Nota: Este es un fanfic que poco tiene que ver con la trama original de Cazadores de sombras, pero aun así lo considero un buen trabajo, espero que les guste. Dejen sus comentarios, gracias :3

PD: También es mi primer trabajo, así que cualquier opinión acerca de cómo está la pueden dejar…

Prologo:

Hay dos maneras de llegar al desastre: Una, pedir lo imposible; otra, retrasar lo inevitable.

(Gambó)

Estaba tan concentrado pensando en un lejano sueño que se sobre salto al percatarse de que ya no se encontraba solo.

Su mirada recorrió las facciones de su novia, que a su lado leía con notable interés una revista. Tuvo el impulso de besarla, pero al ver el poco interés de la chica dejo a un lado la idea y siguió comiendo.

-He tenido un sueño –dijo a la nada. Su novia paso la hoja de la revista que fue, por unos cuantos segundos, el único sonido que se escuchó.

-¿Qué ha sido?

-He soñado con una chica –dijo escondiendo la mirada. La chica dejo la revista a un lado y le vio un poco molesta y de brazos cruzados.

-¿Y quién era?

-No lo sé.

-Es imposible que hayas creado una persona de la nada, debiste haberla visto en algún momento y recordar su rostro hasta hace poco.

-Tienes razón.

-¿Y qué soñaste?

-No lo recuerdo, solo recuerdo su rostro.

-¿Y cómo es?

Se quedó callado cuando estuvo a punto de hablar. Habría querido decirle que era hermosa, pero eso causaría conflicto.

-Muy risueña y joven, era casi una niña –dijo en su lugar.

La chica, que ya parecía aburrida asintió.

-¿Y qué más?

-Nada más –admitió concentrándose en su almuerzo.

Ella tomo la revista y volvió a hojearla, el muchacho seguía pensando en el rostro de la muchacha, tan claro, como si no hubiera sido un sueño, sino algo más.

Esa noche volvió a soñar con ella, pero esta vez ella era un poco más mayor, en su rostro había una especie de golpe, pero todavía sonreía, le sonreía a él, y de repente desaparece. Intento llamarla, al principio suplicaba que volviera, pero en cuanto estuvo a punto de pronunciar su nombre, cuando por fin ella tendría uno, él se despertó inquieto. Su mirada recorrió su habitación por completo y se percató que estaba sudando a mares y de que había estado llamándola, incluso en la vida real. Su madre abrió la puerta de golpe.

-¿Ocurre algo? –pregunto su madre, que apenas se estaba poniendo la bata pues el susto la había lanzado de su cama directo a la habitación del chico.

-Ha sido solo un sueño –dijo con la mirada perdida en la nada. Ella se sentó al pie de la cama.

-Sabes que puedes contar conmigo para lo que quieras –dijo ella.

-No recuerdo el sueño, solo recuerdo que ella estaba ahí.

-¿Ella? –la cara de la mujer dio paso a una confusión.

-Sueño con una chica y no puedo evitar sacarla de mi mente –explico un poco tímido- ¿Crees que eso sea normal?

-No lo sé –dijo la mujer intentando no alarmarse- intenta dormir de nuevo.

Asintió sin mucha fe en que dormir estuviera en los planes de esa noche.

-Buenas noches, mama.

-Buenas noches, Jace.

La mujer salió y llamo a su hermano. Este tardo un poco en responder.

-¿Isabelle?

-Alec, tienes que volver –dijo caminando de un lado a otro.

-¿Volver? ¿Qué ha ocurrido?

-Es… Jace, creo… creo que está volviendo a recordar todo.

Alec tardo unos segundos antes de entender lo que su hermana intentaba decirle.

-Está bien, voy para allá.