muy conforme con ello, para variar… pero bueno XD
Y ¡Ah! Ya he empezado con el tercer capítulo del fic de Rain pero… estoy teniendo problemas técnicos y no he podido terminarlo =3
---Fin del comentario---
Aún recuerdo su silueta desapareciendo. A medida que se iba alejando notaba que le perdía, que se iba y sentí que nunca más le volvería a ver, que se iría para siempre.
"No, no te vayas"
Intenté alcanzarle y haciendo acopio de las pocas fuerzas que me quedaban estiré mi mano hacía él. Pero no fue más que un gesto inútil, no debió darse cuenta de que le intentaba llamar o simplemente me ignoraba.
Siguió caminando hasta desaparecer y antes de verle por última vez sólo escuche el sonido de los disparos.
* * * * *
¡Maldito Génesis! ¡Maldito Hollander! ¡Y maldita también su sagrada estampa!
De verdad deberían buscarse un maldito hobby y así dejar de liarla parda. Ahora gracias a su trabajo en equipo a Sephirot se le habían cruzado los cables y ahora se negaba a salir de aquella especie de biblioteca subterránea bajo la masión Shinra.
Según lo que había dicho Génesis, la madre de Sephirot era un un meteorito que llegó a la Tierra hace cosa de 2000 años. Una tal Jenova con unas células con capacidades asombrosas, y Génesis quería esas células. Estaba degenerándose más rápido de lo que pensábamos y por eso se habían presentado él y su dichosa Loveless. Estaba seguro de que si Génesis no hubiera leído ese libro durante su juventud todos seríamos mucho más felices.
Y para cuando había conseguido salir del reactor de mako Zack se había encontrado con un Cloud que había resultado herido tratando de proteger a Tifa (Que no estaba nada mal la chavala, todo había que decirlo…) y que ahora se encontraba tumbado en la cama de la lado.
¡Joder! ¡En un principio se trataba únicamente de una misión de reconocimiento! ¿Por qué se tenían que torcer las cosas de aquella manera?
Encima Aerith le había llamado en un momento muy delicado y se había visto obligado a colgarla. Y ahora no quería llamarla porque seguramente estaría durmiendo y no quería despertarla. Genial.
Y ahora estaba en aquel pequeño hotel en aquel lugar allá en el culo del mundo intentando dormir sin resultado.
Se incorporó y apoyó la cabeza en el cabecero de la cama, con tantas cosas en la cabeza le resultaba imposible dormir.
Un resquicio de luz iluminaba la espada enorme apoyada contra la mesa.
"Angeal… ¿Qué habrías hecho tú?
Frunció el ceño. Realmente no llegaba a comprender como había terminado todo de aquella manera por mucho que repasara mentalmente lo sucedido… Si no hubiera ocurrido nada durante aquella misión en Wutai…
"¡Joder!"
Estuvo jurando mentalmente mientras se incorporaba del todo y salía de la cama. Si era imposible dormir ¿Para qué intentarlo? Se acercó a la ventana y miró al exterior. Pudo distinguir perfectamente la especie de depósito que se encontraba en el centro de la plaza como único elemento que la hacía algo especial. Por lo demás nada la diferenciaba del resto de las otras plazas. Ya no quedaba ninguna luz encendida por lo que dedujo que ya era noche cerrada o incluso madrugada.
Levantó la vista intentando distinguir desde ahí el reactor de mako, pero ni siquiera se podía distinguir el resplandor verde característico ya que una piedra enorme con pequeños atisbos de vegetación, comúnmente denominada montaña se interponía entre él y su objetivo. Y por eliminación tampoco fue capaz de distinguir la mansión Shinra donde Sephirot se había encerrado.
-¿Zack?
-¡Uah!
Que le llamaran así de repente sin venir a cuento haría a cualquiera sobresaltarse. Giró y descubrió que era un atónico Cloud quien le había llamado de aquella manera.
-¿Lo… siento?.- Era evidente que el rubio no se esperaba esa reacción por parte de Zack.
-Nada, nada…culpa mía… creía que estabas dormido. – Luego reparó en lo que acababa de decir.- ¿Tu tampoco puedes dormir?
-No…- Contestó el otro agachando levemente la cabeza.
-Hoy ha sido un día muy largo ¿verdad? –Zack empezó a caminar alrededor de la habitación sin rumbo fijo mientras apoyaba las manos en la cintura. El silencio que obtuvo como respuesta lo interpretó como un sí.- ¡Ah! ¡Ya sé que podemos hacer!
-¿Eh?
Siendo Zack como era se le podría haber ocurrido cualquier cosa, sólo quedaba esperar que abriera la boca para ver que brillantez se le había ocurrido.
-¿Por qué no nos vamos a contar estrellas?
-¿Perdón? –El SOLDADO de tercera clase Cloud Strife acababa de ser espectador de una idea majareta, lo que era más, le daba la impresión que ya por fin había logrado dormirse y ahora estaba teniendo un sueño extraño.
-¡Sí sí sí! ¡Anda venga! ¡Que estoy seguro que desde aquí no se ven las mismas estrellas que en Gongaga!
-¿Pero qué dices? Si es el mismo cielo en todas partes. -¿Cómo rayos había llegado a soldado alguien tan idiota? –Además es peligroso, Nibelheim está lleno de monstruos y en la oscuridad no seremos capaces de distinguirlos.
-¡Va a ser peligroso! ¡Venga ya! ¡Por algo he llegado a primera clase Cloud! – El moreno ya volvía a darse aires de grandeza aunque sus argumentos no resultaran muy convincentes a ojos del rubiales.
-Pero Zack…- Iba a replicar pero Zack le empezó a tirar del brazo sacándolo de la cama.
-Anda venga Cloud, total yo no puedo dormir, tu tampoco y a estas horas en la TV no echan nada…- Paró en seco cayendo en cuenta de que tipo de programación era bastante problema que estuvieran emitiendo en algún canal a altas horas de la madrugada, y por su expresión no era muy difícil de adivinar.- Oye Cloud…¿Y si…?
-¡NO!- Cloud salió de la cama de un salto, se calzó las botas más rápido aún y obligando a Zack a agarrar su espada desproporcionada lo sacó de la habitación y después del hotel. Tal vez no era momento de ir a ver las estrellas, pero lo último que le apetecía era ponerse a ver pornografía durante el transcurso de una misión.
* * * * *
-… treinta y siete, treinta y ocho, treinta y nueve…a ver… ¡Cuarenta! Cuarenta y uno… -Zack iba señalando las estrellas con el dedo, mientras Cloud miraba vagamente hacía donde indicaba este e imploraba a alguna divinidad que por favor Zack se cansara pronto y pudiera volver a la reconfortable cama del hotelito del pueblo.
Aunque muy en contra de sus deseos siguieron así lo menos una hora. Zack habiendo llegado a los 170 astros celestes había perdido la cuenta varias veces y se había visto obligado a empezar de nuevo varias veces, hasta que decidió romper la abstracción del otro.
-Cloud
-¿Sí?
-No estás contando estrellas –Afirmó.
-¿Eh? –Por supuesto que no estaba contando estrellas, tenía ya una edad y un poco de amor propio.
-Que no estás contando estrellas.-Volvió a afirmar el moreno incorporándose.
Cloud ante tal evidencia no dijo nada. Ni estaba contándolas ni pensaba hacerlo, únicamente estaba cansado y quería irse ¿Tan difícil era de entender? Si le había arrastrado hasta ahí era porque no estaba dispuesto a ver a través de un televisor como una pareja realizaba el coito.
-¿Sabes Cloud? En Midgar no puedes ver las estrellas.-Zack dirigió la mirada al firmamento cuando empezó a hablar. Había cruzado las piernas y tenía las manos apoyadas sobre las espinillas. Este gesto se le antojo muy infantil a Cloud. – Hay demasiadas luces y hay que irse bastante lejos para poder ver alguna.
Cloud no dijo nada, simplemente se incorporó y se quedo sentado a su misma altura. Era verdad que no se podían ver el firmamento estrellado en Midgar, pero él estaba siempre muy ocupado con las misiones y con los entrenamientos de SOLDADO como para preocuparse de estas cosas.
-En Gongaga – continuó el moreno – no me solía parar a mirarlas mucho que digamos pero no sé… cuando entre en SOLDADO se me debieron cruzar los cables o algo. Estuvo callado durante unos segundos como si estuvieran analizando algo y después se levantó con un salto.
-¡Arf! ¡Ahora sería el momento perfecto para que pasara una estrella fugaz! –Y tenía razón, si en vez de Zack y Cloud hubieran sido un William y una Mary Sue habría sido lo ideal, pero como no se daba el caso no ocurrió lo que esperaban que ocurriera. – Bueno…no ha habido suerte… ¿Te parece bien que volvamos a seguir intentando dormir?
-Sí –Cloud hizo todo lo posible para ocultar su entusiasmo.
Se levantó y volvieron al hotel a intentar seguir durmiendo como decía Zack, la cosa es que lo consiguieron a la primera.
Continuará…
