Naruto, ni personajes son de mi pertenencia u.u
SasuSaku
No. Las cosas suceden porque tienen que suceder. Ellos se conocieron así...
Incongruente
Creo que esa noche estuve medio tomado. No. Es extraño, aunque creo que la palabra más adecuada sea ridícula, pues escribo un diario y distorsiono las situaciones según como me hubieran gustado que ocurriese, lo cierto es que, ahora, solo estoy divagando… retomando. Esa noche estaba que espumaba por la boca, había vomitado tres veces, una en mi zapatos, otra en el macetero que terminé rompiendo y otro en las instalaciones de una cafetería muy mona, el orden de cada suceso no lo puedo recordar pero sé que las piernas casi no podían soportarme a cada paso que lograba dar. Sí. Me caí el triple de veces de las que vomité, seguramente de las maneras más vergonzosas, pero tengo por alegato que… estaba tan mamadaso, que hasta el nombre olvidé.
Recuerdo haber cruzado calles, muchas en realidad, infinidades de calles, recuerdo voces regañándome o quizás insultándome, la verdad es que no sé porque estoy escribiendo esto, debería estar resolviendo otros problemas más interesantes que perder mi tiempo haciendo mierdas en un cuaderno que… ni siquiera es mío, es rosa.
Rosa. Como su cabello. Sí, tengo que admitir que era linda. Noo, en realidad miento, era muy hermosa, por la puta que me engendró, la tipa era un monumento que me hubiera encantado esculpir con mi cincel de nacimiento… tenía unos ojos grandes de un verde hierba, era linda, lo malo fue que tuvo que presenciar mis más tristes actuaciones y estuve en total de acuerdo cuando su cara se tornó de espanto, es posible que oliera a orines… o quizás era el vómito el que la llevó a arrugar esa nariz respingona llena de curiosas pecas. Pensando que las cosas deberían estabilizarse, queriendo ganar puntos a favor y limpiar de algún modo la apariencia ya de por sí mugrosa, desaliñada, asquerosa que presenté, bochornosamente a gatas, me situé en los peldaños que daban a la entrada de una casa pintarrajeada en verde limón, que por mera casualidad resultó siendo la casa de esta chica… la cual nunca me dio su nombre. Recuerdo que… no, en realidad creo que… no, como sea, la cosa es que para terminar empeorando más mi situación de… alcohólico anónimo, el cuerpo me venció y la cabeza se me fue hacia atrás, el golpe ni lo sentí y de ahí…
De ahí… solo puedo recordar que estaba en casa, con la cara de mi hermano a cinco centímetros con un vaso de agua caliente en mano. Creo que bebí el agua y escupí en la cara mi hermano porque al final resultó que el líquido transparente no resultó ser agua, no sé con exactitud lo que bebí. Tiré a dormir como tres horas quizás, no almorcé… no, el estómago estaba demasiado resentido supongo, decidí coger la ducha y tratar de retirar los residuos de los vértigos… pero que sorpresota me llevé al encontrar este cuaderno en mi bolsillo del pantalón.
No es mío, yo no suelo cargar cuadernos rosas en mis bolsillos, y menos con iniciales como H.S. es por eso que pensé que podría ser tuyo, dado que me gustas quise venir y entregártelo personalmente y de paso… preguntarte porqué no me diste tu nombre cuando te lo pregunté.
- Eso fue porque nunca llegaste a preguntarlo, pero… Soy Haruno Sakura. Y tú también me gustas. Y aunque suene incongruente. ¿Te importaría escribir tu nombre al final de este cuento?
Notas finales:
Así terminó, o empezó... ?
En fin...
Si no les suena incongruente, les importaría decirme que les pareció en un review? XD
Saludos. Suerteeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee...
