Ninguno de los personajes me pertenece, esto se salio totalmente de control, en fin, tenia que darlo a la luz.

Lentamente descendió de su moto, sin perder detalle del lugar, manteniéndose alerta a cualquier sonido o movimiento fuera de lugar en un "típico" pueblo de Iowa, desperezándose, sacudió levemente de su cazadora el polvo que el camino había depositado en el, mientras que de forma distraída verificaba que sus armas estuviesen a su alcance.

Al fin decidió dar una vuelta por el lugar a pie, según sus informantes este era el lugar, así que solo tenía que encontrar aquello que lo verificaría y le daría una pista para su objetivo, observando atentamente todo a la luz de la luna, camino sin rumbo, solo siguiendo a su sexto sentido, aquel que lo había salvado innumerables veces de la muerte, o lo había conducido a las pistas correctas, y en verdad que lo necesitaba, la pista que le había dado a la Orden era ínfima, solo el nombré del lugar y la pista que debería encontrar, como si en verdad hubiese alguna diferencia extraordinaria en los gatos, en fin, vagaría un poco por el lugar mientras llegaba su Sanador particular el hechicero McCoy, un experto en su materia, pero demasiado sobreprotector para su gusto.

Mientras caminaba una parte de su mente comenzó a imaginar las quejas que su compañero le daría cuando se encontraran, jejejeje, aunque si tenía mala suerte para el, buena para su doctor, no abría nada en este lugar, mmmm, aunque quien sabe.

Sus pasos lo llevaron lentamente a las afueras del pueblo, cansado de su búsqueda infructuosa, se sentó en un tronco, mientras observaba el silencio un extraño ruido llamo su atención, buscando por el lugar, observo a lo lejos la figura de un gato, cuando la luna lo ilumino su asombro fue mayúsculo, era un animal digno de un rey, largo, estilizado, de un pelaje negro, tan negro que a veces podía ver reflejos azulados saliendo de el, ojos fosforescentes, aunque por un breve instante abría jurado que eran del color del chocolate caliente, levantándose en silencio comenzó a seguir al extraño animal.

Intrigado observo que el minino se adentró lentamente en el bosque, después de una breve caminata logro divisar a lo lejos un claro del cual salía una extraña luz, acercándose árbol por árbol, logro llegar a un punto cercano a la fuente de la extraña luz, solo para ver en el suelo dibujado un extraño pentagrama, y en el centro una fogata que despedía una luz verdosa, cerca de ella una alta figura encapuchada recitaba un arcaico conjuro, del cual intento captar algunas palabras.

El gato simplemente camino hasta colocarse al lado del encapuchado, cuando este noto su presencia, se inclinó hasta tocar al animal en el lomo, este se arqueo levemente mientras soltó un breve ronroneo, una suave risa salió debajo de la capa, mientras se levantaba sus manos procedieron a dejar a la vista su rostro.

Su sorpresa fue mayúscula al ver emerger el rostro de una bella mujer morena, peinada con una cola de caballo que sujetaba un largo y sedoso cabello, nada en sus facciones demostraba una mala intención o un esencia de maldad, no podía creer que ese fuese el rostro de la bruja mas peligrosa de su época.

Aquella que según los rumores había dedicado su vida a la liberación del Señor de la Muerte, quien había matado a un buen número de cazadores y hechiceros que habían intentado oponerse a sus deseos, incomodo, se recargo en el árbol que lo escondía, no estaba preocupado por su seguridad si no por la de Bones, si el llegaba en este momento bien podría salir herido, el que fuese un sanador y experto en hechizos de defensa no lo hacía un oponente indicado para la bruja, Uruha creía recordar que se llamaba, así que tendría que improvisar, su mayor ventaja es que a pesar de ser un cazador podía realizar hechizos de ataque, era en estos momentos que agradecía su suerte, ya que mientras esa habilidad en su infancia lo había hecho objeto de los maltratos de su padrastro al considerarlo un ser maligno, en este momento era su mayor carta del triunfo.

Decidido se asomó levemente para poder calcular una buena posición para su ataque, lamentablemente nada salio como lo había planeado, al momento de asomarse solo observo a la bruja en su sitio, pero no había rastro del gato, extrañado dio un vistazo a su alrededor, solo para encontrar el gato en sus pies.

En que momento el felino había logrado llegar junto a el, no escucho ningún sonido o percibió algún movimiento extraño a su alrededor, como cazador estaban protegidos con un fuerte campo de energía alrededor de su cuerpo y el gato, si el gato, había pasado a través de el sin delatar su presencia, eso se ponía mas feo a cada instante, aturdido, decidió sacar su arma y dispararle al minino, pero al hacerlo el gato en vez de correr se le quedo mirando fijamente.

Sin ningún titubeo disparo para después lanzarse al centro de la explanada y disparar también contra la bruja, mientras que con su mano libre comenzaba a invocar un hechizo, pero al momento de apuntar observo que la bruja solo lo miraba con una extraña sonrisa en su rostro. Sin pensar en por qué disparo, notando que la bruja recibía la bala sacralizada en su cuerpo, mientras levantaba los brazos y continuaba recitando el conjuro se dejó caer a la hoguera.

Shokeado observo como la pira crecía y el cuerpo de la bruja era envuelto en las llamas que habían cambiado de tonalidad de verde a negras con tintes rojizos, acercándose lentamente, comenzó a recordar las palabras que la bruja había recitado antes de caer:

-"Y al recibir la liberación de parte de tu elegido, mi cuerpo te liberara de tu cárcel inmortal para que reines de nuevo en este mundo ilógico y sin sentido"

Mientras trataba de descifrar el significado de esas palabras apenas si noto como el gato se acercaba a la pira, solo hasta que percibió como comenzaba a adentrase en ellas reparo en lo bizarro de la situación, las llamas se apartaban para dejarlo pasar hasta llegar al centro de las mismas, en ese momento las flamas crecieron hasta formar un capullo que rodeo al gato hasta hacerlo desaparecer.

Su conciencia con una voz muy parecida a la de Bones, le instaba a darse la vuelta y correr, pero su instinto aquel que siempre lo había salvado le susurraba quedarse y observar lo que pasaría, aun sin decidir el curso de acción, las llamas se abrieron para dar paso a un ser excepcional, alto, de porte elegante, rasgos graníticos que denotaban un poder primordial caminaba levitando por el suelo en su dirección, unos ojos oscuros como el chocolate, lo observaban si pestañear, mientras se acercaba noto como llevaba sus manos en la espalda, indicando tal vez que no tenia intención de herirlo.

Aun sin creer en ello, lo apunto con su arma, mientras el hechizo que estaba en su mano crepito para direccionarlo al ser que tenia ya casi delante de el.

-Alto, no se quien seas, pero creo que tendré que regresarte al lugar del que vienes sin haber conocido mucho del lugar.-

Ante sus palabras el desconocido solo levanto una ceja y siguió caminado hasta detenerse frente a el, al mirarlo de cerca observo que sus orejas eran puntiagudas, signo inequívoco que lo marcaba como parte del mundo demoniaco.

Con esto solo disparo mientras dejaba ir su ataque mágico, solo para notar que en realidad solo lo había pensado, porque su cuerpo se había negado a responder, una de sus manos había soltado el arma y la otra solo había resbalado desapareciendo el hechizo al instante.

Mientras tanto el ser, solo había extendido la mano sobre su rostro, al sentir su tacto, un cumulo de imágenes estallo dentro de el, en ese momento se dio cuenta que jamás habría podido lastimarlo, el había nacido para este momento, para estar a su lado, era parte complementaria de aquel a quien llamaban Señor de la Muerte, y si este había decidido pisar el mundo terrenal solo había sido para buscar a la otra parte de su alma, la cual le había sido arrancada cuando la Orden, había realizado extraños y peligrosos hechizos en busca de un arma mortal que podría destruir a los seres mágicos que habitaban estas tierras, cuando consiguieron un ser de gran poder lo encarnaron en el cuerpo de un bebe aun no nacido, el.

Su sexto sentido solo era la presencia de su amado quien lo había protegido a toda costa hasta el momento en el que se reunieran, suavemente se recargo en el pecho de Spock, mientras las imágenes y el conocimiento lo abrumaban este lo tomo posesivamente de la cintura hasta pegarlo a el, demostrando que jamás lo dejaría ir de nuevo, lentamente asintió mientras las fuerzas que se agolpaban en el lo hacían perder el conocimiento.

Spock lo sostuvo brevemente hasta cargarlo totalmente en sus brazos, deleitándose con el rostro de aquel a quien siempre había buscado, molesto con la Orden que los había separado una leve sonrisa apareció en su rostro, ya que ahora ambos eran libres, podrían tomar su venganza, si era deseo de Jim destruir la Tierra lo haría con gusto, aunque observándolo lo dudaba, de ambos el era el más generoso y bondadoso de los dos, pero sin importar lo que dijera, al menos la Orden pagaría sus crímenes cometidos en contra de ambos, silencioso, camino hacia la salida del bosque, esperando con impaciencia el nuevo día.

Notas: se suponía que entraría al concurso de Cat, pero no le preste atención a todos los detalles, imagine el gato y la historia, pero al final no era nada de lo que tenía que ser, al final decidí escribirlo para poder centrarme en algo que si vaya dentro del reto, jejejeje, suerte a todos, besos